Terror Psicológico 2

Parque de Diversiones

(Historia basada en un lugar real)
Japón 1973
"Parque de Diversiones Takakanonuma abre sus puertas al público. ¡Lugar para que venga TODA la familia a pasar un rato lleno de alegría y diversión!
Costo: XX"
El cartel era bastante llamativo. Letras color amarillo, el fondo morado oscuro, y la imagen de una gran montaña rusa. Ya se a donde quiero que mi padre me lleve este fin de semana. El casi nunca está en casa debido al trabajo, pero cuando esta me lleva a lugares asombrosos.
Corro rápidamente a casa para decirle a mi madre. Cuando entro por la puerta ella me recibe con un gesto de molestia, como si mi presencia le incomodase. En ese momento todas mis ilusiones de contarle se desvanecieron. Hice una pequeña reverencia con la cabeza a forma de saludo y subí corriendo a mi cuarto.
Por eso nunca me había llevado bien con mi madre. Siempre hacia evidente su gran odio hacia mi. Cuando tenía 8 años mi mamá me dejó en casa cuidando a mi hermanita Miku de 5 años. El era una niña bastante hiperactiva. Estábamos jugando con unos muñequitos de Candy Candy, cuando me dijo que tenía sed. Le dije que se quedara tranquila en el cuarto, que iría por un vaso de agua para ella. Cuando estaba ya en la cocina escuche un gran estruendo, y cuando me asomé al pasillo donde estaban las escaleras vi a mi hermanita tirada al final de ellas. Se había caído. No se movía y no respiraba. Cuando mi mamá llegó me vio a mi llorando y a mi hermana muerta. Desde entonces me culpa por la muerte de mi hermana. Siempre eh sido un asesino para ella. Y hoy a mis 14 años no me ha perdonado. No fue mi culpa.

Pasaron los días y papá llegó a casa. Cuando pudimos estar solos por primera vez le conté de nuestros "planes" para el fin de semana. El simplemente sonrío y me dio a entender que si iríamos.

A la mañana siguiente me desperté muy temprano como mi padre me había pedido. Tomamos los boletos, algo de dinero, nuestros abrigos y unos gorritos para el frío. Salimos de casa. El trayecto fue divertido. Mi padre haciendo la misma broma de siempre. Una broma muy estúpida, pero que siempre he hace reír.
Cuando llegamos al parque hay mucha gente. Pero mi padre se las ingenia para entrar rápido.
¡El parque es enorme! 2 montañas rusas, más de una docena de juegos de azar, y muchos otros juegos mecánicos. Además hay una casa de los sustos.
Lo primero que hacemos es probar las montañas rusas. Van bastante rápido, pero me he subido a mejores.
Los juegos de azar tienen premios muy padres, y aunque parecía difícil ganar uno mi papá lo logró, le dieron como premio un balón de fútbol. Una muy genial.

Toda la tarde estuvo llena de diversión y risa, hemos ido a todas las atracciones. Bueno falta una. Es una casa que tiene de entrada una cabeza de diablo. Solo dejaban entrar de 10-15 años. Adultos no. Qué raro, pero en realidad quería entrar. Yo y un grupo de 20 chicos entramos a la atracción.
Estaba muy oscuro. No se veía casi nada. Solo unas velas al final de un gran pasillo. Todos comenzamos a caminar. No era una sola vela. Eran 12 las cuales formaban un pentagrama. Y en cada pico había una persona con capucha negra. Pronunciaban palabras bastante raras.
De la nada las paredes del pasillo se prendieron en llamas. Pero llamas que no quemaban. Nos íbamos acercando poco a poco. Las personas con capucha saltaron y comenzaron a perseguirnos. Pensé que era parte de la atracción, hasta que uno de ellos le clavo una daga en el corazón a una chica.
Comencé a correr a la entrada pero una de esas personas apareció frente a mi. Su rostro era hueso, igual sus manos. De la nada perdí la conciencia.

Gritos era todo lo que se escucha. Estoy vivo. No me mataron. Cuando salí de esa casa demoniaca había personas muertas en el suelo.
¿Qué habrá pasado mientras estaba inconsciente?
Tengo un pequeño pentagrama contado en el brazo izquierdo. Duele.
Empiezo a caminar en busca de mi padre.
Cerca de la montaña rusa lo encuentro, bueno su cuerpo. El recuerdo del accidente de mi hermana regresa a mi. También maté a mi papá. En ese momento comienzo a llorar.

Caminé hacia la salida del parque, pero esta ya no está. El pentagrama pica. Comienzo a rascarme, y esto provoca que pedazos enteros de piel y músculo se desprendan. No puedo parar de rascarme. Cuando me doy cuenta mi brazo en hueso. Grito. Dios. Esto es horrible.
Hombres con capuchas comienzan a caminar a mi alrededor. Uno me toma por el otro brazo, haciendo que este se vuelva hueso. Arde. El hombre se convierte en humo y me envuelve entero.
Esa fue la ultima vez que vi a mi padre. Estaba muerto, por mi culpa. Ahora estaba atrapado en la casa demoniaca, con una capucha negra y ofreciendo como sacrificio a un niño pequeño.
Comencé por abrirle el pecho y sacar su corazón y darle un pequeño mordisco. Y así todos los "ahí presentes", eventualmente repetir el proceso una y otra vez con sus demás órganos.
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Todos los fines de semana durante los siguientes dos años más y más niños fueron sacrificados, y otros se unieron a nosotros. Todo este hasta que el parque cerró. Entonces la maldad que moraba dentro de nosotros se apoderaba de nuestra mente. Comenzamos a salir a la cuidad para encontrar a más niños.
Cientos de desapariciones y muertes inexplicables.
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1986 "Parque de Diversiones Takakanonuma abre sus puertas al público. ¡Lugar para que venga TODA la familia a pasar un rato lleno de alegría y diversión!
Costo: XX"
El parque habré nuevamente... ¿Nos vienes a visitar?