Capítulo 7: La leyenda del Rompepantallas

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Desde hace 4 años, existe un misterio que desespera y desquicia tanto a los inspectores de policía que muchos han dado el caso por imposible. Mas, Laura (una joven inspectora de policía) no estaba dispuesta a rendirse y pensaba llevar hasta el fondo de la misteriosa desaparición de niños, que venía ocurriendo desde hacía tiempo pero hasta ahora no han logrado encontrar ningún nexo de conexión entres las distintas desapariciones (pues lo único en común que tenían es que todos los niños desaparecieron de sus casas durante la madrugada).

Por desgracia, cuando a la policía le llegaba el aviso de desaparición ya era tarde, pues o bien hacía horas que había pasado todo o aún habiendo pasado hace solo minutos no lograron encontrar ninguna pista salvo que en todas las casas encontraron algún aparato electrónico (móvil, tablet, ordenador, consola...) roto.

Laura visitó cada una de las casas una y otra vez, interrogó a todos los sospechosos varias veces y revisó los informes una y otra vez, llegando a desarrollar una malsana obsesión por aquel enigmático caso.

Preocupada por ella, su amiga Mónica la invitó a cenar en su casa con su marido y su hijo pequeño, pues sabía que si no la obligaba a descansar acabaría enfermando a causa del agotamiento.

Sin embargo, por más que durante la cena trataran de distraerla, Laura no podía parar pensar en el complicado rompecabezas que tenía que resolver.

Mas, quiso el destino que en medio de la cena se escuchara un extraño ruido proveniente de la habitación del hijo de Mónica. Preocupada por su seguridad, Laura salió corriendo hacia allí, abrió la puerta de una patada y desenfundó el arma.

Sus ojos se abrieron como platos al ver cómo una extraña criatura antropomorfa y con multitud de brazos había salido de la tablet con la que estaba jugando el niño (en vez de dormir tal y como le habían dicho sus padres) y trataba de atraparle.

Los niños de ahora ya no se asustan de viejos mitos o monstruos como el coco, con internet y los videojuegos ya lo han visto todo y no se asustan fácilmente. Por ello, en lo más profundo de las entrañas del averno, un antiguo titán vio la oportunidad de salir del tártaro a cambio de secuestrar a todos los niños que queden despiertos más a allá de la hora en la que deberían dormir... este centimano moderno atraviesa las pantallas de los aparatos electrónicos y su cabeza adopta el aspecto de lo que más tema su víctima (pudiendo aparecer con cabeza de lobo, de vampiro, de muerto viviente, de payaso...).

Por suerte, Laura logró ahuyentarlo al romper la pantalla de la tablet con varios disparos fallidos. Mas ¿como detener a un ser que puede aparecer en cualquier parte del mundo, a través de una pantalla?

La respuesta es obvia, no se puede. Por eso tengan cuidado, porque ni la policía, mi los militares ni ningún arma te podrá salvar de él si aparece... pero puedes evitar esto simplemente obedeciendo a tus padres y acostándote temprano en lugar de quedarte hasta la madrugada con videojuegos, viendo la TV o buceando en internet...

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