EGO

Capitulo L

Estaba en una pesadilla donde no había forma de despertar, era un mundo donde no quería estar, no hay razón por la cual pasa todo esto, la vida de mi hija depende de mí, se lo que es capaz JeonYun, se lo que es capaz hasta conseguir lo que quiere, y así es otra vez va a conseguir lo que tanto quiso.

-Abran la puerta – dije enfrente de dos hombres que custodiaban aquella habitación-

-Nadie puede ingresar  - dijo uno de ellos –

-Voy hacer la señora de esta casa, así que abran la maldita puerta – dije casi gritando y me hicieron caso –

Al abrirla la vi en un rincón, echa una bolita abrazando sus piernas, se la sentía sollozar, aquellos hombres cerraron las puertas dejándome con ella sola.

-T/n – apenas susurre su nombre que ella levanto su vista – peque…

-No te me acerques – dijo mientras quería alejarse pero detrás de ella ya estaba la pared – vete

-Por favor, déjame explicarte – me acerque a ella pero se levanto de golpe –

-Explicar qué? La razón por la cual me abandonaron y me ocultaron todas estas cosas? – mis ojos comenzaron a llenarse de lagrimas – ahora vienes por tu puesto de madre?

-Por favor, debía hacerlo, era por tu bien. Entiende que queríamos protegerte – comencé a llorar – era la única forma sino el te hubiera matado, y yo no me lo hubiera perdonado nunca

-Y te perdonas por haberme dejado? – me miro seria – porque no luchaste como lo debiste hacer? Porque no hablaste con la policía?

-Era imposible, el tenia contactos en la comisaria, siempre se salía con la suya. El siempre estuvo enamorado de mi, pero yo no, estaba enamorada del amor de mi vida, a él nunca le gusto la idea de que yo estuviera con otro que no sea él, incluso cuando él se caso, seguía buscándome, se obsesiono conmigo, hasta que un día me secuestro, me tuvo por 4 días encerrada, y una noche, a peor de mi vida abuso de mi porque lo rechace, pero pude huir gracias a la mama de Taehyung.  Cuando me entere de que estaba embarazada lo primero que se me vino a la mente era borrar todo rastro de él, pero después me di cuenta que tu no tenias la culpa de todo esto, por eso te conserve, cuando él se entero nos busco, y con tu padre habíamos huido, se que tomando esa decisión los condene a todos pero no quería perderte – la mire – Ese día de tu cumpleaños yo no quería dejarte

-Basta, no quiero escucharte – se tapo los oídos –

-Ese maldito día que te dejamos en el orfanato donde Carla estaba, esa misma noche el llego, en busca de ti, pero no te hayo. Y mato a mi marido a tu padre – mis lagrimas seguían saliendo una detrás de la otra – y a mí me secuestro, desde ese día estoy en sus manos.

-Sabias que pensaba cuando me dejaron allí? – ella comenzó a llorar- pensé que nunca me amaron, que no querían tenerme, eso pensé me canse de esperarlos todos los días, lloraba día tras día, rechazaba entrevistas solo porque tenía esperanza de que algún día volverían pero no fue así, crecí juntos con las hermanas de aquel lugar, la hermana Carla fue como una madre – me miro enojada- UNA VERDADERA MADRE

-Lo sé, se que ella te educo bien, yo le pedí que me ayudara, ella tenía miedo pero aun así lo hizo, se que ella está feliz por a ver compartido tu crecimiento

-Oh si créeme que sí, que hasta con su último respiro me lo dijo, me dijo que se sentía feliz por haberme cuidado y por a verme protegido hasta donde pudo – quebró en llanto –

-Su su ultimo respiro? Que quieres decir?

-Me miro y rio – ella murió

-Oh por dios – me lleve mi mano a mi boca y la mire – no no sabia t/n en serio perdón