CAPÍTULO 13 : TRISTE MELODÍA

3.6K 449 84
                                    


Hiashi estaba bastante nervioso, incluso más que la propio Hinata, por lo que Hana, que estaba sentada a su lado apretó la mano de su marido.

—Lo hará bien, no te preocupes—dijo ella haciendo sonreír a castaño, la peliazul siempre le daba fuerzas cuando lo necesitaba.

Hana tenía razón, por las venas de Hinata recorría la sangre de su esposa, si no hubiera sido por aquel accidente seguramente sería una intérprete muy conocida. Además, debía confiar en su hija, había practicado muy duro, estaba seguro que conseguiría el primer premio, esta vez Hinata ganaría, lo haría.

—Nuestra siguiente participante es Hinata Hyuga, ella interpretará Csárdás—dijo el presentador para que luego la gente aplaudiera.

Cuando la peliazul subió al escenario sus amigos se quedaron impresionados al verla en aquel hermoso vestido azul, parecía una pequeña muñeca de porcelana. Pero a quien más impacto le había creado era a Sasuke, cosa que no pasó desapercibida por Sakura, mas no dijo nada. Ella se había dado cuenta de lo que su amigo sentía por la peliazul y aunque su pecho se estremecía de solo recordarlo había preferido ignorar esos sentimientos y no pensar sobre ellos, esperando que de esa manera aquel malestar desapareciera.

Hinata estaba nerviosa, pero al mirar al público recordó que sus padres y sus amigos estaban allí y la apoyaban, así que tocaría lo mejor que pudiese.

Cuando sintió como el piano comenzó a tocar su violín empezó a emitir una melodía lenta, incluso algo melancólica pero que de alguna manera te envolvía por completo, para luego pasar a un ritmo mucho más alegre, sorprendiendo a varios por lo rápido que se movían las manos de la peliazul.

Sasuke no daba crédito a lo que escuchaba, era cierto que no tenía ni idea de música, pero la melodía de Hinata lo hacía sentir tantas cosas, parecía que con cada nota intentaba mostrar algo. La ojiperla le había dicho que tocaba desde lo 5 años, pero no se espera que tuviera aquel nivel, era muy buena.

Cuando la peliazul finalizó su pieza el auditorio estalló en aplausos, había tocado muy bien para solo tener nueve años. Después de la presentación de la Hyuga y que los demás participantes hicieran su respectiva actuación se comenzaron a dar los premios, por lo que se podía sentir los nervios de todos.

Poco a poco fueron llamando a los premiados, hasta que llegó el momento en que darían el primer lugar y la tensión aumentara.

—Y el primer premio es para...—dijo haciendo una pausa dramática que estaba poniendo de los nervios a muchos. —Hinata Hyuga—finalizó el presentador para luego acercarse a una sorprendida peliazul y darle un gran ramo de flores junto al trofeo haciendo que nuevamente todos aplaudieran mientras que los conocidos de la ojiluna se alegraban todavía más por la hazaña de la menor.

Luego de todo aquello, mientras los padres de Hinata hablaban con otros adultos su grupo de amigos se acercó a la peliazul. Aunque para pena de la chica ni Kiba ni Shino había podido venir y Neji tampoco, al menos los demás estaban allí y eso la había ayudado bastante.

—¡Estuviste increíble Hinata-chan! —dijo Naruto entusiasmado para luego recibir un codazo de Sakura.

—Agradéceme que te despertara, sino te hubieras perdido la actuación de Hinata—lo reprendía logrando hacer reír a la Hyuga, Naruto eran tan Naruto.

—¡Realmente estuviste increíble! —corroboró Ino sonrojando a la peliazul. —¡No puedo creer que tenga una amiga con tanto talento! —decía animada.

—Felicidades por obtener el primer lugar—dijo Sasuke logrando que nuevamente la peliazul sonriera.

—Gracias por venir, por vuestro apoyo pude ganar—respondió ella un poco sonrojada haciendo que todos los demás también sonrieran.

Sasuke al ver esto se acercó a su peliazul amiga y con cuidado colocó dos de sus dedos en la frente de la ojiperla para luego darle un pequeño toque mientras le mostraba una sonrisa traviesa que logró que los ojos de Sakura e Ino se convirtieran en corazones y lanzaran un suspiro. Haciendo que Naruto girara los ojos, a veces las chicas exageraban demasiado por cada cosa que su mejor amigo hacía.

—Si yo te animaba, como no ganar—dijo altivo logrando que todos rieran, el azabache a veces tenía un ego muy grande.

Pero de repente ese dulce momento fue interrumpido por otra persona que apareció de repente.

—Hola—dijo de la nada un albino de hermosos ojos celestes logrando que la peliazul se sorprendiera de verlo allí mientras que Sasuke lo miraba mal.

—Toneri-san—dijo Hinata asombrada, para luego hacer rápidamente una reverencia en señal de saludo logrando que éste riera. —Buenas tardes—saludó ella al chico, que debía ser dos años mayor que ellos.

—Estuviste realmente sublime Hime—dijo él sonrojando a la chica y atrayendo la atención de Ino y Sakura al ver la familiaridad con la que el tal Toneri la trataba. —Esta vez solo pude ser un espectador, pero espero que la próxima vez podamos volver a competir—dijo el albino con una brillante sonrisa logrando que Hinata asintiera con más decisión. —Bueno ya nos vemos en otra ocasión Hime—dijo para luego besar su mano y rápidamente ir con sus padres, dejando a un Sasuke de piedra y lleno de celos mientras que Naruto miraba sorprendido al desconocido por su comportamiento.

—¡¿Quién era él?! —dijeron Ino y Sakura muy alborotadas cuando a penas el chico se marchó.

—E-es Toneri-san. Es el hijo del maestro Hamura, un gran violinista. He competido en varias ocasiones contra él, pero nunca le he podido ganar. Su melodía era realmente hermosa y atrapante—respondió la peliazul haciendo que Sasuke soltase un pequeño gruñido que ninguno escuchó.

—Parece tan cool—dijo Ino mientras Sakura asentía con entusiasmo haciendo que Hinata solo sonriera algo incómoda.

—Pues lo dejará de ser cuando Hinata lo venza—dijo de repente Sasuke sorprendiendo a la Hyuga.

—¡Sasuke tiene razón! —lo secundó Naruto. —La próxima vez estoy seguro que le ganarás—le animó el chico logrando sonrojarla y que sonriera avergonzada.

—G-gracias—dijo logrando que el rubio le diera una sonrisa zorruna y que Sasuke solo se encogiera de hombros, como restándole importancia.

Después de aquel encuentro se marcharon del auditorio. Los niños estaban animados hablando sobre lo genial que había tocado la peliazul, haciendo que los padres de la chica, que se encontraban detrás de ellos se encontraban muy felices y orgullosos del logro de su hija.

—Tu hermana será una gran violinista y eso que solo tiene nueve años—decía tremendamente orgulloso Hiashi a una pequeña Hanabi de cuatro años que aplaudía y reía en los brazos de su padre mientras Hana los miraba con dulzura.

La peliazul mayor sonrió y miró con ilusión a su pequeña. Pero de repente su pecho se contrajo y empezó a sentir un fuerte dolor que la paralizó por completo haciendo que pronto comenzara a faltarle la respiración para luego caer desplomada contra el suelo mientras su visión cada vez se hacía más borrosa y todo se comenzaba a volver más y más pesado.

"¡Hana! ¡Mamá!", fue lo último que la Hyuga pudo escuchar antes de que todo se volviera negro.

Notas de la autora: Como dije antes sé que rumbo va a tomar esta historia por lo que lo prepárense. Sé que es probable que no se esperaran algo así, pero desde que metí a Hana supe que es lo que iba a hacer. De verdad espero que les haya gustado, gracias por leer, ya nos vemos.

PD: La de la foto como ya lo habrán notado no es Hinata, sino Tomoyo Daidouji, pero es para que os imaginéis el traje que llevaba, además de que las dos se parecen un poco, así que no lo vi tan mal ponerla.

La primera vez que te vi [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora