Playing games

• 25 •

La mañana siguiente a eso fue algo más movida, solo entramos al hotel una vez y fue para comer. A penas y amaneció ya teníamos en la puerta a mi hermana y a Jungkook tocando como locos para que abriéramos de una vez por todas. YoonGi, con la poca energía que poseía a esa hora de la mañana fue el que se levantó de la cama para ver qué se traían esos dos que no nos dejaban dormir.

-Feliz año nuevo!!- gritaron ambos al unísono causándole a mi novio un ligero infarto cerebral.

-Serán imbéciles par de retrasados!!- tan delicado como siempre -Se supone que a esta hora de la mañana todavía estamos durmiendo! Además, que mierda es eso de feliz año nuevo, idiotas?! Es a las 12 que deben gritarlo! En el puto patio y no en mi jodida cara!!- y si, ese es el hombre al que amo siendo todo lo delicado que puede mientras regaña a su cuñada y compinche.

-Hyung, perdón, no era nuestra intención hacerte enfadar pero es que estábamos muy emocionados por los planes de hoy- se defendió el menor como pudo.

-Y esos planes se suponen que son..?- le pregunté esta vez yo, una vez me puse de pie y caminaba hacia el baño para lavar mis dientes

-En realidad es sorpresa hermanita- esto no huele bien -Kook y yo planeamos el día entero de hoy y no dejamos ningún espacio libre, así que apresúrense en alistarse, los vemos abajo para desayunar y luego nos vamos- terminando de hablar ambos salieron por dónde mismo entraron dejándonos ahí solos una vez más.

Para cuando planeaba desnudarme las manos de YoonGi se posaron en mis caderas haciendo pequeños círculos con sus pulgares y besando detrás de mi oído mientras pegaba mi espalda a su torso desnudo.

-Y si los dejamos esperando un buen rato y nosotros nos damos unos cariños antes de bajar a perder todo un día junto a esos dos tontos?- y por la manera en la que me hablaba se me estaba haciendo imposible resistirme

-Está bien, pero no demoremos tanto, esos dos pueden venir aquí de nuevo a molestar y ya tengo bastante con que nos hayan despertado a base de gritos-

Y no hizo falta más palabras para que mi ropa fuera directo al suelo junto a la suya. Su lengua ávida se movía en compás con la mía y sus manos tocaban justo donde era necesario. Dos dedos hicieron intromisión en mi interior enviando oleadas de placer por todo mi cuerpo y causando que lo que antes eran suspiros ligeros se convirtieran en gemidos sonoros.

Ya estaba casi al punto de llegar al orgasmo pero sacó repentinamente sus dedos y sin darme tiempo a protestar por el vacío en mi interior, me penetró de una sola estocada llevándome a una espiral de sensaciones realmente alucinantes.

Tomó mis caderas más fuerte de lo que hacía antes y me llevó hasta la bañera, aún en mi interior, propinando leves espasmos de placer con sus movimientos que continuaron una vez la espuma cubría nuestros cuerpos.

-Creo que necesito una de esas en mi departamento y se que tú también lo quieres- me susurró al oído mientras me penetraba aún más fuerte que antes

-Solo si limpias tú el desastre después- mi respuesta se vió interrumpida por momentos debido a los gemidos que salían de mis labios

-El primero en correrse hace el trabajo sucio- un grito salió de mi garganta justo después de sus palabras y me maldije a mí misma por ser tan jodidamente vocal -Creo que te toca a tí limpiar todo luego- maldito seas Min YoonGi y tu jodida polla del demonio.

Creo que había pasado algo más de una hora cuando nos reunimos con los chicos para el desayuno y di gracias porque no nos preguntaran el por qué de nuestra tardanza aunque el chupetón debajo de mi barbilla, bastante poco disimulado por el suéter con cuello alto era una clara respuesta a toda interrogante.

Muy diferente a como pensé que sería lo que haríamos en el día ambos nos sorprendieron llevándonos al spa del resort. Por desgracia no pudimos estar juntos todo el rato, así que me tocó ir con mi hermana y a YoonGi con Jungkook.

Decir que fue más que relajante estaba de más, las masajistas hicieron un trabajo excelente deshaciendose del estrés en mi cuerpo, me sentía como nueva, mi piel más suave y brillante gracias a todos los aceites y cremas que usaron en la seción, así que podía ir haciéndole un buen regalo a YiEun cuando regresáramos a casa.

Saliendo de la relajante seción de spa fuimos a un pequeño salón del hotel donde todas las mujeres hospedados en el lugar arreglaban su cabello y hacían su maquillaje. Era impresionante la cantidad de personas que habían ahí reunidas, todas enfocadas en un solo objetivo: lucir lo más hermosas posible para la fiesta de fin de año que organizaba el hotel.

-Es momento de ponernos bellas-