"Let me have a dream" ♥️One shots X Lectora♥️

"ₜₕₑᵣₑ'ₛ ₙₒ ₜᵢₘₑ ₜₒ Fₒᵣgₑₜ" ₍Dₐzₐᵢ₎

Advertencia: +18 y triste.

Si les llega a gustar no olviden darle apoyo <3

Disfruten

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Culpabas incontables veces a tu "yo" pasado, a tu estupidez, a tus sentimientos y sobre todo a tu ingenuidad.

No podías evitar sentirte mal con solo recordar aquel pasado que marco tu vida para siempre.

~Flash Back ~

Sus labios se juntaban una y otra vez, sus manos se entrelazaban una con la otra, encajando perfectamente.

- Dazai, te amo... - susurraste.

- y yo a ti TN - dijo por lo bajo, con voz ronca.

Sus pieles se tocaban una con la otra, el inquietante placer desbordaba de los dos.

Aquella noche habían unido sus almas.... Sin saber que formarían otra.

~Fin Flash Back~

¿Por qué me dejaste?

¿Acaso no fue nada?

No me ayudaste, solo me abandonaste.

No fui capaz de cuidarla, era débil, soy débil, tenia miedo, así que tuve que dejarlo.

Dolorosamente recordabas la decisión que tomaste, por tu bien y el suyo, por el bien de ustedes.

Estabas segura de que fue la mejor decisión, aunque el remordimiento te atacaba cada noche y te dejaba sin poder dormir, estabas segura de que ella, si era ella, una linda y pequeña niña que pronto cumpliría 6 años, tenia la característica sonrisa de su padre y la profunda mirada de su madre, pero porque estabas segura de que tenia una buena vida?, era simple te encargaste de alejarla lo mas posible de la mafia, le buscaste un hogar lleno de amor, del amor que no le podías dar, cada cierto tiempo la vas a visitar haciéndote pasar por su tía y así lo creía la niña, con el pasar de los años cada vez más notabas el parecido que tenia a Dazai, su cabello castaña y su sonrisa, su piel, todo te recordaba a el y eso solo hacia que deseases no ir a verla.

Pero dejando los melancólicos recuerdos de lado, te encontrabas en una cafetería, revisando unos papeles de tu próximo trabajo, tomaste la taza de te que tenias a tu lado y en un torpe movimiento la golpeaste en vez de agarrarla, haciendo que a tu te salpicar en unas cuantas hojas.

- ¡Mierda! - maldecías, tomaste unas servilletas y las pusiste para secar la mesa y tus papeles.

Una señorita llego a tu mesa - no se preocupe yo me encargo... - dijo con una cálida sonrisa- puede ir a otra mesa si gusta.

Respondiste con un gracias y decidiste ir a otra mesa, tomaste tus papeles, tu bolso y caminaste hacia el lugar decidido pero tu camino fue interrumpido al chocar con alguien.

- Lo siento - miraste al hombre con el que te chocaste, tus ojos se abrieron de par en par, reconocías al hombre, su cabellera, su sonrisa, su piel, sus ojos color avellana y sobre todo sus característicos vendajes que cubrían parte de su cuello, brazos y otros lugares más, tus piernas cubiertas por unos jeans comenzaron a temblar, no por el frio que hacía el cual era poco, era el miedo, tenias miedo de volverlo a ver, miedo de que te vuelva a dañar y dejarte sola.