Cartas no enviadas (OMEGAVERSE) [YOONMIN]

Final

Aquel chico de cabello oscuro termino de leer la carta para lanzarla al baúl. Los presentes estaban en silencio mientras que los ojos de Jungkook estaban llenos de lágrimas que escaparon lentamente recorriendo sus mejillas, pero bruscamente él las limpio, no quería mostrarse débil, no quería mostrarse destruido ante la causante de todo.

—Crecí creyendo que mis padres habían muerto en un accidente de auto luego que naciese—. Jungkook trato de respirar hondo para controlar su llanto, aunque realmente estaba afectado por todo lo que sucedía quería mostrarle a la mujer que él estaba bien.

—Pero mi padre Yoongi ni siquiera supo de mi existencia, se fue del mundo sin saber de mí, y mi padre Jimin murió por tu culpa—. Señalo a la mujer anciana, que por su orgullo mantenía un rostro fijo y serio en él.

—¡Los mataste, mataste a mi familia, todo es tu culpa! —. Acuso mientras los murmullos de los presentes caían sobre "su perfecta familia".

—Papá Yoongi, su hijo no tolero el estar separado de su pareja y tomo una opción por la presión a la que usted lo sometió y mi padre Jimin le siguió y no lo juzgo, su amor era tan grande que su lobo no tolero el perderle así—. Jungkook le escupió con rabia manteniendo la visión en la anciana que era su abuela.

Con un caminar lento bajo de la pequeña tarima para tomar una de las copas que eran repartidas a los invitados de esa estirada fiesta de cumpleaños para él, en la que ni uno solo de sus amigos estaban, porque al parecer esto no era dignos de estar allí, según su abuela sus amistades estaban muy por debajo de su nivel.

—Papá pidió que jamás dejara que alguien dominara mi vida y exactamente es lo que sucedió—. Dijo Jungkook volviendo al frente para que todos le viese. 

—Quisiera hacer un brindis, después de todo es mi cumpleaños y estamos celebrándolo, aunque a la mayoría de ustedes ni los conozco y a los que sí, probablemente ni les caigo bien—. Y tenía razón, Jungkook no solía ser compatible con los chicos de su clase social, los encontraba demasiado superficiales, narcisistas y clasistas.

—Es por eso que llame a tío Namjoon, supongo que ahora entiendo por qué no tenía permitido hablarme, o siquiera venir a casa, es porque él sabía todo y no querías que me lo dijera, no querías que supiese la verdad. Eres un ser manipulador y siento pena por ti, pena de tu vida y pena de tu final—. Jungkook sorbe la mucosidad de su nariz para que su voz vuelva a ser grave. —Puedes quedarte con el dinero, al fin y al cabo, es lo único que te importo, y ahora lo tendrás para ti sola, aunque no por mucho—. Dijo burlándose de la situación de la mujer.

Jungkook levanto la copa observando a su abuela, mostrándole cuando odio le tenía en ese momento. —Brindo por ti querida abuela y por el cáncer que te consume día a día, espero que tu final sea lento, doloroso y en soledad, porque es lo que mereces—. Jungkook hizo el ademan de beber de la copa, pero luego sonrió.

—Descuiden, no beberé alcohol—. Les dijo a todos. —A tu salud querida abuela—. Termino la frase para vaciar el líquido en el suelo. —Si no lo has entendido no pienso dejar el país, amo la música y agradezco que me permitieras tan siquiera seguir los pasos de mis padres, pero no soy papá Yoon, no puedes decidir mi vida, porque es solo mía, así que no me moveré de aquí y pienso tener los amigos que quiera. Puedes poner el grito en el cielo, jamás respetare a una persona que ni siquiera se tocó ante el dolor de su hijo, y quien perdió contacto con el otro sólo por ambición, tú y mi abuelo quizás puedan encontrarse en el infierno y arder como lo merecen—. Jungkook lanzo la copa al suelo, el cristal rompió tan bruscamente que muchos se sobresaltaron.

—Disfruten de la fiesta, queridos—. Jungkook observo a todas las personas con a expresión de desagrado. —Sean quienes sean—. Termino diciendo, pues realmente no los conocía.

—Ah cierto, casi lo olvidaba—. Volvió a dirigirse a su abuela antes de irse. — ¿Te acuerdas del chico que hablaba conmigo? ¿El hijo del panadero? —. Continúo preguntándole. —¿Por quién me quieres mandar a otro país, maquillando todo esto con que me quieres dar un estudio mejor? Si, ese, es mi novio y no voy a terminarlo, así que vive con ello—. Y fue así que dejo aquel lugar para correr al auto en donde dos hombres le esperaban. 

Namjoon y su esposo Seokjin habían hecho de todo para poder tener contacto con el pequeño, pero el dinero de la mujer lo evito, aun así, la vida siempre se encarga de cobrarle a todos y poner las cosas en el lugar correcto en algún momento,  y fue así que lo hizo con esa familia, porque fue Jungkook quien termino buscando a sus tíos y con valor se desato de esa cárcel a la que llamo familia durante toda su vida.

Quizás sus padres no tuvieron un buen final para su historia de amor, pero Jungkook planeaba tener una buena vida, un buen primer amor y todo lo que sabía que sus padres hubieran querido para él, una vida libre de las ataduras de una familia que no le merecía.