CAPÍTULO 1 : LA PRIMERA VEZ QUE TE VI

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Un pequeño Sasuke salió despavorido del colegio y comenzó a correr como loco por las calles de Konoha, se encontraba asustado, ya que no comprendía nada de lo que le sucedía, él jamás se había sentido así y esas reacciones se parecían demasiado a los síntomas que había tenido su tío Madara antes de...

—¡Nii-san, nii-san! —gritaba desesperado el morocho cuando llegó a casa, buscando a su hermano mayor por todas partes, pero él salía con parsimonia de su habitación, ya que estaba estudiando para sus exámenes de preparatoria.

Cuando el mayor vio lo preocupado que se encontraba el pequeño se acercó a él, ya que su hermanito se encontraba bastante agitado.

—¿Qué es lo que ocurre Sasuke-kun? —preguntó mientras el niño lo miraba con algo de miedo, dudoso de contárselo o no.

—¡Creo que me voy a morir! Como le pasó al tío Madara—exclamó el pelinegro extrañando a Itachi, que no entendía nada. —Mi corazón late muy deprisa y no lo puedo controlar, además se oprime y me duele. Eso fue lo que le pasó al tío Madara—con aquello el Uchiha mayor no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa de burla que enfadó a Sasuke, ¿es que no veía lo grave de la situación? ¡Se podía morir!

El primogénito de los Uchiha, como era costumbre en él, le tocó levemente la frente del pequeño con sus dos dedos y lo empujó, mientras aún le sonreía, desconcertando todavía más al pequeño, que se sentía insultado porque su hermano no se estaba tomando en serio su problema.

—Escucha, tonto hermano menor. No te va a pasar nada—explicó con voz calmada tranquilizándolo. —Eso es normal cuando uno correr—le dijo divertido, haciendo que Sasuke frunciera el ceño ya que él si que sabía que eso pasaba cuando uno corría, pero él no se refería a eso.

—¡Ya lo sé! —le contestó enfadado. —Pero eso me pasó cuando yo estaba en el aula, y no estaba haciendo ejercicio—respondió el pequeño.

Itachi lo miró por unos segundos, no entendiendo muy bien porqué su hermanito se preocupaba por algo como eso, pero lo quería tranquilizar. Lo mas seguro que no se tratara de nada, ya que lo que tenía su tío no era hereditario, pero nunca estaba de más cerciorarse.

—Dime una cosa, ¿esto te sucede todo el tiempo? —dijo, haciendo que el Uchiha menor negara rápido. —¿Y cuando ocurre? —preguntón dejando al menor sin palabras.

¿Cuándo era que le pasaba eso? Es más, antes nunca le había pasado, pero a su infantil mente llegó una corta melena azulada junto dos preciosos ojos que parecían lunas, además de un pequeño y dulce rostro ligeramente sonrojado. Consiguiendo que nuevamente su corazón comenzara a latir con desenfreno a pesar de que él intentaba calmarlo.

¡Esa Hyuga me hace eso! —dijo con desespero haciendo que Itachi lo mirara con interés.

—¿Te refieres a Hinata Hyuga baka ototo? —le preguntó haciendo que el menor asintiera.

Itachi volvió a mirarlo nuevamente y notó como sus mejillas se sonrojaban ligeramente, haciendo que el mayor sonriera. Un Uchiha y una Hyuga, una combinación bastante inesperada, pero podía resultar divertida, más si para su pequeño hermano aquello no solo era un mero capricho.

—Si ocurre cuando miras o estás cerca de una persona es normal, así que no te preocupes— le dijo el pelinegro mayor para luego revolotearle los cabellos y marcharse, dejando al pequeño niño de 8 años más confundido que antes.

—Hyuga—susurró Sasuke.

Notas de la autora: Hola! Sí, sé que debería estar con el nuevo capítulo del futuro al pasado, pero ya esta casi, por lo que a mas tardar lo tendré el domingo. Así que por el momento los dejo con esta historia, espero que les guste.

Ya saben déjenme sus comentarios y votos.

Gracias por leer, ya nos vemos.

La primera vez que te vi [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora