Renacer

Capítulo 23

Tomé un trago de agua y apagué la luz de mi habitación para hacerme un taco entre las cobijas.
Fui interrumpida por mi padre que entró de imprevisto.
—¿Pasó algo, papá?
—Quiero saber cómo estás, como va el colegio...
—Todo marcha bien— lo miré.
—¿Gustas de alguien?
—Ok, ¿que ha pasado?
—No he vuelto a ver a Germán.
—Ya se ha terminado todo entre los dos, pa. Él ha decidido ir a nadar en otro estanque donde en lugar de cisnes, hay pirañas.
—Pero si gustas de alguien entonces.
—Así es, su nombre es Alejandro
—¿En donde vive?
—Justo al frente del Colegio, papá
—Espero conocerle pronto y que te sepa respetar cariño, recuerda que primero eres tú— besó mi frente— Que descanses.

********
Habían pasado muchos días y las cosas habían cambiado entorno al festival.
El último ensayo ya definía nuestra preparación. Para entonces nos habían enviado una nueva profesora de estudios Sociales, que para nuestra suerte había estudiado artes escénicas también, su nombre era Esmeralda.
—¿Tú que haces? — me preguntó con una sonrisa.
—Yo canto, ya mañana es nuestra presentación.
—¿Que canción piensas cantar?
—Equivocada.
—Siento que por tu tono de voz va a quedar muy bien. — me dijo y volteó al horizonte, ahí vio a Alejandro bailar— ¿Él quien es?
—Alejandro Vélez, baila increíble.
—Eso noto— observó sus movimientos. — Oye tú, intenta mover más la cadera.
A lo lejos él probó y todo le sentaba de maravilla.
Mi estatus como pareja secreta me hacía babear y morir de celos por culpa de su bailarina estrella con abdomen plano y curvas.
—¡Está guapísima! — se sentó Ariel, el primo de Arturo el mejor amigo de Alejandro.
—Sí.
— Aún no puedo creer como se fue a fijar en ti, teniendo a personas  como ella enfrente.
Escuché sus palabras y a partir de ese momento me sentí el ser humano más horrible del mundo, creí lo mismo, como Alejandro se fijó en alguien como yo, teniendo tan cerca a Alguien como Delianne.
—Cantantes— llamó Cecilia— ¡Aurora Peters!
Me levanté de la silla y tomé el micrófono.
—Profesora ¿será que en la presentación pueda iniciar desde una silla?
—Todo lo creativo es bienvenido.
Douglas puso una silla a mi disposición y tomé asiento, en cuanto la canción daba inicio.
—Hoy que no puedo más— me levanté— sigo decidida a dejarte atrás, por tu desamor lastimada estoy, me perdí, apenas te vi, siempre me hiciste, cómo quisiste..

Era libre, pero esperaba la opinión de Esmeralda luego de la presentación.
—¡Ya la tienes! Solo usa más la expresión, procura intentar señalar y hacer algo que alarme al público
—Así será— sonreí.
Los demas chicos se seguían presentando, fue ahí cuando sufrí la repugnante interrupción de la zorra con título, o sea, María Aurora.
—¿Que coño le hiciste a Germán?
—¿Perdón? — fruncí el ceño—¿Tú cómo lo conoces?
—Intento salir con él.
—¡Mierda! — reí— Es que no te basta con arrastrarte con uno para ir por otro. — pegué mi Palma en la frente.
—Eso no es tu asunto.
—Tienes razón, ¡bye!
—Espérate— me apretó fuerte el brazo.
Devolví mi cuerpo con furia y me solté de sus asquerosas y gruesas manos.
—No me vuelvas a tocar. — mi voz se endureció— Si no quieres terminar diez metros bajo tierra.
—Escuchame.
—¡Vete a la mierda, maldita perra!

********

Abrí la puerta de mi casa sin imaginarme la terrible sorpresa que iba a llevarme.
—¿CÓMO DEMONIOS ENTRASTE?
—¡Hola, mi amor! — me miró con morbo.
—¿Que buscas, idiota? — me mantuve al margen de la pared.
—Aquí hay un dilema enorme, preciosa— Levantó la voz. — Recuerda, ¿que eres para mi?
—No soy nada. — mi enojo se volvía miedo. — Por favor vete.
—¿Que me vaya? — me acorraló y tomó con fuerza mi mentón haciéndome sentir su aire— Una sumisa no dice que hacer.
—Olvidate de esa estupidez.— susurré con mis ojos humedecidos.
—Estupidez es lo que haces tú con alguien como él— besó mi cuello y pasó a mis labios— Ya sabes que hacer.
—¡No lo haré!
—¿Quieres que te castigue? — me abofeteó— Arrodillate.
—¡NO POR FAVOR! — grité desesperada.
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Detrás de la puerta de mi habitación me sentí sucia, me sentí la peor mujer del mundo por faltar en el verdadero amor.
Lloré durante media hora sin atenderle el teléfono a  Luna que llamaba cada un día a la semana sin ningún interés y solo por  cumplir.

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Para reflejar toda muerte de aquel oscuro pasado, usé un vestido negro y largo que me hacía lucir espectacular.
Alejandro vestía de camiseta blanca y pantalón negro,  listo para bailar.
La secuencia de los concursantes se iba sacando al azar de una bolsa con nuestros nombres.
Me sentía muy nerviosa, pues solo yo sabía cómo ejecutar mi venganza.
Vi a Germán en la parte trasera, con la mano le llamé para que llegase al frente y le obligué intencionalmente a quedarse ahí, al lado de Alejandro.
—La siguiente presentación queda a cargo de— sacaron el papel—Aurora Peters.
Las alabanzas del público se escuchaban rebotando por todo lado.
Tomé el micrófono y me senté para iniciar.
—Me siguen en el coro.
La presentación había iniciado...

¡See you later in the next chapter!

Remember "&Legal" By Flavia_0202