Los secretos del bosque (Seth Clearwater y Tú)

Cap. 14 - ¿Qué he hecho?

Mi mirada se quedó congelada en la pequeña columna de humo a lo lejos, al darme cuenta de lo que había ocurrido en esos últimos minutos.

“Un vampiro venía a por mí.

Hizo un trato con él para encontrarme.

El vampiro iba a matarnos.

Iba a hacerle daño también a Seth por mi culpa.

He hecho magia.

Él está viniendo.... Y ahora sabe donde encontrarme.”

–¿Qué he hecho? – Susurré dejándome caer de rodillas.

....

–Está en shock. – Una voz masculina se escuchaba muy lejana. – Parece que no nos oye, que no nos ve.

–Y no deja de murmurar: "¿Qué he hecho?". – Terminó una voz femenina, parecía preocupada.

–Sentadla en el sofá, voy a llamar a Carlisle. – Dijo otra voz femenina.

–¿___(Tn)? – Me llamó alguien. – ___(Tn), por favor, contesta.

–No estoy lista. – Murmuré sin prestar atención. – No debería...

¿Cuánto se tardaba en cruzar el país? Tenía que prepararme, tendría que enfrentarme en duelo con él, pero no estaba lista. Aún no estaba lista para enfrentarme a él, incluso sabiendo que el día llegaría. ¿Cómo protegería a Josephine?

Tenía que asegurarme de que Josie estuviera a salvo, en el hospital estaba rodeada de gente y estaba Carlisle Cullen, pero en casa estaba sola, desprotegida. Tendría que hacer encantamientos de protección sobre la casa...

–___(Tn).

Seth, era Seth. Parpadeé y lo vi delante de mí, se veía muy preocupado.

–No debería haber lanzado ese hechizo, pero está hecho. – Dije sin dejar de mirarle. – Ahora viene hacia aquí.

–¿Hablas de la persona que hizo el trato con el vampiro para encontrarte? – Me preguntó sentándose a mi lado y sosteniendo una de mis manos entre las suyas.

¿Cuándo habíamos vuelto a casa de los Cullen? Recorrí la habitación con la mirada, todos estaban observándonos. Parecía que la hora de explicarlo todo había llegado.

–Lo siento, os debo una explicación, a todos.

Les expliqué todo, desde la muerte de mis padres a la caza de brujas (¡qué ironía!) de mi persona y los motivos por los que se movía. Me escuchaban en silencio, sin preguntar ni interrumpir.

Seth había estado todo el tiempo a mi lado, cogiéndome de la mano.

–Soy una mancha negra en el árbol genealógico de la familia de mi padre, al ser mestiza. En los tiempos en los que estamos, sigue habiendo magos de sangre pura que no toleran estas relaciones en sus familias.

–¿Quieres decir que el mago que te quiere ver muerta es de tu propia familia? – Preguntó sorprendida Renesmee.

–Es mi tío. – Asentí. – Lo intentó antes, cuando mi madre estaba embarazada, pero mi padre llegó a tiempo. Se escapó, desapareció y nadie supo nada hasta que empezaron a haber accidentes y muertes. Había conseguido seguidores durante ese tiempo, gente que al parecer pensaba igual que él por todo el mundo. Y también había crecido su odio por mi padre, por haber sido tan estúpido por haberse enamorado de una muggle.

–¿Y nadie ha hecho nada? – Preguntó Bella.

–Los aurores han detenido a muchos de sus seguidores implicados en esas acciones, pero no han podido dar con él. Puede que todavía no sepan que ya no está allí.

–Así que ahora viene a por ti. – Habló Emmett, cambiando el rumbo de la conversación un poco. – Bien, le estaremos esperado entonces.

–No, tengo que poner fin a esto yo sola. – Negué y me puse de pie, pero Seth no me liberó la mano.

–No vas a estar sola, podemos ayudarte. – Me dijo y también se puso en pie. – Creo que todos entendemos que querrás enfrentarte a él, pero yo por lo menos no voy a dejarte hacer esto sola. ¿Porqué sigues sin darte cuenta? Eres lo más importante para mí.

Le miré a los ojos, viendo esa verdad en ellos, y no supe si llorar o besarle. Liberé mi mano de su agarre y la llevé hasta su rostro, acariciando su mejilla. Le quería y eso incluía no perderle, pero sabía que no se apartaría de mi lado. Así que me dejé llevar por el instinto e hice lo segundo, le besé. Fue un simple beso, Seth me rodeó la cintura con sus brazos mientras que yo coloqué mis manos en sus hombros, pero no duró mucho ya que un carraspeo nos interrumpió, y no me hacía falta mirar para saber quien había sido. Iba a ser difícil llegar a llevarnos bien.

–Te quiero. – Me susurró Seth al romper la unión, pero juntó nuestras frentes.

–Lo sé. – Dije con una sonrisa, haciendo que él también sonriera divertido. – Yo también te quiero.

Seth me dio un rápido beso antes de separarnos y volver a centrarnos en todos los que también estaban en el salón. Todos nos miraban divertidos y enternecidos por la situación, exceptuando a Leah, que miraba molesta por la ventana.

–Bueno, tras este bonito momento. – Habló primero Jake. – ¿Cuál es el plan, ___(Tn)?

Iba a necesitar ser fuerte y prepararme para la batalla, pero para mejorar en mis habilidades los demás podían ser de ayuda.

–Entrenamiento, mucho entrenamiento.

....

–¿__*?

Aparté la vista de la cena y miré a Josie.

–¿Estás bien? – Me preguntó. – Parece como si algo no fuera bien. ¿No habrá pasado algo con Seth?

–No, estoy bien. – Le sonreí. – Las cosas van bien con Seth, mejor de lo que esperaba. – No pareció convencida, así que tenía que sacar un tema lo más común posible. – A Leah no le caigo muy bien, creo que no le gusta que tengamos algo su hermano y yo.

–Cariño, eso es porque todavía no te conoce bien y se preocupa por su hermano. Cuando te conozca mejor y vea que sois felices juntos, mejorará la cosa.

Terminamos de cenar en silencio, Josie parecía más tranquila respecto a mi estado con solo hablar de un problema tan normal. Pero yo seguía preocupada con todo lo que venía ahora.

La protección de Josie estaba asegurada, a falta de que cuando se acostara ella, le lanzaría a la casa algunos encantamiento de protección. Carlisle me había prometido que estaría pendiente de ella en el hospital y Jake me había dicho que los lobos se encargarían de custodiar la casa.

En cuanto a los entrenamientos, tendría que dar lo máximo de mí, porque no iba a practicar con maniquís, sino con vampiros. Era la mejor opción si quería ser rápida y también para saber la potencia de los hechizos.

Por otra parte, quería aprovechar al máximo el tiempo con Seth, no solo entrenar con él. ¿Por qué también quería que practicara con él? ¿Cómo iba a lanzarle un hechizo sin saber como les afectaba a los lobos? Ellos nunca se habían encontrado con uno de nosotros.

La primera prueba para saberlo iba a ser con los encantamientos de protección, uno de los lobos intentaría acercarse a la casa cuando terminara. Solo esperaba que no le pasara nada al que lo hiciera.