Capitulo XIX: Compañía

12 4 1
                                    

XIX

Nada era realmente coherente, había aún muchas cosas por descubrir y tenían miedo. Todo podía resultar completamente diferente de lo que pensaban.

Hallie aún se encontraba recuperándose, era visitada por Zander, Louis y Jay cada tarde después de la escuela, apoyándola en aquel momento y deseándole lo mejor.

Ella estaba solitaria en ese momento, eran horas de la mañana en que todos estaban ocupados. Quizá ya se había acostumbrado a ello. Sabía que cada mañana a partir del mediodía comenzaba a tener compañía, incluso, Zander era tan importuno visitándola más temprano, con la excusa de que había salido horas antes, pero ella sabía la verdad. Había salido de clases sin ninguna autorización.

Harvey había entrado a la habitación, estaba sonriente.

-¿Cómo sigues? ¿Aun duelen las manos?... O los golpes.- dijo él observando sus heridas.

-Tranquilo. Todo está bien, no duele tanto.

-Me alegro- siguió con aquella bella sonrisa -. Tengo algo de compañía para ti.

-¿Compañía? Pero los chicos están en clase aun.

-¿Quién dijo que se trataba de ellos?

Hallie no dijo nada, observándolo curiosamente esperando alguna respuesta de su parte. Él, por otro lado seguía sin decir nada al respecto. Después se fue de la habitación. Hallie estaba realmente confundida y no entendía el comportamiento de Harvey. Lo que ella no sabía es que al momento de que él salió, una pequeña niña entro, caminando lentamente dejándose llevar por la timidez. Por qué no decía nada, solo estaba con la mirada baja.

-Te conozco de algún lado, ¿no?- dijo Hallie -. Creo que fuiste la pequeña intrusa que revelo nuestro pequeño secreto.

-¡Juro que no fue mi intención!- reveló asustada.

-¿A no? ¿Cómo Harvey lo supo, entonces?

-Me ofreció comida. Nadie puede resistirse a la comida, ¿verdad?

-Oh pequeña intrusa- comento divertida -. Tienes razón. Yo no me negaría a una buena comida.

-Aun así lamento haberle contado.

-Debería agradecerte.

La pequeña sonrió, comenzaba a tener confianza en aquella chica.

-Eres Hallie, ¿cierto?

-Así es. ¿Y tú eres...?

-Hannele. Hannah para los amigos.

-¿tengo el placer de llamarte "Hannah"?

-¡Claro!

Hallie le devolvió aquella sonrisa. Hannah se acercó mas confiada y comenzaron a platicar tranquilamente. La pequeña era bastante linda y respetuosa, no asistía a clases, suponía que llevaba tiempo de no hacerlo. Pero la compañía que las dos tenían de Harvey era bastante agradable. La pequeña no tenía familia, pero no quería explicar el por qué, solo le decía que desde que llego a aquel hospital todo cambio y que no sabía que sucedería cuando ella llegase a salir de ahí. Que Harvey tenía la opción de llevarla un orfanato y esperar a que alguien pueda adoptarla; Hallie pensaba en todo lo que la pequeña había tenido que pasar y como todo había dado vueltas, como a ella le había pasado hace algunos años, y el cómo igual cambio cuando llego a Illinois.

Era bueno tener en su vida a un alma joven rodeándola de plena felicidad, platicando sus pequeñas historias de completa fantasía. Pero a la vez era algo tan real.

Ephimeral©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora