...Robin se paró del suelo, y se dirigió a dejar todo en la cocina. Nunca pensó que con ellas se divertiría tanto. Ellas no eran tan malas como creía, ellas podían ser sus amigas....
Amigas.... Amigas... Ami...
-¡AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!- Robin oyó un grito de una chica y un chico. Se fue como un flash a la habitación de Natallie y Gabriele.
-¡¿Quién murió?!- Gritó, abriendo la puerta de un sopetón
Natallie estaba abrazando a su hermana pequeña, Margarita, quien estaba llorando.
-Tuvo una pesadilla- Dijo Gabriele. -Nos agarró de sorpresa cuando la encontramos aquí.
Margarita sollozaba en la pijama de Natallie, y no se calmaba. Robin sabia como era el despertar en la noche llorando por una pesadilla. Robin se acercó lentamente a la cama, mientras Margarita le daba una mirada a este.
-Margarita... ¿Qué..qué soñaste?- Preguntó Robin dulcemente.
Margarita se secó las lagrimas de su rostro antes de hablar -Soñé que me atrapaba un monstruo y.... amenazaba con comerme.
Los 3 chicos se miraron, tristes por el terrible sueño que había tenido la niña más pequeña.
-Al principio parecía amigable, pero se hizo más y más monstruoso.
Los 3 chicos se miraron, antes de mirar a la niña.
-Oye, no son reales, Margarita....- Dijo Robin. Aún recordaba el gran miedo que le tenía a los monstruos cuando era niño.
-Tú no entiendes... ¡Se sentía real!- Dijo la niña.
Las personas oyendo a la niña se estremecieron aún más.
Ir adonde alguien quien resultó ser un monstruo....
Sabían de eso.
-Maggie, los monstruos.... no existen, pero los humanos sí....- Dijo Gabriele.
-Sí, y hay humanos buenos, y humanos malos.- Añadió Natallie. Robin sabía lo que estaban haciendo. Y se sumó.
-Sí, y a mi me ha pasado. Y a ellos... a Alexandria... a todos en tu familia. No todos los humanos son como los monstruos, pero siempre van a haber esos que quieran destruirte... como nos destruyeron a nosotros.
-¡Y que les hicieron?!- Dijo Margarita, alarmada.
-Pues... 6 de ellos me hicieron esto.
Robin se levantó el pantalón y dejo ver su cicatriz en su pierna. Llevaba ya unos 4 años, casi 5. Era la cicatriz del raspón que se había hecho cuando cayó a ese lago. Los 3 chicos se estremecieron cuando la vieron, nunca había desaparecido.
-Ah, por eso solo usas pantalones largos- Dijo Margarita, más calmada.
-No, es porque me gusta usarlos así- Dijo Robin riendo.
-¿Y quien te hizo eso?
-Bueno, Maggie, unos 6.... idiotas me empujaron a un lago y me lanzaron... piedras. Esa herida nunca se sanó. En ninguna parte....- Si le preguntas a Robin (Cosa que jamás podrás hacer, ha) esa herida dolía más en su interior que lo que jamás dolió en su pierna.
-¿Por qué te hicieron ello?
-No sé, pero.... ellos son los humanos malos. Los que no valen la pena.
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¿Un Niñero Más? (Borrador)
Ficção Adolescente"Gracias, niños" "También te queremos, Robin" Los Darlings tienen la vida perfecta, excepto por 3 cosas: 1, su tía apenas tiene tiempo para ellos, 2, no tienen suerte con las amistades, y 3, sus niñeros siempre los odian. Todo es así hasta que viene...
