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Capítulo 12

A la mañana siguiente me desperté con alguien abrazándome, casi me había olvidado de la noche anterior y todo parecía sacado de un sueño. Me moví y miré para HongJoong, él también me miraba. No sé exactamente qué esperaba, pero ahora, la noche anterior parecía una auténtica locura.

- Supongo que hay que levantarse – dije incómoda.

- Sí.

- ¿Y si mejor esto no se lo contamos a nadie? – propuse nerviosa.

- Creo que sería lo mejor.

Salí de la habitación, dispuesta a hacer el desayuno y dejé a HongJoong, vistiéndose en mi cuarto. Tenía unas horas antes de que volvieran el resto, por lo que aquella noche quedaría en el completo secreto.

Sin embargo, al poco de poner la cafetera al fuego, algo completamente inesperado sucedió. Que por desgracia cambió radicalmente todo lo que tan bien había estado planeando. Estaba en la cocina, mirando para la cafetera cuando escuché cómo llamaban a la puerta del baño. HongJoong no podía ser, ya que él sabía que estaba en la cocina y entré en pánico. A los os segundos, Wooyoung apareció en la cocina.

- Tu ligue no me deja mear – dijo sin más, mirando para mí.

Estaba en pánico. Wooyoung había vuelto a casa antes de tiempo y eso lo cambiaba todo.

- ¿Cuándo has vuelto?

- Anoche. Empezó a llover y nos venimos todos para casa – contestó – Espero que no follárais en el sofá – añadió.

- No me vengas de puritano que sé que tú lo hiciste una vez – puntualicé.

Entonces, justo después de decir aquello, mi peor temor se materializó: HongJoong apareció por la puerta y a Wooyoung, de la sorpresa, casi se le desencajó la mandíbula.

- ¿TU LIGUE ES HONGJOONG? – dijo gritando, al borde de un ataque.

- Sorpresa – dije en voz baja.

- Tranquilo, tío – dijo HongJoong – No le hice nada a tu "hermana" – sonrió.

Era un momento muy incómodo. Aún así, pudimos rebajar un poco la tensión. Pero, estábamos todavía desayunando cuando por la ventana de la cocina asomaron los chicos, desde el piso de enfrente, dando golpes con la escoba en nuestro cristal.

Aquello era una pesadilla. No sólo Wooyoung sabía que me había acostado con HongJoong, sino que ahora también lo sabrían el resto de los chicos. Sin embargo, no hicieron pregunta alguna, pero sabía que cuando se fuera HongJoong, me bombardearían con millones de ellas.

No me equivoqué, cuando el coreano se fue de regreso a su casa, tras una incómoda despedida sin saber ninguno de los dos cómo hacerlo, Wooyoung, empezó a preguntarme mil cosas, pero es que al rato, los otros tres chicos que lo habían descubierto entraron por la puerta.

- ¿En qué estabas pensando Julie?

- Pues no lo sé. Simplemente pasó.

- Pero esas cosas pasan por alguna razón.

- ¿Qué queréis que os diga? Pasó y ya.

- ¿Os vais a volver a ver?

- No.

Había tomado aquella decisión en menos de un segundo. No había hablado del tema con HongJoong, pero suponía que no volvería a pasar. Además, quería hablar con él sobre aquel tema.

- Por favor, no se lo digáis a nadie – supliqué.

- Tranquila, no se lo diremos.