NARRA IROH
Ni siquiera acabamos de cenar, porque Zuko quería estar listo para la llegada a la Isla.
Zuko: Esnhe ve y prepárate
Eshne: Ya voy, príncipe Zuko –él salió de la habitación
Iroh: Si claro, príncipe Zuko
Eshne: Basta, no es gracioso
Iroh: lo es porque los dos sienten lo mismo y se comportan como niños.
Eshne: Bien sabe que él está enamorado de Mai.
Iroh: Tal vez, pero a ella no le manda cartas
Eshne: ¿qué? ¿Cómo sabe eso?
Iroh: lo he visto pasar por tu habitación y dejarlas
Desde hace tiempo, Zuko le escribe cartas a Eshne, aunque todo empezó como un ejercicio para canalizar su ira, ellos lo mantuvieron, era lindo ver lo que se ocultaba tras esos escritos.
Eshne: Ya estoy lista – dijo mientras nosotros estábamos montando los rinocerontes
Zuko: No creo que sea adecuado que vistas eso – tal vez tenía razón, ella era hábil, pero era fácil que la emboscaran si vestía como un doncella –Creo que te quedará bien un traje de la armada – se fue a cambiar
Eshne: listo
Zuko: Perfecto, sube, ya vamos a llegar –hizo un lugar tra él en su transporte, el rubor en ambos estaba intenso.
Eshne: ¿Contigo? –Zuko asintió – bien
Zuko: Sostente –El barco encalló en la costa y Eshne se abrazó de él. Le sonreí
Eshne: Basta –susurró
Avanzamos, hacia el pequeño pueblo.
Zuko: ¡Sal ya, Avatar! Deja de esconderte
NARRA ESHNE
Bajé del rinoceronte y me posicioné tras de Zuko y Iroh. Tenían una estatua del Avatar Kioshi... Había leído algo sobre una élite inspirada en ella, pero no lograba recordar hasta que unas chicas nos emboscaron. Detuve el ataque de una, pero eran varias.
Eshne: ¿está bien, príncipe Zuko?
Zuko: Sí, avanza para ver si encuentras al Avatar, ten cuidado con ellas –yo mantenía la cara cubierta –no podrán esconderlo por siempre
Me estaba escabulliendo, ya había visto dónde estaba Katara, la chica de la tribu agua y escuché: Vete de aquí, los distraernos. Mi reacción fue más rápida que mi conciencia, ataqué a la chica con fuego control.
Suki: Tú eres la bruja del sol –me mantuve en silencio no podía hacer que me relacionaran. Traté de noquearla, mi llamas eran demasiado, bueno, llamativas. Uno de los soldados corrió a decirle a Zuko y entonces el Avatar huyo
Zuko: Si la bruja está de nuestro lado, no hay que preocuparnos, volverá. No pierdan de vista al Avatar. ¡Eshne, vamosnos! – debía perder a Suki
Suki: No creo que el Señor del Fuego sepa que estás ayudando a su hijo
Eshne: –la inmovilicé e hice una voz tan diferente a la mía como pude –Te pido, de guerrera a guerrera no informes a la Nación del Fuego...
Suki: ¿Por qué no lo haría?
Eshne: Porque te convertirías en una soplona de la Nación del Fuego y eso no es cuestión de nada, te harán traicionar al Avatar, a tu pueblo. La dejé y me fui. Me quité el casco y antes de llegar al barco el Avatar lanzó agua con el Unagui.
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~En el Fuego~ [Zuko]
FanfictieSean todos ustedes bienvenidos a la montaña rusa de las emociones: Zuko y Eshne son los encargados de esta pequeña historia, que los pondrá al filo del asiento. El desterrado y la bruja los mantendrán con intriga, amor y acción.