𝑪𝒐𝒏𝒕𝒓𝒐𝒍 | ᴇsᴛᴇʀ ᴇxᴘᴏsɪᴛᴏ/ᴛᴜ

IX

______ decidió ir a la cafetería "inconscientemente", lo cierto era que quería ver a Ester y tenía la esperanza de encontrarla en ese lugar, al entrar se sorprendió al verla en una mesa con un libro en mano y su café. 

Soltó un suspiro antes de acercarse a ella, la necesitaba en su vida. A cada paso que daba sintió el remordimiento por haberle mentido a Emilia y no haberle dicho de su primer encuentro accidental con la española, y su reciente búsqueda. 

Pero era algo inevitable, anoche había soñado con ella como si su relación estuviera bien sin el molesto de Adrián en medio o su familia recalcando la contante manipulación de la ojiverde a la hora de las decisiones de su vida.

—Ester—la llamó interrumpiendo su momento de lectura.

—______—se sorprendió al vera frente a ella—¿Qué haces aquí? Pensé que después de habernos visto, no querías volver a venir al lugar—respondió con pesar, en su mente había pasado la escena del beso con Emilia.

 —Necesitaba verte—la española sintió un toque de esperanza al escuchar dicha confesión.

—¿Ocurre algo?—preguntó manteniendo la compostura.

—Siento que necesito aclarar unas cosas, sé que sonará estúpido después de haber pasado dos años—tomó asiento frente a ella, sin importarle lo que sucedía a su alrededor decidió hablar—¿Qué me hiciste, Ester?—preguntó topando su rostro con ambas manos—Desde que te vi... No he podido dejar de pensar en ti y esto está mal, ¿Sabes?. Por que yo estoy saliendo con Emilia, quien ahora es mi novia y siento que la engaño cada vez que pienso en ti. Me siento confundida, si estoy con ella siento que te extraño y cuando estoy contigo...—la interrumpió posando su mano encima de la menor.

—La extrañas a ella, lo sé. Pero ______, tú me sigues amando, lo veo en tus ojos, ese día que nos encontramos no fue una casualidad, fue algo más. Quizás Emilia estuvo ahí, pero ahora te pregunto yo... ¿Realmente sientes amor por Emilia?—mantuvo seriedad ante lo último, estos dos años le ayudaron a crecer como persona, a no ser alguien "tóxico", había aprendido la lección.

Quería amar y ser amada, creyó que si iba por otros medios ____ estaría ahí... Se equivocó y lo enmendó a su manera, siendo alguien más, ser esa Ester que debió haber estado desde un principio.

La que amaría como una adolescente y no como la mujer soberbia que creía tener a todos en la palma de sus manos, el cual fue su más grave error.

—Yo...—_____ se quedó en silencio, ¿Realmente amaba a Emilia? o ¿Era agradecimiento?.

Se quedó en silencio y Ester permaneció a su lado con calma, no quería incomodar o insistir.

Emilia miraba el collar que era exhibido en la vitrina, a primera vista le gustó para una persona: _______

—Sería perfecto para ti—dijeron a sus espaldas, la británica dejó de admirar el accesorio y dio media vuelta.

—Oh, no. No sería para mí—soltó un suspiro y sonrió, regresando su vista a la vitrina.

—Claro que sí—el chico pidió el collar y se lo colocó alrededor de su cuello—Se ve perfecto en ti—la admiró con una sonrisa.

Emilia se sonrojó ante el comentario y evadió su mirada.

—¿Me dirás tu nombre, bella dama?—con cuidado quitó el collar y lo regresó a su estuche, continuó prestándole atención a la ojiazul, quien continuaba con un leve sonrojo.

—Emilia... Emilia Clarke—respondió manteniendo la compostura.

—Mucho gusto, Emilia—tomó su mano y besó el dorso de ésta—Yo soy John Vellez—hizo una pequeña reverencia y la admiró—Sé que sonará atrevido de mi parte, pero ¿Te gustaría ir a tomar algo conmigo?—preguntó sin dejar de sonreír, aquella mujer la había cautivado desde que la vio ingresar en la joyería.

—Supongo que sería después—le dio una mirada de disculpa —¿Me daría el collar, por favor?—le pidió a la mujer que atendía el lugar.

—Yo lo pagaré—mencionó el ojiverde cuando sacaba su billetera y Emilia posó su mano interrumpiendo su acción, lo cual sorprendió al joven.

—No es para mí, es para mi pareja—comentó, no quería que el joven creara otro tipo de expectativas en ella. 

Emilia tomó la bolsa y salió del lugar tratando de olvidar la reciente charla con aquel hombre.

—¡Emilia, espera!—gritaron a sus espaldas, al darse la vuelta se sorprendió al ver al ojiverde correr hasta ella, cuando estuvo cerca le dio una tarjeta—Toma, mi invitación sigue en pie y me gustaría que aceptaras ir un día de estos—no dejaba de sonreír ni segundo, la británica con duda la tomó y la guardó en la bolsa donde iba el estuche.

—Te hablaré en la semana—respondió antes de volverse a alejar y retomar su camio hacia su casa.

John llevó su mano hacía su nuca, estaba cautivado por aquella mujer.

—Si llegara alguien más en nuestras vidas, ¿Qué harías?—preguntó la británica recargada en el pecho de su novia, ______ sólo miraba al techo y rió al escuchar el comentario.

—Si llegara alguien a tu vida, yo no te retendría porque te amo y conozco el tipo de persona que eres, y quien te tenga es afortunado. No te olvidaría por nada del mundo, Clarke, serías alguien importante para mí—la abrazó contra su pecho, la ojiazul rodeó su cintura con su brazo—Y que quede claro, si esa persona te hace daño, no dudes en buscarme. Yo estaré ahí—Emilia comenzó a llorar en silencio, ________ era su punto débil y viceversa, no podían estar sin la otra. 

Era su complemento... 

La amaba.