Gena Silver creyó tener su vida resuelta , terminar el colegio, ir a la Universidad, recibirse de médica veterinaria, y más adelanté casarse y tener hijos. Una vida muy estructurada, llena de reglas y metas por cumplir, pero cuándo Brian Hanner, s...
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Salimos de casa de Gena, tras haber pasado la noche allí por causa de una brutal borrachera, tenía la casilla de mi celular llena de mensajes de Melanie y de Leana, quienes preguntaban por mi paradero, así que lo primero que hice fue llamar a Leana para dejarla tranquila y decirle que en un rato estaría en casa, luego le mande un mensaje a Mel diciéndole que pasaria por su casa más tarde para explicarle todo.
Seguramente estaba pensando cualquier cosa, pero antes de todo eso, debía pasar por casa de Danny para explicarle bien lo sucedido, tal como se lo había prometido a Gena. Ah Brian no le gusto mucho la idea, pero lo que había echo no me gusto, Gena había sido muy gentil con nosotros en hospedarnos en su casa con esa borrachera y al menos le debía este favor, este y muchos más, por todas las canalladas que le hice en el pasado.
—Entonces irás a casa de worsnop— Me dijo Brian intentando persuadirme.
—Ya te dije que si, se lo prometí a Gena y no es justo que él esté pensando que gen es una zorra que le está siendo infiel contigo, la verdad hermano que metiste la pata haciendo eso—
—Si lo sé, cometí una estupidez, en vez de sumar puntos los reste haciendo eso— Dijo mi amigo, arrepentido.
—La verdad que si hermano, si sigues así, nunca recuperaras a Gena, yo quiero ayudarte pero si tú haces este tipo de tonterías, no puedo hacer mucho por ti—
—Lo sé viejo, pero ya no me regañes, ya sé que la cague haciendo eso, iría a pedirle disculpas a Worsnop pero, no me creería—
Sin decir nada más, llegamos hasta su casa y Brian despidiéndose de mí dijo:
—Adiós amigo, iré a dormir un poco, se me parte la cabeza, nos vemos luego—
—Nos vemos luego bro— Le dije chocando mi puño con el suyo y marchándome, me dirigí directo a casa de Danny, golpee la puerta y María, me atendió diciendo:
—Hola, que agradable visita— Se sonrió, mirándome de arriba abajo, incomodándome un poco.
—Hola mari, ¿Se encuentra Danny? Necesito hablar con él—
—Si, el esta, aunque no sé si quiera atenderte, entro maldiciendo como el diablo y se encerró en su habitación— Ben se asomo a la puerta y curioso preguntó:
—¿Quién es nena?— y al verme dijo —Ah, tú ¿que onda Jimmy?—
—Todo bien hombre, estaba buscando a Danny— respondí saludándolo con un apretón de manos.
—Ah, si el acaba de llegar—
—Eso le dije— le comento María y Ben, con muy mal genio le dijo:
—¿Y entonces por qué demonios no lo llamas?, ¿que haces aquí?— La apuró un poco grosero —¡Ya, llámalo mujer!— Le gritó y María lo fulmino con la mirada, luego salió en busca de su hermano. Ben me quedo mirando como si algo de mi le molestara, y no entendía que le podía haber echo para que me mirara de ese modo. Maria regreso y muy sonriente me dijo:
