🌾Zerstört

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- ¿Estás lista?-preguntó estirando su mano para ayudarme a subir a una carroza-

Afirmé con debilidad.

Al estar arriba pude observar a lo lejos aquella pequeña mansión que denotaba al paraíso mismo en el que había vivido durante tres maravillosos meses.

- Puedes llorar si quieres.-dijo Ray poniendo su mano en mi hombro-

- No me verás así de nuevo...-dije intentando no quebrarme nuevamente-

Seguí viendo cómo nos alejábamos de a poco, pensativa y también con nostalgia.

Aquella bella sonrisa que siempre estaba dedicándome todo el tiempo.

Norman...

- Si te hace sentir mejor, te diré que nos encontraremos con Gilda.-dijo Ray luego de un largo silencio-

Mi mente volvió a despejarse y reaccioné a lo que me dijo Ray.

- ¡Gilda! -dije sorprendida- ¿Cómo están todos, Ray?

- Phil te extraña mucho, y Don junto a Anna están preparando todo para huir.

- Hmm... te veo algo raro.-dije mirándolo con los ojos entrecerrados-

- ¿Cómo así?

- Has cambiado, Ray. No actuabas tan fresco, ni confiado, ni tampoco eras tan sincero.
Tampoco sonreías.-dije con algo de tristeza-

- Lo sé, Emma.-respondió sonriendo levemente- Me di cuenta de todo ello cuando te fuiste.

- Yo...

- Me vi atrapado en mis pensamientos, me sentí perdido y también me dí cuenta que el haberlo ocultado todo hizo que me encerrara en una burbuja apartándome de tí y los demás.

- Cargaste con muchas cosas.-susurré recostándome en su hombro- Perdón, Ray.

El suspiró y no dijo nada.

- Pensé mal de tí, me destrozó haber escuchado tu conversación con mamá con lo que respecta a habernos... casado por conveniencia.-dije con incomodidad-

El miró directamente a mi mano y luego desvió su mirada al frente del camino.

Sentí como si buscara el anillo.

- Nada es tu culpa, Emma.-dijo con un tono apagado-
Lamento tanto haberte obligado a llevar esto conmigo y también haberte usado para sentirme mejor.

- No es así...

- Pero quiero que sepas que yo siempre te amé de verdad.-dijo con seriedad-

Me tomó por sorpresa y quité mi cabeza de su hombro casi por reflejo.

Le miré con algo de asombro pero también me sentí terriblemente mal.

¿Qué rayos estaba haciendo?

Había desechado completamente sus sentimientos por algo que escuché y que me lastimó y lo dejé.

Soy lo peor.

- Ya te pusiste rara otra vez.-dijo poniendo su mano sobre la mía-
No quiero que hagas esa cara de nuevo.

- Perdóname Ray.-respondí mirándole a los ojos- Por no haber sido sincera contigo desde el principio y haberte lastimado con mi indecisión.
Por haberme ido y desconfiado de tí, y también por...

- Yo lo sabía, desde siempre.-dijo tirándome un golpe con su dedo en mi frente- Solo que eres tan lenta que te das cuenta muy tarde de las cosas.
Siempre quisiste a Norman, y también a mí me viste solo como a un hermano.

Miré al suelo avergonzada.

- La verdad es que cambiaste mucho tu actitud cuando él se fue. Todo el ambiente que siempre era alegre se volvió frío y también muy apagado.
Los demás lo notaron y me animaron a estar contigo.

- Lo lamento, no sabía que todos estaban precupados por mí.
Y tú también, lo hiciste por nuestro bien.

- Divorciémonos cuando todo esto se termine, Emma.-dijo con desición-
Pero primero tendré que golpear a Norman por liarla también.
Quiero que seas feliz a su lado.

- Muchas gracias, Ray.-sonreí-

Ray se estiró y luego esbozó una amplia sonrisa.

- Al fin sonreíste, tonta.-dijo dándome un golpecito en la cabeza-

- Hey, no me digas así.-respondí haciendo un puchero.

- Vamos a detener el plan de Norman.

- ¡Sí!

Ode to deathDonde viven las historias. Descúbrelo ahora