Santiago Carvajal prácticamente corría en los corredores del hospital, sorteando gente, camillas y todo aquel o aquello que obstaculizara su trayecto a la sala de espera de las salas de operaciones. Mientras lo hacía no se sacaba de su cabeza a su hermana, quien era la única miembro de su familia con vida. No podía perderla, pero según le había explicado Juliana por el celular su condición era grave. No era muy creyente, pero en ese momento rogaba a ese Dios a quienes las personas acuden en esas situaciones que mantuviera con bien a su hermana y sobrinos.
Alzó su vista y vio un pequeño letrero que decía: sala de espera. Aminoró su apresurado paso, y trató de respirar con calma. Al entrar a la sala a la primera que vio fue a Juliana quien estaba sentada en una silla, con sus codos en las rodillas y sus manos aprisionando su sien. Santiago se detuvo, el movimiento de sus hombros y su respirar agitado delataban su llanto inconsolable. De repente, paraba su respirar y hacia un movimiento como de boqueo para tomar el aire que le faltaba. En todo ese tiempo desde que recibió la noticia de la cesárea de emergencia de Valentina Santiago no había tenido tiempo de llorar. Cuando Juliana lo llamó solo supo que debía estar ahí y en eso concentró sus energías. Sin embargo ver a Juliana en tal estado de sufrimiento y dolor, lo hizo derramar las lágrimas que hasta ese momento había contenido. Fue como si Juliana le transmitiera su dolor. Lentamente se dirigió a Juliana, se arrodilló frente a ella, apartó su cabello que caía sobre su rostro y suavemente preguntó,
- Juliana, cómo va todo? - Juliana alzó su mirada y lo miró profundamente con un total desconsuelo reflejado en su rostro. Tocó con ternura el rostro de su cuñado, respiró profundamente y respondió-
- Santi! Tienen una hora en la cirugía! No sé nada!! - dijo mientras limpiaba sus lágrimas con el dorso de su mano, de inmediato Santiago sacó un pañuelo de su bolsillo y limpió sus lágrimas. Luego puso el pañuelo en las manos de Juliana.
- Nadie ha venido a ponerte al día de la situación? - preguntó mientras acariciaba una mano de su cuñada.
Juliana denegó con un movimiento de cabeza, sentía un nudo en la garganta, Santiago se levantó,
- Y no podemos ir a preguntar nosotros? - preguntó mientras introducía sus dedos en su cabello en un gesto que evidenciaba su nerviosismo.
- No, no se puede el quirófano es una área restringida- explicó Juliana- me dijeron que esperara.
Santiago tomó de las manos a Juliana, jalándola contra sí, y la enredó en un abrazo. Comenzó a acariciar su cabello, mientras empujaba su cabeza contra su pecho,y tratando de darle ánimos dijo,
- Todo estará bien, cuñada!! Ya verás!!
Juliana solo asentía con su cabeza, rogando a Dios por el bienestar de su mujer y sus hijos. El abrazo de Santiago le dio un poco de confort en ese momento de angustia y dolor.
Una voz grave sonó en la sala preguntando.
- Familiares de Valentina Carvajal?
De inmediato se rompió el abrazo y corrieron hacia esa persona que por sus ropas era obvio que era un miembro del equipo que estaba operando a Valentina.
- Yo soy Juliana, su pareja y este es su hermano.
El hombre los vio y luego agregó,
- Soy el Dr. Sanchez. Mucho gusto- extendió su mano que fue apretada primero por Santiago y luego por Juliana- Necesito hablar con ustedes. Por favor síganme.
Juliana y Santiago siguieron al médico que los llevó a una oficina junto a la sala de espera,
- Yo salí un momento de quirófano, para explicar a ustedes lo que está sucediendo- el doctor colocó las manos en sus bolsillos y prosiguió- hubo una complicación que no esperábamos.
ESTÁS LEYENDO
No quise mentir- G!P ( Juliantina) Terminada
RomanceEl título lo dice todo. Idea Original