Muestras de amor | Taekook

capítulo diecisiete

Jungkook despertó luego de quien sabe cuanto tiempo. Lo último que recordaba era su novio golpeandolo sin piedad alguna. No recordaba con exactitud la magnitud de los golpes, pero sabía que habían sido lo suficientemente malos para dejarlo inconsciente. El azabache de inmediato supo que uno de sus ojos estaba completamente lastimado morado e hinchado. No era sólo el dolor insoportable que sentía en todo su rostro, también era su vista ligeramente nublada y extraña; alzó su diestra para verificar con el tacto que efectivamente, su ojo izquierdo estaba totalmente lastimado.

Tardo unos minutos que le parecieron eternos acostumbrar su vista y procesar todo lo que estaba pasando y lo que le rodeaba. Aún se encontraba en el sotano, aunque el cuerpo de Jimin ya no se encontraba, en su lugar solo había una mancha de sangre seca.

Al momento que intentó levantarse del suelo, noto que una cadena rodeaba su cuello y está misma lo retenia al pilar donde su querido amigo había sido previamente atado. Él pánico lo invadió en cuestión de segundos, torpemente intentaba romper la cadena; aunque está no le apretaba el azabache sentía como si esta le asfixiara.

Jungkook agotó toda la energía que tenía en intentar liberarse sin éxito alguno. Resignado se mantuvo sentado en el suelo con la espalda recostada sobre el pilar. Ambas piernas estaban pegadas contra su pecho y sus dos brazos rodeaban ambas piernas.

Tenía miedo, hambre y cansancio. Sin mencionar las ganas que tenía de morir, o de callar la voz de su cabeza que no lo dejaba en paz desde el día anterior.

Y entonces un sonido hizo a Jungkook saltar en su lugar por el susto, dirigiendo su cansada mirada hacia el lugar de donde había provenido. Resultaba ser Taehyung entrando al sotano, cerrando la puerta tras de si y volviendo su inexpresiva mirada hacia su querido novio.

El chico camino con la característica pereza que siempre lo acompañaba hasta el tembloroso cuerpo del menor. Taehyung se sento justo en frente del azabache, su diestra elevandose hasta el ojo morado de este. Jungkook se apartó ligeramente por el dolor que sentía con tan solo tocar la hinchada piel de esa area.

-¿Duele mucho, Jungkook?

-Si...

-- Me obligaste a hacerlo. ¿lo sabes verdad?

Taehyung hablaba con calma e incluso dulzura. Su diestra ahora acariciaba con cariño una de las piernas del azabache y Jungkook no sabia como sentirse al respecto.

Taehyung hizo todo esto por amor ¿verdad?

El menor mordió su labio inferior por unos segundos, ignorando el dolor que sentía ya en las heridas que aún estaban relativamente frescas en su labio. Jungkook tardo unos segundos en asentir ante la pregunta que había hecho su pareja, suspirando y sintiendo un nudo en su garganta al recordar todo lo ocurrido con Jimin.

A veces pensaba que estaba atrapado en un sueño y que su amigo seguía con vida, solamente para ser recordado de la cruel realidad momentos después. Su corazón dolía demasiado, cada latido era una punzada aguda e insoportable y Taehyung lo notaba a la perfección.

El mayor sabía lo mucho que estaba sufriendo su pareja, más no sentía el mínimo de empatía: todo lo contrario, se regocijaba del dolor que transmitia Jungkook. Las grandes y pálidas manos de Taehyung tomaron las mejillas de su pareja para dedicarle una suave sonrisa que para muchos se veía como un gesto se amor pero Jungkook sabía que no lo era.

-Mi amor, lo que hiciste fue algo muy grave.--la voz de Taehyung era suave, como si tratara de calmar el miedo en los ojos de Jungkook.-por eso el castigo será mucho peor.

Jungkook apretó de nuevo sus labios temeroso. Parte de su castigo había sido presenciar la muerte de su unico y amado amigo. No solo verlo morir si no ser asesinado a manos de su novio segundos después de saber que Jimin lo amaba. Unas lágrimas se acumularon en sus ojos sin atreverse a salir del todo. Y Taehyung al no recibir respuesta por parte del azabache decidió continuar.

-No me basta con matar al maldito que se atrevio a fijarse en ti.-una de las manos del mayor recorrió el collarín de metal que rodeaba el cuello del menor y una sonrisa ladina llena de sadismo se dibujó en su rostro.-de ahora en adelante vas a estar aquí abajo. Te alimentare cuando se me se la gana, no veras la luz del sol y si tengo ganas de follarte tu solo vas a levantar ese asqueroso trasero ¿me entiendes?

Jungkook ya no podía retener sus lágrimas. No era sólo por sus palabras y nuevas reglas que le asignaba su pareja, y no era el tono violento y los insultos que habían vuelto. Jungkook sabía que no había vuelta atrás. La vida perfecta que llevaba junto a Taehyung había desaparecido por completo.

No mereces vivir Jungkook. Por tu culpa Jimin está muerto y Taehyung es infeliz. El que debió haber muerto debiste ser tú.

Y solamente con los sollozos del menor inundando el lugar, Taehyung salió del sótano una vez que beso la frente de Jungkook y articulo un "lo hago porque te amo"