Me pase todo el día pensando en la mujer que había ido a la casa de Laura. Quizás ella me estaba mintiendo y en realidad tiene pareja o esta casada pero ella fingió ser su amiga para sacar información. El solo hecho de pensar eso me revuelve el estomago y la mente por que últimamente mis pensamientos han sido ligados a ella y me fa miedo que toso sea un chiste. Al otro día tenia clases con Laura y pensaba enfrentarla y preguntarle acerca de aquella misteriosa mujer. Me arregle y tome el metro hasta la universidad. Subí al ascensor y mire mi carpeta con cientos de pensamiento chocando en mi cabeza.
-Buenos días ___- saludo mi profesora se dibujo. Le sonreí y acomode mi cabello detrás de mi oreja.
-Buenos días- salude. ella tenia el cabello corto y pelirrojo, su piel era blanca y tenia mas o menos 50 años.
-¿como van las clases con la nueva profesora?- pregunto y sentí que tomo de acusaba. tome mucho aire mientras ella esperando respuesta.
-muy bien- respondí. La bese, dormí en su cama y pienso en su existencia casi todo el día. Si, si le decía eso, mi vida y la de Laura cambiaría para siempre. Desastre- es muy bueno- y besa increíble. Si, Eso también la destruiría.
-Si, eh conversado con ella en las reuniones de docentes- -comentaba- es bastante educada- sonrió y le copie. La puerta se abrió y como si fuera broma, la profesora Pergolizzi subió con su maleta. Me quede congelada en mi lugar mientras que ella me miro rápidamente y dedico una dulce sonrisa.
-Buenos idas señorita Evans- saludo cordialmente y trate de hacer el máximo esfuerzo para saludarlo.
-Buenos días profesora- sus ojos se quedaron fijos en los míos diciéndome tantas cosas que no podía descifrar. Esa mirada era una cascada de secretos. Miro a la maestra Claude y le decido una sonrisa.
-¿Que tal Claude?- pregunto con su linda voz que derretía mi existencia en segundos. Ella tenia un maldito poder que lograba en mis sentidos y controlar mis reacciones.
-Todo bien- respondió ella- tengo que ir a tomar una examen ahora- movió una carpeta que estaba en su mano- no se los hice tan difícil - reímos-
-Yo ta estoy armando el examen- hablo Laura y lo mire con cara de ¡¿QUE DIABLOS?¡, comenzó a reír y la profesora Claude lo siguió - si ___, tendrán un examen un poco tedioso- trague lento y mire al suelo.
-Tedioso para ustedes significa imposiblemente complicado incapaz de resolver- comente y Laura me dedico una sonrisa.
-Debes prepararte-hablo y me miro directamente a los ojos, electrizando mi cuerpo y acelerando a mi pobre corazón. Yo sabia que se refería a nuestras juntas secretas y me encantaba la idea. El ascensor se detuvo y la maestras Claude camino con una sonrisa.
-¡Que tengan un buen día!- sonreímos y le deseamos lo mismo.
La puerta se cerro y nos miramos divertid amente. Mi corazón corría o mas bien volaba, mi pulso estaba acelerado y mis nervios crecían, ¿ como era posible que causara esos efectos en mi luego de todo lo que ya había pasado? Se puso de pie a mi lado y miraba hacia la puerta con su barbilla levantada. ¡Que guapa profesora! Su camisa azul se veía impecable y su cabello me encantaba. Mire a la puerta también para no des-concentrarme con sus atributos y movió su mano hasta los botones. El ascensor se detuvo y me quede petrificada con la espalda pegada al espejo. Laura me miro a los ojos y sonrió.
-Supongo que vas a estudiar para mi examen- se acerco y mi respiración se aceleraba.
-si- fue todo lo que respondí- detuviste el ascensor- agregue y si, mi comentario fue estúpido pero tenia que hacerlo. su mano se movió hasta mi barbilla y la acaricio suavemente. Me encanto sentir su suave toque y sus ojos mirándome de manera penetrante. Lleve mi mano hasta la suya que estaba en mi rostro y la acaricie suavemente. Me dedico una sonrisa y se acerco un paso mas hacia mi.
-No pensé que iba a hacer este tipo de locuras en la universidad- susurro con su delicada voz- jamas pensé que llegaría al nivel de detener el ascensor para tener a mi alumna solo para mi- su frase me llevo al cielo y me dejo en caída libre. ¿como se atrevía a decir esas cosas y actuar como si nada?- siento que pierdo toda seriedad contigo- negué con la cabeza.
-No es cierto.- susurre.- para mi sigues siendo la profesora mas inteligente que besa muy bien- me atreví a decir lo ultimo y no me arrepentí. Laura sonrió y se acerco a mi rostro, dejándome sentir su delicioso perfume y su aliento muy cerca de mi boca.
-Cada vez me sorprendes mas- su dedo indice se paseo por mi mejilla y no podía expresar mis sensaciones internas. se acerco mas y poso ambas manos en mi cintura, se acerco a mi rostro e inhalo junto a mi oreja haciendo que mi piel se erizara. La mire a los ojos y la encontré mirándome. Topamos nuestros labios y paso a ser un beso suave y tranquilo. Sus manos se aferraban a mi cintura y me encantaba sentirme '' controlada'' por ella. Lleve amabas manos a sus mejillas y el beso se intensifico notablemente. Estaba en las nubes o quizás mas allá por que cada roce o movimiento de labios, incluso una simple mirada fugaz me podía llevar lejos y me encantaba. Me encontraba en la etapa de la adicción sin miedo a lo que puedan decir, y no me importaba, todo dependía de Laura y sus encantos que disparaban cientos de sensaciones en mi ser.
-¡ Maldita se __!- fue algo como un susurro con fuerza. -me están volviendo loca- tomo mi rostro con ambas manos y la mire sorprendida. Nuestras respiraciones estaban aceleradas y su boca ligeramente abierta para recobrar el aire. -¡mírame!- seguía susurrando con fuerza- contigo pierdo el control y me olvido de las clases y todo- me escaneo de arriba abajo- no se si tu belleza física o lo mágico de tu mente- lleve una mano a su cuello y la acerque a mi- .
-Es nuestro secreto- susurre y sonreí luego- yo tampoco se que pasa exactamente- sus ojos estaban enganchados en los míos- pero no quiero detenerlo ahora- acercamos nuestros rostros un poco mas y rozamos nuestras narices tierna mente. Nuestros labios se juntaron para dar un beso apasionado digno de película romántica. aquello besos en cámara lenta, con los ojos cerrados y manos quietas. Digno de fotografiar.
Salgamos de aquí y hagamos que parezca real- dijo en voz baja- presionare el botón y tu actuaras como si tuvieras una crisis de pánico- me quede en blanco con su sabor en mi boca. ¿como quería que actuara su recién nos habíamos quitado el aliento a besos?. - fingiremos que no nos llevamos bien ¿de acuerdo?- volvió a envolver sus brazos en mi cintura- hazlo real - tapo sus labios con los míos y se giro para presionar el botón.
Pareciera que ella le gustaba verme petrificada con sus palabras y acciones por que realmente me dejaba así. Una vez que lo presiono, al ascensor subió y luego abrió las puertas en el piso correspondiente. Habia profesores, un rector, algunos alumnos y auxiliares. Era el momento de comenzar el papel.
-¡DIOS MIO- exclame mientras salía apresuradamente del ascensor-me vi morir ahí- apunte y le di una mirada a Laura que trataba de no sonreir.
-¿como sucedió esto?-pregunto el profesor de derecho y Laura hizo una mueca.
-No lo se, pero sugiero que la señorita Evans tome algo porque era intenso lo que sintió- trate de no ruborizarme o reír pero sabia que lo estaba haciendo apropósito-¿que esta pasando con los ascensores?- se puso seris-di la señorita Evans hubiese estado sola, les prometo que habría sido un desastre por que no había manera de tranquilizarla- todo me miraron y comenzó a respirar rápido para hacerlo real- íbamos subiendo y de la nada se detuvo, pensé que alguien estaba tratando presionando los botones abajo pero veo que no- apunto al ascensor con toda seguridad en su papel- sugiero que hagan algo porque pueden hacer accidentes- el rector asintió y los profesores hacían gestos. Alexa estaba entre los demás estudiantes y me dedico una mirada fría y terrorífica, luego negó con la cabeza y camino de vuelta a nuestra sala. Me quede muda.
-Venga señorita Evans-hablo mi profesora de diseño tomándome del brazo- vamos por un vaso de agua o alfo para que se tranquilice y pueda volver a clases- asentí y le di una mirada fugaz a Laura, quien me guiño un ojo cundo nadie estaba mirándonos. Bebí un te con esencias tranquilizantes y lo único que debía calmarse era mi corazón de los besos con mi profesora en el ascensor.
-¿Puedes volver a clases?-pregunto la enfermera y asentí.
-Si, ya me tranquilice- tome mi bolso- estoy bien- agradecí y camine d vuelta hasta mi sala. Me había encantado la seguridad que Laura había demostrado al salir del ascensor. Nuestra pequeña dramatización había salido perfecta y me sentía genial.
