Mí desafortunado amor

Capítulo 21

- Mmmh- dos de sus dedos jugaban con mí entrada, mis piernas temblaban cada vez que succionaba y tocaba mí próstata a la vez,- Oh, sigue así- soltó un gemido cuando sujeté su pelo y moví mis caderas con rapidez al sentir como el volcán estaba a punto de erupcionar, pero una nueva persona apareció.

- Dijiste que estaríamos juntos en esto.

Jungkook, limpió su boca con el dorso de su mano, antes de hablar- Te dejé la mejor parte.

Se separó de mí, dejando que Yoongi continuara con lo que él, estaba haciendo.

- Te amo, bebé- dijo el pelinegro.

- Yo también te amo, bonito- continúo Yoongi, quién ahora estaba al lado de Jungkook.

- ¿Qué es esto?.

Ambos se miraron y se sonrieron, te amo, se dijeron antes de besarse.

- ¡No!- desperté agitado, ¿Qué fue eso?,  Miro a mí costado y Yugyeom, ya no estaba, ¿Habrá escuchado algo?, rasqué mí cabeza con ambas manos, debo estar volviéndome loco.

Tomé un tercer vaso de agua, antes de volver a la habitación, visualizo a Jin, durmiendo en el sillón, sigo caminando hasta que siento un pequeño quejido en el balcón, la puerta estaba abierta, saco la cabeza y veo una pequeña figura acurrucada en la esquina.

- ¿Yugi?.- me acerco a él- Yugi, ¿Qué haces aquí?.

- Tuve una pesadilla, ¿Tú?.

- También.- por qué sí, para mí fue una pesadilla, muy rara y excitante pero pesadilla al fin.

- ¿Quieres contarme?.

- No- dije inmediatamente- ¿Tú?.

Su labio tembló- Siempre es la misma, con diferentes escenarios, pero esta noche, cambió la persona, no era Mark, quién moría,- limpió una lágrima- era Hoseok.

- Espera, Mark, ¿Murió?.

Asintió- Después de que me dieran de alta, fue a la primer persona que fui a buscar,- limpió su nariz- cuando llegué, su padre me golpeó, yo era el culpable de que su hijo muriera, si no lo hubiese confundido con mis mariconeadas, él estaría vivo,- se abrazó a si mismo- en ese momento no creí nada de lo que me dijeron, pero cuando me encontré con su mejor amigo, me contó lo que en verdad pasó,- comenzó a temblar, producto de que estaba conteniendo el llanto- Mark, él... se suicidó, mis padres le habían dicho que yo morí, él no soporto la culpa por no haberme defendido, o algo así decía la carta, realmente no la leí, no podía leerla, fue la persona que me enseñó a amar, Taehyung- escondió su rostro entre las rodillas y lo abracé.- no sabes lo culpable que me siento,  y cada vez que se aparece en mis sueños, corro hasta no sentir mis piernas, quiero decirle que estoy vivo que no me deje solo, pero... siempre llego tarde, lo encuentro muerto...

- No eres el culpable y no estás solo.-
Veo a Jin que se acerca con una manta y nos cubre con ella,- la culpa fue de tus padres, que no aceptaron su amor,- se arrodilló hasta llegar a su altura- ustedes solo se amaron, y el mundo, no estuvo preparado para semejante muestra de amor- limpió sus lágrimas- no debes sentirte culpable, nadie debe sentirse así por amar, y no estás solo, nosotros estamos contigo, además, ahora tienes a Hoseok.

- Tengo miedo, no quiero que le pase nada malo.

- Es normal tener miedo, pero estoy seguro de que Hoseok, no te dejará solo y te defenderá con uñas y dientes, y nosotros también, somos tú familia y para eso estamos.

- Los amo- dijo antes de abrazarnos.

- Ahora, vamos adentro, preparé café.- Jin se levantó.

- Ah, Tae, voy a dormir con Jin.

Lo miré ofendido- ¿Por qué?, ¿Es por qué te dijo palabras lindas?.

Rascó su cabeza y río- No, es porque no quiero escuchar tus gemidos mientras tienes un sueño húmedo.

- ¿Qué?.

Miré a Jin haciéndome el desentendido, pero este estaba riendo.

- También te escuché.

Este era uno de esos momentos en que quería que la tierra me tragara.

Yugyeom, me abrazó por los hombros- ¿Quién fue?, ¿Jungkook o Yoongi?.

- Hoseok- dije y salí corriendo hasta la cocina.

- Ya verás cuando te agarre, Kim Taehyung.

Yugyeom corría detrás mío para alcanzarme.

Después de tomar café, volvimos a dormir pero esta vez no hubo ningún tipo de sueño.

Era lunes y volví a trabajar, aunque me dijeron que me tomara algunos días más, no podía quedarme entre las cuatro paredes de mí casa.

Hoy tenía que trabajar con Jungkook, no lo había visto desde esa noche que Jin lo corrió.

Abrí la puerta de la sala de fotografía y fui recibido por dos personas que peleaban por quién le metía más la lengua a la otra.

- Hhmhnn- hice ruido con mí garganta.

- Oh, Tae, ¿Qué haces acá?.- Yugyeom, limpiaba su boca, pera y todo lo que tenía con saliva.

- Vengo a trabajar, y ustedes, deberían hacer lo mismo.

- Taecito- Hobi, me abrazó- ¿Cómo estás?, Pensé que no vendrías.

- Estoy bien, ¿Tú?

- Enamorado.- Yugyeom cubrió su cara por la vergüenza.

- Ya veo- reí- los felicito, se ven muy bien juntos.

Yugi, me abrazó y pegué un salto al sentir su erección- ¡Ay!, Saca eso de mí pierna.

- Perdón Tae, es que Hobi, es muy caliente.

- Demasiada información.- caminé hasta el escritorio.

- Peor sería que hubiese tenido un sueño húmedo a tú lado.

Lo miré y Hoseok también, aunque este un poco confundido.

- ¿De qué hablas?.

- ¿No te conté?

- Cállate.

- Taehyung, tuvo un sueño húmedo la otra noche,- Hoseok me miró y comenzó a reír- aunque no sé si fue con Jungkook o Yoongi, o fue con los dos, no me quiso contar.- el golpe en la puerta nos hizo mirar- ¡Justo!, Uno de los sospechosos.

- ¿De qué soy sospechoso?.- preguntó el pelinegro cuando entró.

- De excitar a Taehyung, en los sueños.

Jungkook, me miró y sonrió de lado- Yugyeom, deberías irte, no querrás que le diga a Nam, lo que haces en vez de trabajar.

Abrió los ojos y salió corriendo.

- Entonces, ¿Qué hacemos?.

Miré a Jungkook y mordió su labio inferior.

Suspiré- Trabajar, a eso venimos.

Hubiese sido un buen día laboral, si no fuese por el bocaza de Yugyeom, hablara más de la cuenta, ahora tenía que soportar las miradas que Jungkook me daba, pero eso no fue lo peor.

Terminé de ordenar los últimos papeles antes de volver a mí oficina, el problema era que el pelinegro no se había ido.

- Así que, soñaste conmigo.

Rodeé los ojos- No.

Se acercó por detrás y suspiró en mí oreja sentí una corriente eléctrica por mí espalda cuando susurró- ¿Qué te hacía en el sueño?- mordí mí labio cuando besó mí cuello- Dime.

Cerré los ojos y me volteé, tenía esa sonrisa que odiaba- No fuiste tú, fue Yoongi.

Su sonrisa desapareció y empujó su lengua contra su mejilla antes de darse vuelta y salir.

Maldito Yugyeom.