Renacer

Capítulo 26

Narración de Alejandro:

Mi respiración estaba agitada, temblaba exterior e internamente, me aterrorizaba tener que escuchar la respuesta de un hombre tan severo como el padre de Aurora, ni siquiera le temía tanto a la muerte como a él.
Ella esperaba a mi lado pero su voto de voz estaba silenciado y era plática de los dos hombres más importantes en su vida, al menos dos de tres.
Me dispuse hablar, pues era la petición que me hacía el señor Elmer Peters.
—Primero, mi deseo mayor es disculparme a su persona por no haber venido antes a contarle mis sentimientos hacia Aurora— comencé con voz temblorosa y palabras a punto de trabarse y jugarme mal— Su hija es la mujer que amo y nunca estuve tan seguro de algo, como de lo que siento por ella— lo miré a los ojos— La voy a respetar, la voy a cuidar por que he tardado mucho tiempo en ganar su corazón y no deseo que salga herida.
—Me parecen buenas intenciones, Alejandro— me miró Detenidamente— Aurora es mi hija menor, entenderás que es mi bebé.
—Comprendo perfectamente.
—Ella se ha equivocado en su pasado con alguien que la lastimó y si ella sufre, yo sufro con ella pero te voy a odiar a ti y no voy a permitir que vuelvas a esta casa.
—Solo déjeme demostrar mis intenciones para con su hija, no va arrepentirse.
—Bienvenido a la familia, muchacho— Estrechó mi mano.
Entonces respiré. Aurora y yo nos echamos un par de miradas cómplices por haber logrado la aceptación de su padre.
—¿Mas tranquilo? — me miró segura y con una sonrisa.
—Nunca lo estuve más.

Narración de Aurora:

Mi paz se había restablecido después de esa plática, estaba segura de que ni siquiera Germán me iba a quitar ese amor que tenía al lado de Alejandro.
Me mantenía tranquila durante el resto de tiempo en el que convivimos, no tenía que esconderlo de nada ni nadie y podía disfrutar de su presencia sin obstáculos, esos primeros dos meses a su lado habían sido todo para mi, cuando el amor abundaba más que todo y era tranquilo, él conquistaba mi corazón día con día para entonces.
—¿Entonces ya son novios oficiales? — Preguntó Favio, quien después de todo ese tiempo ahora era mi mejor amigo.
—¡Sí! — sonreí— Ahora dudo mucho que Germán nos pueda destruir.
—No se lo permitas, nena. — checó su celular— Tengo que irme, Silvana me espera.
Silvana era la reciente novia de Favio, parecía que estaba muy enamorado de ella, a pesar de que la chica era bastante estúpida e inmadura, para mi gusto y para que estuviese con un hombre tan perfecto como él, finalmente no era mi noviazgo tóxico.
—¡Ok! Yo iré a visitar a Alejandro.
Tomé mi cartera y me fui a su casa para visitarle.
—¡Mi amor!
—¡Sorpresa! — sonreí.
—Pasa, te voy a presentar a toda mi familia— tomó mi mano— Ella es mi abuela, él es mi padre, ella es mi madre y ya la conoces, también te presento a mi tía y  más tarde conocerás a mi hermana y mis dos sobrinas.
—¡Mucho gusto a todos! — saludé de beso uno por uno.
—¡Está muy linda tu novia! — dijo su abuela.
—Bastante— dijo él.
—Muchas gracias— reí levemente ocultando mi risa de foca con un retraso.
Ese día también habían aparecido un par de familiares más que no estoy segura en si de quienes se trataba, pero habían sido todos muy amables, finalmente conocí a su hermana y sus sobrinas que eran lo más precioso que había visto, las amaba tanto como a las mías.
Esa era una relación que verdaderamente amaba, todo era mágico como yo siempre había soñado, no podía detenerme al contarle a mi familia sobre Alejandro, especialmente a mi prima preferida, Stefy.
Era una chica de aproximadamente un metro cuarenta y cuatro a pesar de tener la mayoría de edad, su cabello era ondulado y castaño, sus ojos verdes y tenía pecas por todo su cuerpo, su característica favorita.
—¡Lo es todo! — dije al enseñarle nuestra foto del día del Festival.
—Entonces este chico es lo que todos queríamos para ti.
—Es mi sueño hecho realidad, amiga
Nuestro trato siempre ha sido más de amigas que de primas, pues nos criamos más como hermanas y amigas que como dos primas comunes.
—¡Te perdimos, peque!
—Y para siempre — reímos acostadas en su enorme cama.
Mi madre no paraba de presumir a su yerno, todos mis familiares conocieron la noticia en menos de lo que cantó un gallo.
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—¡Estás aquí! — me miró encantado.
—Yo nunca falto— lo besé en los labios con ternura.
—Estas perfecta, mi amor.
—¿Hay alguien?
—No, estoy solo— sonrió con malicia.
Un par de besos se nos hicieron un gran vicio, sus labios me enloquecían como no había una idea tremenda.
Parte de eso se fue intensificando hasta sentir su mano en mi pierna, subiendo cada vez un poco más mientras yo le rodeaba con mis pequeños y delgados brazos. Sin darme cuenta le tenía casi encima de mi.
—¡Te amo! — miré de cerca sus preciosos ojos cafés.
—Y yo a ti— me sonrió con amor.
Ambos nos hicimos quitar las prendas que traíamos y las tiramos donde fuera, mientras cargada en brazos me acostó con sutileza en su  cama, pero sus caricias no paraban.
—Si no estás se..
—¡Shhh! — cubrí su boca con mi mano— No te detengas.
Sus labios pasaron a mi cuello y con gran esfuerzo traté de no hacer ningún ruido, pero no lo logré en cuanto sus dedos hicieron su trabajo.
—¡Ahh!.
Yo también quería actuar, así que le obligué a darse la vuelta y dejarme caer sobre él. Mordí su oreja levemente y lamí su mejilla, mientras que al saber su punto débil lo puse en acción, besé su cuello un par de minutos en tanto escuchaba su acelerado respirar
—Ahora eres mío — susurré al oído.
Su instinto animal no duró mucho en estar al margen, me dio la vuelta y la acción verdadera comenzó, parecía que eso me mantenía como una droga, tanto que me cubría la boca para no gritar.
—¡Te amo! — volví a decir inquieta y discreta — No te... De-tengas ¡AH!
—Yo-tambien-te-amo.— dijo dando una y otra vez.
Algo de él hizo despertar en mi aquella persona que dije que no era,  juré que yo jamás iba a estar dispuesta a semejante atrocidad, pero él cambió ese lado de mi que tenía miedo del que dirán y la actitud conservadora de mis padres. Cuando le ví a mi lado después de haber hecho el amor, sentí que era ese lugar al cuál pertenecía, por que jamás iba a dudar de aquello tan potente que sentía, de ese fuego que nos mantenía con vida.
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—¡Oh por Dios! — escuché a Amanda llegar. — Resulta que ahora mi amiga, es novia de mi ex novio.... — Aplaudió tres veces.

HE VUELTO.... NO OLVIDEN LEER "&LEGAL" DE Flavia_0202
PRONTO ESTAREMOS CONTANDOLES QUE VA A PASAR CON NUESTRAS HISTORIAS ¿QUE OPINAN USTEDES QUE PASARÁ ENTRE MERY GARCÍA, MYKEL PETERS, AURORA PETERS Y ALEJANDRO VÉLEZ? NO SE LO PIERDAN
MUY PRONTO....