Sé mío

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La suave brisa del lugar era de lo más agradable, Kakyoin termino su desayuno a la orilla de la piscina tomando ligeramente el sol, miro la hora en su reloj nuevamente, había pasado una hora desde aquella cita de Jotaro.

-Debe estar con el señor Joestar- Se levantó de su asiento y se adentro en el hotel en busca de Joseph, tocó con suavidad la entrada notando que estaba abierta la habitación del mayor-Señor Joestar buen día.

-¿Kakyoin? ¿Dónde está Jotaro?

-No lo se señor, me abandono en el teleférico, y como no lo encontré regrese a almorzar en la piscina tomando el sol.

-¿Con el uniforme?

-Si, ¿Que tendría de malo señor Avdol?

-Es el Kakyoin de siempre Avdol.

-¿Kakyoin de siempre? ¿De que hablan?

-Hola, los estaba bus...¿Kakyoin?¿Que haces aquí? Te Vi con Jotaro en el teleférico hace 3 minutos.

Kakyoin miro a Polnareff sorprendido, esto no era normal -¿Que dices? Yo estoy aquí hace 5 minutos.

-Es cierto... entonces el no es el traidor- Afirmó Joseph confundido.

-¡¿QUE?! ¿¡YO UN TRAIDOR?!- Kakyoin estaba molesto, por no decir ofendido de las palabras que soltaba Joseph-¿Porque pensó eso de mi? Si yo a...

-El Stand del señor Joestar puede emitir mensajes atraves de la televisión y dijo que tú eras un traidor- Rápidamente intervino Avdol notando que hablaría de más- Sin embargo ví que alguien acompañaba a Jotaro, era Kakyoin pero este lucía mucho más alto, casi tenía la altura de Jotaro.

-Imposible...solo véanlo- Polnareff poso una mano sobre la cabeza del pelirojo -Mirenlo, es demaciado pequeño para estar a la altura de Jotaro.

Kakyoin se molestó un poco, pero uso eso a su favor eso le daba credibilidad ante el señor Joestar, tenía una extraña sensación de tristeza y preocupación no sabía de Jotaro, cuando estuvo a punto de hablar la puerta de la habitación se abrió de golpe, los presentes se pusieron en guardia llamando a sus Stands pero se relajaron al ver a Jotaro agotado lleno de sangre, Joseph y Kakyoin corrieron en su ayuda sentandolo en la cama.

-Demonios ¿Que fue lo que pasó Jotaro?

-Un usuario de Stand viejo...no fue nada grave...

-¿Que clase de poder tenía?- Dijo Avdol interesado en la "Copia" de Kakyoin.

-Según me dijo era la carta de la templanza, creí que era Kakyoin...pero de comportaba bastante raro...podía tocar su Stand con mis manos.

-¡Imposible!¡Solo un Stand puede tocar a otro! El usuario no puede hacerlo.

-No soy estúpido Polnareff, lo se- reclamó y suspiro se había enfrascado tanto en relatar su hazaña, que apenas se había dado cuenta que Kakyoin atendía sus heridas con cuidado dicho acto le hacía sonreír internamente - Gracias- Como respuesta, solo recibió la cálida sonrisa de Kakyoin sin dejar de lado su expresión de angustia.

-Dos ataques en dos días, debemos tener cuidado entonces si ya saben dónde buscarnos- Soltó Avdol preocupado-

-Por desgracia no podemos evitarlo Avdol - Suspiro hondo y se quitó ligeramente su gabardina negra, lo suficiente para dejar ver su marca de nacimiento en forma de estrella- El viejo y yo tenemos esto, así como él puede ver a Dio el puede vernos a nosotros-

Cerezas Y Cigarrillos (JotaKak)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora