Enamorada De Mi Mejor Amigo (SueñosPeligrosos#1)

Capitulo 4

Las chicas y yo decidimos aceptar la propuesta de Frank de salir a una fiesta esta noche, ¿lo se quien sale un martes en la noche?

Exacto nosotros.

Estamos en mi habitación buscando que ponernos mientras Mack termina de ducharse.

Yo ya elegí, me voy a poner un vestido blanco ajustado con un escote en la espalda y pequeñas cadenas en el frente, este es nuevo y creo que esta noche es perfecta para usarlo. Nada mejor que una fiesta a casi mitad de semana para estrenarlo. Las chicas también se habian decidido, asi que nos pusimos a cambiarnos.

-¡Wow! ayuda, demasiada sensualidad para mis bellos y sensibles ojos.- Mack estaba tapando sus ojos como si le estuvieran poniendo una linterna en la cara.

-Ya, Mack gracias por el cumplido pero apresurate que los chicos llegarán en cualquier momento.

-Ahora, Kim siéntate.- Era mi turno de maquillarme, la encargada del maquillaje siempre es Gin, maquilla super bien.

Una vez que Mack se terminó de cambiar Gin la maquilló y bajamos a esperar a los chicos.

Luke también estaba en la casa y en cuanto acabo de cambiarse también se unió a nosotras en la sala.

-Que traigan la pasarela que ya llegaron las modelos.- Luke se detuvo a mirarnos.

En medio de risas escuchamos la bocina de los autos de Frank y Liam, salimos y nos subimos Annie y Mack con Frank y el resto con Liam.

El camino se me hizo muy corto ya que fuimos riendo.

-Llegamos señoritas.- Dijo Liam y Luke le dio un golpe en la nuca.

-Ya bajense. Nos vemos adentro.- Y Luke junto con Gin desaparecieron entre el tumulto de gente dentro de la casa.

-Kimy...- Liam bajo y dio la vuelta para abrir mi puerta, jamás es caballeroso con nadie, solo conmigo y eso es lo que más me gusta.- Adelante señorita.- Bajé y acomodé mi vestido.- Wow, te ves... hermosa.

-Muchas gracias, dime algo que no sepa, Liam.- Arrogante puse los brazos en jarra y comenzé a modelar a su alrededor.

El reía y negaba con la cabeza. De un momento a otro me tomo de la cintura deteniendome.

-Ya deja eso, vamos a entrar.- Beso mi mejilla y me tomo de la mano para entrar a la fiesta.

La casa es realmente enorme, la verdad no se de quien es pero seguro de alguien del equipo de futbol.

Hay luces de colores y humo por todas partes, además de la música lo más alto que los parlantes lo permiten. La barra de tragos y los infaltables adolescentes ebrios paracticamente teniendo sexo en los sillones, contra alguna pared o simplemente en la pista de baile improvisada en medio de la sala. También hay mucha gente en el patio trasero en donde hay una piscina además de botellas y latas de varias bebidas diferentes decorando el suelo.

Estoy justamente esperando a que Liam me traiga una botella de cerveza, mientras observo divertida a un chico que camina tambaleandose y cada dos pasos tropieza.

-Aquí tienes, Kimy.

-Gracias.- Nos quedamos viendo como el chico sigue su recorrido trastabillando de vez en cuando hasta que cae rendido unos cinco metros después.

Luego de eso decidimos entrar a reunirnos con los chicos, aunque apenas pusimos un pie dentro de la casa el plan se fue abajo ya que una morena alta paso frente a mi mejor amigo y le guiñó un ojo.

Gesto suficiente para que mi amigo se despidiera de mi y fuera tras ella.

Roja de la rabia busqué a Gin por todas partes, aunque luego de calmarme vi la hora y supuse que ya habia encontrado a su polvo de esta noche.

Entonces me dispuse a encontrar a Mack, y sorpresa tampoco estaba, ok bueno no tengo una teoría sobre donde podría estar asi que solo me dirigí hacia la barra y pedi otra cerveza.

Y a Annie, obviamente, no la iba a encontrar ya que de seguro estaria con Frank arreglando la pequeña discusión de hoy en la tarde.

Estuve alrededor de diez minutos en la barra y luego sentí una mano en mi hombro. Era un chico ligeramente rubio que me miraba con una sonrisa.

-¿Quieres bailar?- Preguntó timidamente.

Esperen, ¿timidamente? ¿En una fiesta? Ok, aún más raro.

Lo miré por un milisegundo y acepté. Él gustoso de mi respuesta tomo mi mano y me llevó a la pista.

La música no era muy lenta que digamos y yo no bailaba muy bien asi que traté de seguir el ritmo como pude.

El chico, del cual no sabia el nombre, notó que no podia seguirle el paso para nada bien. Entonces me miro como pidiendome permiso y puso una de sus manos en mi cintura acercandome a su cuerpo y con la otra tomo mi cara y la elevo para que lo mirase.

-Sigueme, mueve tu pie hacia la izquierda.

Y asi dándome instrucciones logramos un ritmo a corde con la música.

Luego de bailar un rato, la música cambió y el baile se torno un poco más sensual, de este si sabia, pegué mi cuerpo aún más al suyo y puse ambas manos en sus hombros y él las suyas en mi cintura.

Bailabamos mirandonos a los ojos y en menos de un segundo su rostro estaba mucho más cerca del mio.
Presionaba mi cintura tratando de juntar nuestros cuerpos lo más posible.

-¿Puedo?- Susurró.

-¿Puedes qu...

-Hacer esto.- Me interrumpió.

Y en un rápido movimiento sus labios estaban sobre los míos, moviendose suavemente. Seguí su beso con timidez ya que era un beso lento, pero no duró mucho ya que metió su lengua en mi boca y yo mis manos en su cabello.

Su boca sabía a una mezcla de whiskey y cigarros con menta, no fumo pero sabía muy bien.

Nos separamos por falta de aire y al mirarlo sentí como mis mejillas ardían.

Él me miraba pícaro y me sonreía.

Luego solo volvimos a bailar pegados y de vez en cuando me besaba.

Me olvidé completamente de Liam y disfruté la noche como nunca, pero  como todo, la noche se tuvo que terminar.

Vi a Gin haciendome señas, ya que teniamos que volver para dormir algo antes de ir al instituto.

-Ya debo irme.- Susurré contra su pecho.

-Pero si todavia es temprano.- Contesto abrazandome más fuerte.

-Recuerda que estamos a mitad de semana.- Dije riendo, y senti como su pecho vibraba ya que él también lo hizo.

-Tienes razón, nos vemos algún día.- Me besó y continuo hablando.- Espera, ¿como te llamas?

Es cierto, ningúno de los dos había dicho cual era su nombre.

-Kim, me llamo Kim. ¿Y tú?

-Hermoso nombre, yo me llamo...

Abrió los ojos con sorpresa y dejo la frase en el aire ya que unas manos me tomaron de los hombros y tiraron de mi hacia atrás.