A Merced del Destino <UshiHina> <Haikyuu>

IX

Ya era viernes, y había pasado una semana desde la famosa "discusión" que Suga y Rokujo tuvieron en el gimnasio del colegio.

En un inicio, el peli plata no fue capaz de notar ninguna diferencia o cambio en las actitudes de sus compañeros. El ya estaba acostumbrado a no resaltar mucho durante los entrenamientos debido a que su colocador titular de primer año solía llamar mucho mas la atención. Y no es que eso le molestara, en realidad, de cierta manera estaba agradecido de que las cosas fueran así. Para el, era muchísimo mas preferible ser un suplente y entrar solo en casos excepcionales antes que tener la presión de estar dentro de la cancha durante todo un partido. 

Es por eso que los primeros días tras el conflicto transcurrieron como si nada, hasta que el miércoles ocurrió lo que para el fue la mayor desgracia de la vida: su novio había contraído una gripe y tubo que ausentarse al entrenamiento de ese día.

Confiado de que nada malo pasaría, el vice capitán optó por asistir de igual manera al club aunque no tuviera a Daichi a su lado.

Las horas fueron pasando. Primero decidieron entrenar sus saques mientras Nishinoya trataba de recibirlos, mas tarde practicaron un par de sus jugadas "especiales" que podrían usar en futuros partidos, luego empezaron a dar un par de vueltas corriendo alrededor de la cancha hasta que no fueron capaces de sentir sus piernas del cansancio y, por ultimo, el entrenador Ukai les pidió que se pusieran en grupos de dos personas para que cada uno pudiera practicar en sus respectivo puesto.

Al instante que su entrenador les ordeno eso, el peli plata se apresuró a buscar a su amado con la mirada, llevándose una enorme desilusión al recordar que el no se encontraba presente y que tendría que formar equipo con alguien mas.

Por puro instinto su cabeza giró en búsqueda de Asahi, a quien vio haciendo equipo junto a Nishinoya, por lo que decidió descartarlo y optar por Yamaguchi que ya estaba junto a Tsukishima realizando saques. Rápidamente giró su cuerpo para encontrarse con Tanaka quien un poco apenado le señaló a Narita dándole a entender que ya tenía un compañero y para finalizar, pudo apreciar a la distancia como Ennoshita y Kinoshita ya se estaban uniendo para practicar unos bloqueos.

Estaba desesperado. El sabía que en algún momento tendría que hacerle frente a la realidad, pero no esperaba que fuera tan rápido y sin previo aviso. Ahora a el le quedaban dos opciones: Kageyama y Rokujo. Y, para ser honestos, el chico empezaba a preferir quedarse solo que tener que practicar junto a alguno de aquellos dos.

-Por lo visto quedas tú- señaló Ukai mientras recordaba que al haber faltado Daichi ellos quedaban con un numero impar de jugadores- bueno... ¡Hey chicos!- gritó llamando la atención de todos y logrando que la cara de Suga se ponga roja por la vergüenza- ¿¡hay alguno que quiera formar un grupo de a tres con Suga!?

El vice capitán dio una mirada general expectante de ver quien se ofrecería en recibirlo, llevándose una horrible sorpresa al notar que nadie se animaba a levantar la mano.

Rápidamente pudo notar como una casi inaudible risa escapaba de los labios de su nuevo compañero. No estaba seguro de que era lo que estaba pasando, pero podía empezar a hacerse una idea de que ese chico tenía algo que ver.

-E.. esta bien entrenador- se apresuró a decir para poder disimular la vergüenza que estaba sintiendo al ver que sus compañeros solo se limitaban a mirarlo- Yo... quería saber si puedo ir al baño...- inventó para poder tener una excusa para salir de ese lugar y poder aclarar su mente.

-Emm, si claro Suga.

Y así fue como en un instante pasó de estar dentro del gimnasio a salir corriendo hacia los baños, sin notar que sus dos managers lo siguieron por detrás para asegurarse de que el se encontrara bien.