Mi vida era perfecta, nunca había sido tan feliz. Pero, a veces a la vida le gusta llevarse esa felicidad, separarla de ti. Suele regresar en algún momento del resto de tu vida, pero en mi caso no fue así.
Iba conduciendo, agaché la cabeza un momento, buscando mi móvil porque me llamaban. Era él. Su nombre aparecía escrito en la pantalla, y en ese momento unas enormes mariposas recorrieron cada rincón de mi cuerpo.
Al levantar la cabeza y mirar la carretera una luz me cegaba, parecía el sonido de un camión. Fue todo muy rápido, me llevó por delante.
No sé cuánto tiempo pasó, seguramente días, pero no estaba muerta. Abrí los ojos despacio, notando el dolor que sentía por todo el cuerpo. Me costaba hasta levantar del todo los párpados. Cuando por fin los pude abrir pude verle a él. Tenía los ojos llorosos, pero en cuanto me vio, sonrió. Me preguntó qué tal me encontraba, pero yo notaba que no me quedaba apenas fuerza, así que quise aprovechar la energía que me quedaba para decir algo que mereciese la pena.
- Te quiero. - Dije con un hilo de voz. No pude decir nada más. Si pudiese le hubiese dicho mil cosas, habría rellenado cientos de páginas en blanco para escribir todo lo que sentía por él, todo lo agradecida que estaba de tenerle...
Pero solo pude decir eso, dos palabras. Al menos lo último que vi fue a él, y pude descansar tranquila pensando en su sonrisa...
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Relatos de amor
RomanceSi eres amante de las historias más románticas échale un vistazo... Cada capítulo es un relato diferente. Tratan de amor, desamor, ilusiones, decepciones, pensamientos, sentimientos, emociones... Esa clase de sentimientos guardados en lo más prof...