-Hola- saludo con una sonrisa. ¡que linda sonrisa!
-Hola profesora- me acerque y le entregue mi carpeta. Ella rió bajito y la hojeo rápidamente.
-Tu avance va muy bien- movió la carpeta con su mano- me sorprendieron los datos que agregaste- sonreí agradecida.
-¡Genial!- respondí- estuve bastante enfocada en eso- ella asintió y apunto a un extremo- ven un segundo, quiero fotocopiar la pagina 10 de tu avance para comprobar un dato en mi computadora por que no estoy segura- me guió hasta una de las salas de fotocopias que se ubicaba al extremo derecho del estacionamiento.
-Saque los datos de los libros e Internet- exclame siguiéndola- quizás hay un error-camino por el pasillo y me fije en su bella figura. Su espalda era perfecta, sus pasos era seguros y su aroma era grandioso. Entramos a la sala de fotocopias y hojee mi carpeta que acababa de decir Laura sobre la mesita. Fue de un segundo a otro cuando se acerco y me quito la carpeta de mis manos para lanzara lejos. Se pego a mi y me beso de una manera inexplicable. Mi alma estaba en los anillos de Saturno y mi mente viajaba de diez kilómetros por segundo. No podía creer lo que estaba ocurriendo y mi corazón latía velozmente. Llevo sus manos a mis rostro para intensificar el beso y no la detuve. Sus labios eran perfectos y su forma de besar era espectacular e irresistible. Lleve mi mano a su brazo y lo acaricie suavemente, su mano acariciaba mi mejilla y su lengua había maravillas en mi boca. No podía asimilar lo que estaba pasando y no podía negar que me encantaba. Llevo su mano a mi cuello y la bajo hasta mis brazos, siguió y llego hasta mi cintura, acercándome mas a su cuerpo y deleitándome con el movimiento de sus labios. El beso fue cesado y el aire volvía a mis pulmones que rogaban por oxigenación. Nos miramos a los ojos y reímos - lanzarte mi carpeta- susurre y le saque una risa.
-De todas formas estaba bien -burlo y volvimos a sonreír. Su perfume me estaba llevando al limite y sus ojos me tenían hipnotizada.
-Nos pueden encontrar- susurre mirando hacia la puerta y ella negó con la cabeza.
-La mayoría esta almorzando- respondió- ¿vas a la florería?- pregunto con sus electrizan tes ojos.
-Si- respondí aun ahitada. debo vender flores. sonreí y se acerco a mi rostro para aspirar mi perfume.
-Vamos entonces- beso mi frente y se alejo totalmente relajada mientras que mi cuerpo estaba a segundos de ceder. Me entrego la carpeta y sonrió- va muy bien- me guiño un ojo y abrió la puerta. No sabia que decir ni que pensar por que estaba segura de que mi alama se había quedado en la sala de fotocopias. Subimos al auto gracias al cielo nadie nos vio. Me quede de pie junto a su auto con las manos juntas -¿que paso?- pregunto mientras abría la puerta del conductor.
-¿nos dependimos acá?- pregunte y ella comenzó a reír
-¿como puedes ser tan dulce?- alce una ceja- yo te llevo ___- se puso los lentes de sol y me dedico una sonrisa irresistible. El día no podía ir mejor. Subí a su auto y cruce el cinturón de seguridad por mi cuerpo. Laura puso la llave y me miro dulcemente. -¿podrías esconderte abajo cuando salgamos de la universidad?- pregunto - por si se aparece algún compañero o maestro tuyo- asentí y obedecí de inmediato. Ella ya estaba conduciendo
-¿ya?- pregunte y la oí reír
-Si . respondí y me levante con el rostro de duda- es que te veías muy tierna escondida ahí - reí y no pude evitar sondearle. Llegamos a la florería y puse mi bolso sobre mi hombro bajo su mirada.
