CUARENTENA - JORI

Día 4

Este era el día en el que me había puesto de acuerdo con mis amigos para hacer una videoconferencia todos juntos.

Lo cuál era muy bueno ya que estaba comenzando a entrar en una especie de crisis. Jade pasaba mucho tiempo en solitario y no me quedaba otra opción que hacer lo mismo.

La escuela tenía muchos espacios entretenidos, pero de cualquier forma siempre venía bien poder interactuar con los chicos.

- Chicos, no saben lo hermoso que es poder verlos – Dije cuando todos sus rostros aparecieron en la pantalla.

- Y que lo digas – Dijo André – Estar atrapado aquí con mi abuela es una locura –

- Cat ¿Por qué desactivaste la cámara? – Pregunté

- Mi hermano se niega a usar ropa y... No es una escena agradable de ver – Explicó la peliroja.

- ¿Y por qué no te cambias de habitación? – Preguntó Robbie.

- Espera... ¿Robbie? – Me acerqué aún más a la pantalla - ¿No estabas en prisión? –

Los demás chicos también se acercaban para detallar el fondo en el que se encontraban el chico y su títere.

- Sí... Pero no es como la prisión común, es prisión preventiva – Explicó Robbie

- Oh y ¿Eso es mejor? – Pregunté

- No... - Respondió

- Aquí hay un montón de delincuentes – Dijo Rex - ¡Sáquenme por favor! –

- ¡Oye! ¿A quién le llamas delincuente? – Se escuchó una voz bastante grave de fondo.

- Fue Rex – Respondió Robbie con una expresión de horror. – No, no, esperen... –

Se observó cómo alguien tomaba el teléfono de Robbie y después su conexión terminó.

- ¿Creen que él vaya a estar bien? – Pregunté.

- No lo sé, pero aprenderá la ley de "Flojito y cooperando" – Opinó Beck.

- ¿Y cómo te va en HA? – Preguntó André.

- Bien, ya saben Jade y yo... -

- ¿¡Qué!? – Preguntó Cat encendiendo su cámara sólo para que viéramos su rostro sorprendido.

- Si... Ya les había contado que me quedé aquí atrapada con Jade –

- Ah... Cierto – De nuevo apagó la cámara.

- Bueno, como sea, no es tan malo como pensé – Encogí los hombros.

- Apuesto a que Beck quisiera estar en tu lugar – Dijo André con una sonrisa extraña.

- No... Espera a que termine la... - Beck hablaba con alguien detrás de la pantalla y a quien nosotros no podíamos ver – Creo que yo me tengo que ir –

- ¿Quién te habla? Es cuarentena... - Dijo André

- Uhmm es mi madre, quiere que ayude con algo en su casa – Explicó él – Cuida bien a mi chica, Tori –

- Si, claro, mientras no enloquezca y me asesine con sus tijeras –

Beck sonrió negando y se desconectó.

- Esa es una gran idea – Escuché detrás de mí.

Di un pequeño salto que traté de disimular.

- Jade... Pensé que estabas entretenida escribiendo mensajes ofensivos en los espejos del baño - Comenté.

- Me aburrí – Dijo ella – Hola André – Se sentó junto a mí

- Hola Jade –

- Déjame adivinar, Cat tiene la cámara apagada porque su hermano camina desnudo por la casa –

- Si... - Respondimos el chico y yo al mismo tiempo

- Holis Jade – Cat prendió la cámara por algunos segundos y luego la volvió a apagar.

- En fin... ¿Y cómo hacen para...? – Preguntó André, pero se vio interrumpido por un grito histérico.

- ¡André! ¡Está lloviendo dentro de la casa! –

- ¡Estas en el baño abuela! ¡Esa es la regadera! –

- ¡Hay un monstruo tragándose mi pie! –

- Creo que volvió a meter la pata – Dijo André llevándose las manos a la cara. – Tengo que ir a ayudarla –

- ¿Metió el pie en el retrete? – Preguntó Jade.

- Si... De nuevo – Negó el chico.

- Tienes que tomar una foto de ello y enviármela –

- Nos vemos – Se despidió él.

- Vamos... Te pagaré – Dijo Jade con rapidez, pero André ya se había desconectado.

- Y sólo quedamos tres – Dije, pero Cat no hacía ningún ruido. – ¿Cat, sigues ahí? –

Miré a Jade y ella se encogió de hombros.

- Estas invadiendo mi espacio personal – Se quejó

- Tú te sentaste en seguida de mí – Respondí

En eso escuchamos la risita de Cat.

- ¿Cat, volviste? – Pregunté.

- Si... Estaba preparándome cereal con yogurt – Encendió la cámara y lo que vimos nos confundió bastante.

- ¿Por qué pusiste yogurt dentro de la bolsa del cereal? – Preguntó Jade.

- No había platos – Respondió Cat – Mi mamá los guarda bajo llave –

- ¿Y tu hermano? – Pregunté yo.

- Oh... Se quedó dormido a mitad de la sala – Explicó - ¿Han probado las moras? –

- Si... - Respondimos y ella rió.

- Son sabrosas – Dijo ella.

Luego se hizo un silencio extraño en el que sólo la veíamos comer su cereal.

- ¿Ustedes duermen juntas? – Preguntó de pronto

- No – Respondió Jade con expresión asqueada.

- Deberían – Dio otra cucharada al cereal.

- Adios, Cat – Dijo Jade y me quitó el teléfono de las manos para finalizar la llamada.

- Oye... - Me quejé – Era mi llamada –

- Te hice un favor – Me lo devolvió sin interés y caminó hacia la salida.

- Si... Tal vez – Acepté.