Capítulo 27

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Desperté a la mañana siguiente un poco antes de lo normal, el ruido de la licuadora y las luces en el pasillo me obligaron a abrir los ojos de la mala gana. Reaccioné rápidamente al darme cuenta que estaba en el departamento de Zac, pero no entendía por qué estaba de pie antes de las 7 am.

Me puse la parte superior de su pijama, la que ya se encontraba en el sofá de su cuarto, sintiendo el frio del piso en mis pies caminé hacía donde él se encontraba totalmente arreglado, usaba una playera polo negra y unos jeans ajustados.

Me dio un beso en la mejilla cuando llegué a su lado y me estiró un vaso con licuado.

—No quería despertarte—confesó

—Tranquilo—sonreí—igual tengo que ir a ducharme a mi apartamento.

Tomé la bebida mientras lo observaba dar vueltas alrededor de su cocina buscando qué más ponerle a su coctel de frutas que se estaba preparando.

—¿Puedo preguntar por qué tan temprano? —me mordí el labio

—Te conté tenía una reunión de negocios.

—Creí era una cena—dije comiendo un pedazo de galleta.

—Lo era, pero Selena habló con otras personas y tengo que verlas en el transcurso del día. Y la reunión es en Santa Bárbara.

Abrí mis ojos, su última frase volvía a incluir a Selena y resultaba era fuera de la ciudad, pero traté de no demostrarle mi inseguridad, lo cual fracasó con mi siguiente pregunta.

—¿Y Selena va contigo?

Me miró entrecerrando los ojos, conocía esa gesto, trataba de identificar mis sentimientos así que sonreí y él se rio.

—No—respondió como si fuera obvio—ella solo me está pasando contactos.

—¿Amigos de ella? —pregunté tratando de que se entendiera como simple curiosidad.

Pero no lograba.

—Sí—tardó en contestar—yo los conozco también—suspiró—son sus mejores amigos, Taylor y Zayn.

Esta conversación se estaba tornando rara, en estos días que habíamos pasado juntos el tema de nuestras ex relaciones no se tocaron y Hilary tenía razón, lo nuestro no era nada aún para tener que explicarnos cosas.

Asentí, no sabía cómo llevar esa conversación. Así que le dí un beso en los labios y con la excusa de que se me hacía tarde, fui a mi departamento.

Eran las 7:30 y había quedado de ver a Zendaya a las 9 en punto en el estacionamiento, así que me bañé rápidamente, elegí ropa digna de visitar clientes y cogí las llaves de mi auto, ya compraría algo en el camino. No vi la camioneta de Zac, asumí no había tardado mucho tiempo más en su casa, tratando de no pensar en eso puse la radio para escuchar las noticas del día y me dirigí a la oficina.

Faltaban 10 minutos para cumplir la cita con Zendaya así que decidí subir por un café. Mientras me dirigía a los elevadores sentí a alguien detrás de mí y por su aroma descubrí era Miley.

—Llegaste temprano—observó.

—Iré a visitar clientes con Zendaya—le dije sin mucha ilusión—subía por café, ¿quieres?

—Vamos y no te envidio tú día.

—Lo sé—resoplé—entre eso y que Zac va a Santa Bárbara con unos amigos de Selena a una reunión de negocios, no siento que sea un buen día.

Me miró intrigada.

—¿No te emociona que Zac pueda tener trabajo pronto? Según sé tiene muchas deudas.

Del amor y otros negociosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora