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Ya todos secos y vestidos fuimos de nuevo hasta la plaza donde todos estaban reunidos bailando. Luego de lo ocurrido hace un momento Yiren evitaba estar cerca de mí y no se lo criticaba, debía de estar muy molesta por mis palabras tan bruscas, pero en mi defensa solo podía decir que no estaba acostumbrado a ser cuidadoso con lo que decía, así que en teoría mi intención no era lastimarla, solo dejar las cosas en claro para así evitar futuros malentendidos y no quiero sonar pesado pero es que era así.

Las horas iban pasando y los tragos aumentando en cantidad; podía ver a Yiren como bailaba junto a las chicas tranquilamente, pero algo hizo que despegara mi cuerpo de la columna dónde estaba recostado: chicos, acercándose a ellas y uno comenzó a bailar con Yiren, muy cerca de ella, posando sus manos en su cadera tocandola descaradamente. Oh, no, no delante de mí.

Caminé hacia ellos hecho una furia, mis pasos eran cada vez más rápidos y cuando llegué junto a ellos tomé al chico por el hombro separandolo de mi chica y estampé mi puño en su cara logrando que cayera al suelo, así que aproveché para golpearlo de nuevo, pero una mano aguantó mi puño en el aire.

–Que ni se te ocurra, levanta tu trasero y nos vamos– levanté mi vista encontrándome con una Yiren muy pero que muy enojada –Lo siento mucho, el pobre es un animal y no sabe cómo tratar con las personas– ésta vez se dirigió al tipejo que aún estaba en el suelo y lo ayudó a levantarse –De verdad lo siento, yo–

–Tranquila, yo también me comportaría como animal si alguien tocara de esa manera a mi chica, así que lo entiendo– nunca mejor dicho figurín

–Oh, no, yo no soy su chica, ni nada parecido, así que de nuevo perdón– no se por que escuchar eso me molestó, es cierto que lo nuestro no es nada formal pero aún así ella es mía

–Y tú, ya hablaremos los dos cuando lleguemos a la cabaña– me dedicó una mirada de odio que más que asustarme me puso a mil. Oh, Yiren, no sabes cuánto me gusta cuando te pones mandona.

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–Te tocó, joder!!! Obvio que tengo que golpearlo!!!– le grité aún más enojado que antes, ya habíamos llegado a la cabaña y ella y yo estábamos fuera discutiendo por 20 minutos ya

–Ese no es el punto aquí Min YoonGi. No estamos en la edad de piedra para andar repartiendo golpes de gratis, además, él nunca se sobrepasó, solo estábamos bailando– me gritó de vuelta mientras se pasaba las manos por la cara

–Tú eres mía Yiren, y nadie puede tocarte, solo yo– le dije esta vez con un tono más bajo intentando relajar el ambiente

–En serio eres increíble– ella ríe por lo bajo pero no porque le hiciera gracia mis palabras, sino más bien fue una risa de frustración –Ni que fueras un perro que orina para marcar su territorio–

–Haberlo pensado antes de dejar que fueras mía– murmuro para mí pero se que ella me escuchó por la cara que puso

–Pero tú te estás escuchando? Cuántas veces te tengo que decir que no soy tuya?! No soy ni tuya ni de nadie. Y si crees que te pertenezco solo porque te permito follarme déjame te digo que esas muy equivocado.– se acercó a mí y con su dedo apunto a mi pecho mientras me miraba con decepción

–Tú mismo me dejaste en claro como eran las cosas. Esto es solo sexo casual. Nada de enamorarse, nada de reclamarme lo que haga. Yo puedo bailar con quién me de la gana. Ya bastante tienes con que me tengas monopolizada con respecto al sexo, así que no me hagas tener que repetir de nuevo tus palabras. Recuerda que tú fuiste quien quiso que esto fuera así– se separó de mí para entrar a la casa pero la tomé del brazo para que volviera a mirarme.

–Pero las cosas pueden cambiar Yiren– su rostro se transformó en una mueca de confusión

–Cambiar como? Tú mismo me volviste a recalcar lo mismo hace unas horas. Así que no me vengas con esa mierda– trató de alejarse de nuevo pero no se lo permití

–Yo se lo que dije hace unas horas, pero es que luego cuando te ví con ese tipo...– un suspiro salió de mis labios –Tal vez quiero que seas algo más que la chica con la que follo los fines de semana–

Una carcajada salió de sus labios y supe que mis palabras habían causado justo lo que quería, su expresión se relajó y me sonrió antes de volver a hablar

–Vaya, que delicado eres con las palabras hombre de las cavernas–

–Oh, por favor, no empecemos de nuevo con eso. Sabes que soy así, las palabras no son mi fuerte pero voy a tratar muy duro para no joderlo de nuevo, si?– y estaba siendo totalmente sincero, tal vez y no era tan malo después de todo

–Me voy dando cuenta de cuánto lo intentas, pero por ahora no lo haces muy bien– y adoré la sonrisa que me dedicó antes de tomarme por el brazo para llevarme dentro de la cabaña –Y ahora entremos que me muero de frío

En serio me encantas Yiren

Y oh, sorpresa!!!El gato está aprendiendo a no ser tan animal!!! Si es que yo lo amo
Hasta aquí llega el pequeño maratón de capitulos, por ahora, nadie sabe si luego voy y actualizo con otros más 🤭🤭
Pero por ahora esto es todo
Besos anti-calor
♥️♥️♥️