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Disfruten
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Se imaginan, dejar todo de tu corazón en cada acción y palabra que das, solo por ese alguien especial? Pero al final simplemente fue un desecho de palabras y bonitas acciones.
Así se sentía el ejecutivo de la mafia, Nakahara Chuuya, pasaba todo el tiempo que su para nada común trabajo le permitía junto a ti.
Pequeñas indirectas, hasta indirectas bastante directas, pero nada, no sabia si eras demasiado inocente como para encontrar el sentido oculto detrás de lo que hacia o que simplemente fingías el no entender nada para así no tener que rechazar sus sentimientos y esperar a que el algún día por mas lejano que pareciera se rindiera, pero gracias a los dioses o seres mágicos, no era la segunda opción, sino que la primera, eras tan distraída que simplemente no te dabas cuenta de lo que intentaba decirte o hacer notar, pero el nivel de tu distracción hacia sus acciones no tenia límite.
Tenia tantos ejemplos que van desde lo simple hasta lo extraordinario y que no podría contarlos ni con todos los dedos de las manos del mundo, vaya que eso si era frustrante.
Aun tenia los recuerdos cuando te daba cumplidos o te lanzaba uno que otro piropo, pero tu solo reías creyendo que eran chistes o algo parecido, estaban tan frescos en su memoria:
- ¡Hey TN! - hablo el peli naranja, tu solo lo observaste alegre levantando tu mano, así saludando a el muchacho, cuando estuvo cerca tuyo te dio una de sus mas cálidas sonrisas, una que solo la mostraría ante ti.
Comenzaron a caminar por las solitarias calles hasta que el volvió a hablar - TN....
- ¿Si? - respondiste ante su llamado.
- ¿Acaso eres Google? - pregunto.
- No - respondiste divertida ante su pregunta.
- Porque tienes todo lo que busco - agrego, espero a tu reacción, le había costado tanto decidirse a hablar y lo primero que salió de sus labios fue el piropo más absurdo que pudo recordar, pero tu solo reíste, explotaste en un sinfín de carcajadas quedando sin aire.
-Chu-Chuuya... Pffftt - aguantaste la risa y continuaste hablando- no sabia que te gustaba hacer chistes - y como si tus palabras se tratasen de un balde de agua fría, cayeron sobre el y lo dejaron estático y pensando que había dicho mal, acaso no fue indirectamente directo? Se quedo en silencio y con una expresión algo sorprendida y avergonzada.
Te detuviste y lo observaste, ante tus ojos se veía gracioso - te estas reiniciando o que? - preguntaste sarcástica, ante tus palabras el chico reaccionó y volvió a caminar.
Ese era uno de los tantos recuerdos al intentar al menos hacerte sonrojar o que sepas de los fuertes sentimientos que guarda por ti.
Salir, era algo que seguidamente hacían, pero en cada salida siempre tenía preparado para ti, un pequeño presente hasta una cena en algún lujoso lugar.
Los dos cenaban en un lujoso restaurante, las luces del lugar eran tenues pero iluminaban bastante, dando así un aura algo romántica al lugar, cosa que tu no habías notado para nada, tenían una platica alegre y bastante llevadera entre ustedes dos, dabas incontables sonrisas mientras hablaban, eso solamente provocaba que el mafioso agrande más y más sus puros y frágiles sentimientos por ti, más tu ni idea de lo que este sentía, pero su charla fue interrumpida por el mesero el cual traía los postres de ambos.
- Aquí tiene señorita - hablo el mesero dejando el postre en la mesa.
- Gracias... - respondiste, pero te quedaste viendo lo que estaba escrito en la parte superior de tu postre con chocolate blanco, arrugaste el entrecejo algo confundida y abriste ligeramente los labios.
Leías y volvías a leer lo que decía:
"Me gustas, sal conmigo por favor"
En aquel preciso momento, Chuuya estaba más que nervioso, su estomago se revolvia cada vez más y más intentando no desmayarse, al menos seria más directo que otras veces, no sabia como te lo tomarías.