-Gracias por traerme- le dije con una sonrisa. y gracias por revisarlo- moví mi carpeta en la mano y reímos por el recuerdo de hace un rato.
-no agradezcas - respondió- apropósito- apoyo su codo en el lado se su ventana y paso sus dedos por sus labios como si estuviera analizando algo concentrad amente - no te lo podía decir en clases pero te vez muy linda- sentí que mi cuerpo desvanecía y mis mejillas reventaban. Sonreí como pude.
-Gracias- acomode mi cabello- tu no te quedas atrás- sonreí. Ella ladeo su cabeza y pestañeo lentamente. Me mataba
-Gracias- sonrío y se acomodo- que tengas un buen día- menciono mientras yo me bajaba de su auto.
-También tu- respondí con una gran sonrisa.
-Ya lo tengo- me guiño un ojo y cerré la puerta sin palabras. Sonrió y se alejo de una segundo a otro . No podía creer lo que había pasado y me sentía mas feliz que nunca. necesitaba volver a besara y no me detendría hasta obtenerlo por que lo único que mi mente reproducía era el inolvidable sabor de sus labios. Entre a la florería y Natalie se encontraba atendiendo a una señora de edad avanzada. Sonreí y agite mi mano mientras que ella mostraba alivio en sus gestos. Espere que la señora terminara su compra para conversar con mi amiga.
-¿como estas?- le pregunte mientras nos acomodábamos en nuestras sillas. Ella alzo los hombros con indiferencia.
-Bien pero al me tiene confundida- confeso. alce una ceja y moví mi mano en forma de ''continua''- hoy le hable a un chico que trabaja en la tienda de diseño y no estaba muy interesado- hizo un gesto con sus labios y sonreí.
-Natalie- negué con la cabeza- eres muy linda y dulce, si notaste que el chico esta poco interesado quizás es por que estaba estresado o por que tiene novia- ella acomodo su cabello y suspiro.
-¿tu crees?- pregunto y la abrace.
-Claro que lo creo amiga- sonrió- no debes preocuparte por eso y debes hacer como yo- me gire para reír y volví a sentarme en mi silla.
-¿como? - pregunto mientras alzaba una ceja con duda.
-Sucedió- fue lo único que dije y Natalie no comprendía- ¡ME BESO CON MI PROFESORA!- grite y Natalie cubrió su boca con ambas manos mientras yo reía. Sus ojos estaban completamente abiertos y no emitía palabra alguna- ¡Habla!- exclame entre risas.
-¡CUENTAME TODO!- grito y nos abrazamos entre saltitos y risas. Le explique el suceso de la sala de fotocopias y Natalie no dejaba de pedir detalle. Siempre me había costado dar explicaciones sobre los temas amorosos y entrega detalles con exactitud pero lo hice lo posible- ¡es grandioso ! Ya era hora de que se besaban porque el compartimiento de ella es muy extraño para no sospechar lo- sonreí.
-Besa increíble- añadí- aunque he pensado sobre su vida privada y me causa un poco de inseguridad pensar que pueda tener esposa o novia- ella con la cabeza.-No te preocupes por que no sera tu culpa- acaricio mi brazo y seguimos hablando de ella. La tarde estuvo tranquila y después de nuestra jornada con Natalie, pasamos a un local que estaba a unas cuantas cuadras de la florería para bebe algo y relajarnos. Mientras leíamos la carta de tragos, Natalie se quedo petrificada mirando detrás de mi hombro.
-¿cosmopolitan?-pregunte- no busques al mesero aun por que no me - busque su mirada y ella movía sus manos- ¿que pasa?- insistí.
-esta aquí- me gire y vi a un chico de cabello castaño entra al local- el chico que note desinteresado- mire a Natalie e hice un gesto de indiferencia- diablos, me miro y viene ___, viene ayúdame, me esta mirando- Natalie susurraba y trataba de no gesticular mucho.
-¡Hola!- saludo el chico- Natalie ¿cierto?- me sorprendí.