El legado de Omegas

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El desayuno había sido eterno para Severus, sentía que pasó un año entero sentado en la mesa de profesores.

El lugar ya era ruidoso normalmente, pero hoy todos estaban sumamente agitados luego de la llega de las lechuzas con el profeta y su tan escandalosa noticia principal. Teniendo así que soportar las miradas y cuchicheos de los alumnos del gran castillo.

Aún así se encontró un par de veces mirando hacia el joven de esmeraldas, parecía estar igual incómodo con todo eso pero al poco tiempo le observó hablando con todos sus amigos y recibió un par de miradas de Weasley.

El maldito mocoso seguramente se estaba burlando de el, seguramente planeaba humillarlo ahora que estaban enlazados. Pero era bastante estúpido si pretendía que se dejara.

Se sentía arrepentido de lo que había hecho, aunque no pudiera recordarlo por más que se esforzará, pero no por ello el escuincle tenía derecho a burlarse de él como lo hacia su miserable padre.

Metido en sus pensamientos de odio hacia el difunto James se sorprendió sintiéndose ligeramente orgulloso de la situación, se había vengado de toda la mierda que le hizo James Potter y ni siquiera se había detenido a pensarlo hasta ahora.

Aterrorizado ante la idea de sentirse meramente feliz de su estupidez dejo el gran comedor, pasando por detrás del chiquillo que había estado rondando su mente.

Seguido algunos minutos después por el viejo director, quien a su vez le dio un guiño al joven de lentes para que los siguiera con discreción, hasta el despacho de Dumbledore.

Una vez ahí no se anduvo con idioteces y fue al punto directamente.


- Albus necesito una explicación de inmediato – Pidió el profesor tratando de controlar la furia en su interior, consiguiendo su tan frío tono de siempre.


- Lo sé, mi muchacho. Te lo contaré todo, incluso lo que aún no te has preguntado. Así que toma asiento, tal vez lo necesites cuando escuches la historia completa.


Tal y como le pidió, desesperado y ansioso de la tan esperada explicación, se sentó en la única silla desocupada en frente del escritorio del director. La otra silla era ocupada por el chico de lentes que hasta ahora estaba en silencio y con la vista clavada en el suelo.


- Esto comienza mucho antes de empezar el año escolar, incluso antes de que nacieras. – Aclaro el mayor, obteniendo una ceja alzada de confusión por parte del maestro de pociones. – Los omegas fueron unos seres muy poderosos al igual que hermosos, llenos de luz pero completamente fáciles de corromper. Podían amar profundamente a alguien, su alfa, hasta el grado de hacer lo que sea que esté les pidiera. Ellos no podían negarse, incluso a pesar de ser mágicamente más poderosos.

>> Y es por esto que los afortunados de recibir su amor comenzaron a aprovecharse de ellos. Les obligaban a hacer lo que quisieran, ya sea masacrar pueblos enteros o dejarles usar su magia para hacerse de poder. Los omegas fueron lentamente corrompidos. Dejando esa hermosa luz que tenían para envolverse en la profunda oscuridad que pronto les acecho. Los magos normales, betas, se dieron cuenta de esto. Decidieron tomar medidas drásticas antes de que todo se volviera peor, eliminando así a cada Omega en el mundo. Los alfas se extinguieron casi al instante de que los omegas fueran asesinados.


>> Sin embargo no se dieron cuenta de que, lejos del caos, una madre había escondido a su pequeño Omega. Le crío en un bosque para que nadie pudiera asesinarle. Le enseño a ser fuerte para que cuando ella muriera, el pudiera defenderse por si solo. Pasaron los años y el Omega tuvo un bebé, este al crecer también procreó un hijo. Al cual llamo “Salazar Slytherin”, el cual obviamente ya conoces quien es. – Dijo en un tono burlón, claro que el profesor sabía de quién se trataba. El fundador de su casa.


>> El también era un Omega, pero se vio corrompido cuando la persona que amo le rechazó. Sospecho que aquello también fue parte de su decisión de abandonar el colegio. En fin, luego de el sus descendientes también fueron teniendo el legado Omega. Cada uno termino corrompido, siempre. Llegando así hasta Tom Marvolo Riddle, conocido también como Lord Voldemort, pero como sabrás el se encargó muy bien de corromper su alma al volverse un mago oscuro. Y aquí es donde entra Harry.


Severus inevitablemente lanzo una fugaz mirada a su alumno, aún se mantenía en silencio y mirando el suelo con seriedad. No parecía importarle ya mucho. Tal vez porque había escuchado ya todo esto antes, era obvio que el propio Albus se lo había explicado.


- Voldemort no tuvo ningún descendiente, lo rumores sobre que había tenido un hijo con Bellatrix Lestrange eran falsos. Solo fueron un último intento de la bruja de hacer creer a los mortífagos de que tendrían un nuevo amo. Por esto es que el legado de omegas no podía seguir, al menos no entre los descendientes de Salazar. Así pues cuando Harry mato a Voldemort, el legado se transfirió a el. Dando como resultado que se volviera un Omega.

Embarazado de mi Profesor (Snarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora