Las nubes grises [omegaverse]

capítulo 17

El cuerpo de Farid estaba en un sueño profundo, días sin dormir provoco un sueño que no acabaría de saciarse pronto, sentía la calma que necesitaba urgentemente. Su cuerpo estaba agotado y su mente también. Quería olvidar. Quería olvidarse de todo lo que le causaba dolor.
24 horas de sueño profundo, pero por fin despertó, a su lado estaba Noah dormido, tenia sus pestañas mojadas por lagrimas, su pequeña nariz estaba roja,  Farid vio su enorme vientre y sonrió, la acaricio suavemente.

Noah  abrió los ojos rápidamente y se lanzo a los brazos de Farid,

—que bueno que despiertas, estaba muy preocupado— dijo entre sollozos.

Farid sentía como las lagrimas de su amigo empezaban a mojar su hombro, no le incomodaba ni mucho menos le molestaba, era su amigo y al parecer estaba muy preocupado.

—Noah… m… mis padres?...— su voz era baja, tenia su garganta muy seca, sus labios estaban resecos los lamio un poco. se separo lentamente de Noah.

El llanto de Noah se intensifico y sacudía su cabeza rápidamente.

—lo … lo siento mucho— volvió a abrazar a Farid. 

Farid desde que escucho las palabras de Martin sobre sus padres lo supo. En su pecho sentía un vacío, todo perdió el sentido, sentía que en el lugar que estaba no era la realidad.
No podía llorar no después de todo lo que les dijo a sus padres la ultima vez que los vio, se sentía la peor basura del mundo, nunca tendría la oportunidad de disculparse con sus padres. Nunca los volvería a ver. A pesar de todo el dolor que sentía no fue capaz de derramar una sola lagrima, la culpa no se lo permitía. Perdió a sus padres y el fue un total idiota la ultima vez que hablaron y todo por alguien que lo olvido fácilmente.

Aparto a Noah nuevamente de su hombro y se levanto de la cama.

—¿Dónde esta mi hermano?— hablar le lastimaba la garganta, se sirvió agua de una pequeña jarra que estaba a un lado de su cama.

Noah noto que algo no estaba bien con Farid, pero no quiso preguntar, su mirada no era la misma de la persona que el conocía, por un momento se sintió incomodo.

—No lo se, a mi me llamo Martin ayer por la tarde y no eh visto a nadie llegar.— decía mientras limpiaba sus mejillas mojadas con la manga de su sudadera.

—¿ya comiste?— su tono aún era seco y muy triste.

—aún no— dijo un poco nervioso.

— Vamos a bajar a comer, no le hace bien al bebé que no te alimentes.—sonrió, no era una sonrisa que irradiaba felicidad, era una sonrisa forzada y trise.

Bajaron, encendieron las luces de la cocina.

Farid rápidamente preparo unos sencillos sándwiches, y sentados en absoluto silencio empezaron a comer

Farid tenia la vista perdida viendo a algún punto de la mesa, tratando de entender que hacer con todo lo que sentía que a la vez lo hacían sentir vacío.

Noah, no sabía que hacer estaba demasiado preocupado por Farid que estaba actuando muy extraño, ¿alguien puede no llorar por la muerte de sus padres?  Los padres de Farid lo amaban y Noah sabía que Farid los amaba, ¿qué era lo que estaba sucediendo en la cabeza de Farid?
Noah había acabado de dar la ultima mordida a su sándwich cuando la puerta de la entrada se abrió y las voces de las personas entrando inundaron el lugar, Farid se levanto y corrió hacia alguien —hermano.— en el rostro de Farid se dibujo un pequeño puchero como el de un niño pequeño que quiere ser consolado por su madre. 

No dudó en voltear y vio tan conmovedora escena, los dos hermanos se abrazaban en medio de la sala, Noah vio el rostro de Zaid era realmente un desastre. Vio como se separaron.
Y como Farid se rompía en llanto