Hielo

Capítulo 16: "MENSAJE RECIBIDO"

Todo estaba siendo una bomba. Nuestra inesperada Y creedme, fue inesperada fiesta, ¡estaba siendo una increíble bomba mediática! Estaba en todas partes, Twitter, Facebook, Instagram, Snapchat... Todas mis redes sociales estaban colapsadas para pedir más detalles sobre la fiesta que se iba a celebrar en la Noche Negra.

Aunque no todo eran pétalos de rosas. Teníamos exactamente una semana para planear la que sería la mejor fiesta de la historia de la Escuela Ágora. Y no es que fuéramos famosos por dar unas increíbles fiestas que digamos... Así que había mucho MUCHO que hacer.

-Oh.Dios. Mío.

Maddy hizo presencia en la sala con su cotidiano aspecto mañanero, con unas pantuflas rosas y un pijama holgado, que por muy holgado que fuera seguía dejando ver el espectacular cuerpo de Madison. Le hice sitio en el sofá para que me mostrara lo que la había alterado tanto

-¡Es Matthew Mcgiven!

No es que estuviera muy puesta en lo referente a la Sociedad de Ágora, pero ese nombre me resultaba familiar...

-¿Quién...

-¡Matthew Mcgiven me acaba de mandar un mensaje! ¡No me lo puedo creer!

Parecía recién sacada de una película de quinceañeras locas. Sus ojos, salidos de órbita, pegados desesperadamente a la pantalla de su móvil parecían que le iban a estallar.

Hice caso omiso a su numerito de colegiala y seguí mi interesante lectura mañanera pegando un sorbo a mi Capuccino.

-Oh,vaya... Lo siento, a veces no recuerdo que es tu primer año aquí.

Madison no se daba por vencida, así que solté muy a mi pesar el libro y me acomodé en el sofá para que me contara todo sobre ese misterioso "Matthew".

-Verás, Matthew Mcgiver es del Distrito Agua.

Reí entre dientes, si me dice eso es igual que si me hablara en chino. 

-¿Y...?

Madison se mordió el labio inferior. Mal presagio. Madison sólo se muerde el labio por:

1.-Está muy nerviosa.

2.-Está concentrada, dándolo todo en el campo d batalla.

o, (y esto era o que más miedo me daba)...Le gustaba un chico.

En este corto periodo de tiempo que he estado conviviendo con Maddy sé, que, que le guste un chico no es nada bueno.

-Es un poco embarazoso decir esto, pero... Desde que entré en Ágora, Matthew ha sido mi amor en secreto. El problema es que nunca se había molestado en fijarse en mí. Para él solo existen las chicas de ojos rojos. 

Madison parecía muy afligida, sus ojos azules como dos zafiros, habían perdido el brillo que los envolvía. 

Ese tal Matthew me estaba fastidiando, nunca había visto a Maddy tan desilusionada, ella, que pelea tan fieramente, que hace cualquier cosa con tal de ganar una batalla... pero antes de sacar conclusiones precipitadas, debería conocerlo.

-Bueno, y...¿cómo es ese tal Matthew?

Intenté parecer lo más interesada posible. Puede que después de todo fuera un buen chico o...

¡NO!

Mi cara se quedó blanca ante la pantalla del teléfono de Madison.

-¿Y bien? ¿Qué te parece?

No podía creer lo que estaban viendo mis ojos, era imposible...tenía que serlo. Se me hizo un nudo en el estómago, me levanté, aún sin creerlo y corrí hasta mi habtación.