Historiae et Fabulae

Capítulo 9: La leyenda del Chupacabras

Esta historia que hoy os cuento surgió a finales del siglo XX, al otro lado del charco.

En un pequeño pueblo de Puerto Rico, había dos familias ganaderas famosas en toda la comarca por la gran calidad de sus productos. Pero la familia de Osvaldo se dedicaba a criar ovejas y la familia de Ezequiel criaba cabras, por ello había un gran sentimiento de competitividad entre ellos...

Todo el mundo en el pueblo conocía la gran rivalidad de ambos patriarcas... por eso la gente procuraba que no se cruzaran nunca. Jadzia veía aquella actitud pueril e impropia de dos personas adultas, pero por todos era sabido que ambas familias habían intentado sin éxito acabar con dicha rivalidad.

Un día, mientras veía cómo la gente distraía a ambos para que no fueran por la misma calle, no pudo evitar entornar los ojos y soltar un largo suspiro.

-Es vergonzoso ver cómo todo el pueblo le da más importancia a una disputa pueril de la que se merece. -Dijo Hayden al ver por su actitud que pensaban igual.
-Supongo que no es que le den importancia sino que tratan de evitar trifulcas que dañen el pueblo. -Dijo ella tratando de buscar una explicación racional.
-Lista y positiva, ¿cómo es que no nos habíamos visto antes con lo pequeño que es el pueblo? -Dijo Hayden tras guiñar un ojo y esbozar una pícara sonrisa.
-Quizás sea porque no soporto a la gente descarada. -Respondió Jadzia mostrando un gesto de enfado.
-Venga ya, no seas así... solo era un inofensivo piropo. -Dijo Hayden mostrándose algo avergonzado.

A pesar de aquella primera impresión, Jadzia vio tan tierno e inocente que se sonrojara que siguieron viéndose hasta acabar profundamente enamorados.

Tanto fue así, que se prometieron y decidieron juntar a sus respectivos padres para darles la gran noticia... Mas quiso el irónico destino que aquella cena desvelara que él era sobrino de Osvaldo
y ella la sobrina de Ezequiel y, como era de esperar, ambos patriarcas se opusieron y les prohibieron seguir juntos.

Jadzia discutió con su padre largo y tendido sobre el tema, pero toda la familia trabaja en el famoso negocio ganadero de Ezequiel (al igual que pasaba con la familia de Hayden).

Frustrados, se comunicaban mediante notas ocultas y fantaseaban con fugarse lejos de allí, pero el padre de Haiden acabó descubriendo esto y ocultó la nota en la que Jadzia le citaba a las afueras del pueblo para marcharse juntos.

El desconocer esto rompió el corazón de Jadzia por creer que su amado no era lo suficientemente valiente o no la quería tanto como para dar la espalda a su familia... Hayden, en cambio, sufrió el mismo desagradable y amargo sentimiento por interpretar la ausencia de mensajes de Jadzia...

-Triste destino el de dos enamorados que no pueden estar juntos... -Dijo una voz entre las sombras.
-¿¿Quién eres?? ¿¿Cómo has entrado en mi habitación?? -Preguntó Hayden alarmado y asustado.
-La respuesta a la primera pregunta contesta a la segunda. Permíteme presentarme como es debido: Soy el príncipe de las tinieblas, el inmisericorde gobernante del Hades, el ángel al que un día llamaban "el portador de la luz"... A lo largo de los siglos he tenido miles de nombres y para vosotros soy la encarnación del mal... pero para tí soy la única manera de solucionar tu problema... -Dijo Lucifer tras hacer una reverencia y esbozar una pícara sonrisa.
-¿Vas ayudarme? ¿A cambio de qué? -Preguntó Hayden, consciente de que el diablo nunca hacía nada gratis.
-A cambio de poca cosa, haré que vuestras familias os permita veros a cambio de que mantengas tu castidad hasta el día de tu muerte. -Dijo Lucifer mientras estaba sentado en una silla de madera con las piernas cruzadas.
-¿Qué ganas tú con eso? -Preguntó Hayden extrañado por aquella peculiar condición.
-Solo quiero comprobar si ese amor vuestro es tan verdadero como para merecer semejante sacrifico... y si no lo consigues, me quedaré con tu alma. -Dijo Satanás acelerándose al hablar antes de la última parte como si no quisiera que Hayden prestara atención a aquel detalle.

A regañadientes, Hayden aceptó aquel trato sin abandonar su escepticismo... Sin embargo, todo salió tal y como habían acordado y no solo les permitieron volver a verse sino que ambos se casaron.

Con su aniversario de boda en mente, Jadzia preparó un sinfín de comida para llevar a Hayden de picnic al Monte Guilarte, mas lo que no sospechaba es que su tío había envenenado la comida con ricina esperando que solo Hayden comiera el pastel de manzanas (pues sabía que su sobrina odiaba las manzanas desde niña, pero lo que no sabía es que aquellos gustos habían cambiado con el pasar de los años).

Aquella misma noche, mientras Exequiel dormía, unos chillidos de dolor inundaron el ambiente. Su hijo, Norberto, salió raudo como el viento para ver si le había pasado algo a las cabras pero cuando salió las vio a todas muertas y con una extraña marca de tres orificios en el cuello. Se había quedado atónito ante aquel impactante suceso pero como no sabía qué hacer vio la necesidad de avisar a su padre. Inmediatamente, se giró y gritó el nombre de su padre una vez y otra.

Ezequiel no le doy importancia a aquellos ruidos y seguió dando vueltas en la cama hasta que la voz de Norberto desapareció en mitad de la noche. Pensando que todo era una broma de mal gusto, comenzó a hablarle a su hijo mientras se acercaba a la puerta de su habitación y a amenazarle con que "más le valía que no fuera todo una broma si quería que le pagase aquel viaje a Chile que le había pedido hace un par de días" pero seguía sin recibir respuesta.

Cuando escuchó unos pasos acercándose pensó que su hijo se había arrepentido de intentar gastarle una broma y venía avergonzado a disculparse, así que volvió a meterse en la cama.

De pronto, la puerta se abrió de golpe y el pálido cadáver de Norberto cayó sobre la cama y una horrenda y espeluznante bestia le miraba mientras estaba de pie junto a su cama, sonriendo sádicamente. Ezequiel trató de salir rápidamente de la cama para intentar escapar pero cuando se puso en pie recibió un violento zarpazo de la atroz criatura que le hizo perder un ojo y le marcó la cara con cuatro profundas heridas de arañazo.

Aterrado, comenzó a retroceder (sin levantarse) mientras su sanguinario atacante camina lentamente hacia él jactándose de haber atrapado a otra presa...

Al día siguiente la gente descubrió el cuerpo de sin vida de Ezequiel, al que le habían absorbido toda la sangre y los órganos (al igual que a Norberto y a todo el rebaño de cabras de la familia)...

Poca gente sabe que lo único que molesta más al diablo que el que alguien incumpla un trato con él es que sea su parte del trato la que no se cumpla. Por eso, al ver morir a Jadzia y Hayden, enfureció e hizo que de los regueros de sangre que emanaban de ambos cuerpos surgiera una terrorífica criatura a la que unos describen como un enorme y antropomorfo coyote con afiladas espinas a lo largo lomo, pero que otros describen como un reptil antropomorfo con plumas o espinas a lo largo de la espalda...

Mas la cacerías de esta criatura no acabaron aquella noche y todavía deambula por el mundo, matando y devorando a humanos y animales... por lo que si alguna vez tienes la desdichada fortuna de toparte con el Chupacabras, más te vale correr si en algo valoras tu sangre y tus órganos...