- No... - el peli-naranjo se quedo estático, sintió como su alma abandonaba su cuerpo.
- Disculpe señorita... ¿Hay algo malo en el postre? - cuestiono el mesero algo confundido.
- De verdad usted me alaga, pero no... - hablaste, creando confusión a los dos hombres que tenías ahí - yo ni siquiera lo conozco, lamento si le dije algo que podría mal interpretar, lo siento pero no puedo corresponder sus sentimientos, es muy poco tiempo, es más ni siquiera se su nombre o las verdaderas intenciones de su persona hacia mi, lo lamento pero mi respuesta es un no- respondiste, algo incomoda por lo que acababa de suceder.
Poco a poco el peli-naranjo sentía su alma regresar, lo habías entendido todo mal, creías que aquella declaración era por parte del mesero más no era así, sintió pena y vergüenza hacia el mesero el cual fue victima del mal entendido, más no dijo nada y de igual forma se sumió en el incomodo silencio que reinaba entre ustedes tres.
- Yo... Me retiro - hablo rápido y conciso el mesero y seguidamente se fue.
- ¿Crees... Que fui mala? - le preguntaste a tu acompañante- lo hice sentir muy mal? Porqué eso parece - hablaste algo preocupada por tus acciones.
- Ahh... Yo no lo creo- respondió mirándote, hizo una pequeña mueca al ver como disfrutabas tranquilamente del postre que había ocasionado todo esto.
Al darte cuenta de que no dejaba de verte decidiste hablar- que? Es un postre, se ve y sabe delicioso, que esperas que lo deje y no me lo coma? - sentenciaste y continuaste devorando aquel delicioso postre.
Las calles estaban sumidas en la oscuridad de la noche, la poca luz que había era gracias a los faroles de luz que habían en cada esquina de las calles, caminaban de manera tranquila, sin sonido alguno, no intercambiaban palabras y solo disfrutaban del silencio mutuo, la suave brisa arremetió contra sus pieles causando un pequeño movimiento por parte tuya al sentir el frio de la noche, aquella reacción no fue pasada de alto, el hombre con gran caballerosidad se quito el saco que llevaba puesto y te lo ofreció a lo que tu algo dudosa aceptaste, no es que no quisieras simplemente de igual manera de la que el se preocupaba por ti, tu también lo hacías, no deseabas que tuviese un resfriado solo por tu culpa.
Durante el trayecto llegaron a un desolado parque, por petición tuya comenzaron a vagar por el parque, el cual daba algo de mala espina, pero no te importo.
- Podríamos morir aquí y nadie se daría cuenta- sacaste las palabras de la nada a lo que el otro te miro extrañado.
- Pero no pasara - aclaro intentando calmar un poco la situación.
- tienes razón Chuuya - respondiste calmada - porque barrio no mata barrio - reíste un poco por tu respuesta, más el solo revolvió tus cabellos y dio una sonrisa ladina.
- Yo siempre te protegeré TN, sin importar que- respondió, tu solo agrandaste tu sonrisa la cual ahora estaba acompañada de un ligero sonrojo, tardo unos segundos en procesar lo que había dicho y solo desvió la mirada hacia otro lado.
Hoy fue otro día más en el cual no pudo aclarar sus sentimientos, otro día que aumentara a su lista de intentos fallidos, pero había logrado volver a ver tu sonrisa, con ello le bastaba y sobraba, mientras puedas sonreír seguiría dando todo de si para algún día lograr aquello que tanto añoraba.
Definitivamente lo lograría.
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So.... Hola, se que debía ser tipo comedia but lo intente y este es el resultado.
Espero les haya gustado.
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BYE BYE
G
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"Let me have a dream" ♥️One shots X Lectora♥️
FanfictionDibujo de la portada: @/xxxmiyama en twt Cada one shot toma tiempo y esfuerzo asi que no copias por favor.