Al día siguiente Miel no fue a clases...
— ¿Cómo que estas resfriada? —Pregunto Sasha por el altavoz de su teléfono —, ¿estás de broma que voy a estar sola hoy?
—Creo que si cof —Miel la escuchaba entremedio de las sabanas de su cama, el cielo seguía nublado y se temía que volviera a llover como ayer.
—No es justo, es como si me hubieran castigado por faltar a clases, esto puede ser la maldición en el cementerio —se cuestionó con voz de detective
— ¿Crees? Esperemos que no lo sea, hoy solo quiero holgazanear como nunca antes —Miel se acurruco en su cama —no tengo frio, dormiré todo el día, veré películas y me llevaran desayuno a la cama, mi sueño favorito
—No envidies tu posición Miel ah~ —se escuchó un suspiro por su parte —el profesor ya va a llegar, te llamare luego —dijo y corto. Miel dejo su teléfono en su mueble de noche. Kanel ya se había ido a su escuela hace ya rato, él está en una escuela diferente junto con un horario diferente, por lo general vuelve a casa mucho más temprano que ella. Su mamá se había ido a su trabajo dejándole el desayuno antes de irse y su papá se fue a su otra sección de fotografía ¿eso significaba que estaba sola? Podría ser...
Su cabeza estaba palpitando y su frente estaba caliente, sus planes se limitaban a solo dormir hasta que llegue su hermano y le diera de comer, aunque era probable que calentaran la comida que quedo de ayer ¿sopa de espárragos? Nah...
Miel sintió nauseas al pensarlo, sopa de espárragos era lo que más odiaba en todo el mundo, el significado de esa palabra era sinónimo de una sala de torturas, preferiría hacerse una sopa instantánea en vez de una sopa de espárragos, se quedó mirando la ventana. En estas circunstancias apenas podría salir al tejado, hace mucho tiempo que no subía.
Se sentó en su cama y miro la calle mojada, no había nada de personas caminando o conversando, todos seguramente estaban en sus trabajos o en la escuela.
Así que no se esperó que la puerta de su vecino del frente se abriera.
Miel se acercó un poco más a la ventana y vio al señor salir de su casa con una tetera en manos y una mano en sus bolsillos, las comisuras de sus labios se arquearon, seguramente iba de nuevo al cementerio. Miro la hora y se fijó que aún tenía tiempo antes de que su hermano llegara, con el camino de ida y de regreso se demoraría como unos treinta minutos. Se abrigo con un chaleco de lana y se cambió sus pantalones de ositos a uno de polar negro. Bajo las escaleras, abrió la puerta de entrada y miro hacia el camino en donde había desaparecido el señor. Una corriente de aire entro a su casa estrepitosamente, hacía mucho frio
—Ahora o nunca —se dijo a sí misma y cerró la puerta.
Tenía ilusión de poder conocer más a ese hombre, porque su obsesión por estar en ese cementerio, sin importar el clima en el que este, era simplemente maravilloso pensar el tipo de mente que tendrá aquel hombre, se acercó a la entrada del cementerio y camino hacia la dirección de la lápida de doña clarisa. Se detuvo al escuchar el golpe de una tetera contra el suelo.
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Flip Flop: consejos de amor
ChickLitMiel quiere encontrar el verdadero amor, ella quiere sentir aquella felicidad de aquellas parejas que ve en la calle pero ¿qué es el verdadero amor? todo empezara a alocarse en su vida cuando quiera saber esa respuesta partiendo por acercarse a aque...