Capítulo 18

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Había pasado más de una hora, y Yoongi, todavía no volvía, caminaba de un lado a otro, ya no me quedaban uñas para morder, ¿Cuánto tiempo tardarían?, Después de fumarme el sexto cigarrillo, me acomodo en el sillón y el timbre suena, haciendo que me levante inmediatamente para abrir la puerta.

Del otro lado, Yoongi, quién tenía sus manos en los bolsillos, me miraba serio- No te quedes ahí, pasa- me hice a un costado para que ingresara, lo cuál hizo con pasos lentos,- ¿Qué pasó?- traté de acercarme pero se alejó- ¿Yoongi?, Por favor, dime algo.- pasaron varios minutos así, yo tratando de me dijera algo y él, callado, tenía que hacer algo, su silencio me ponía nervioso- prepararé un poco de té.

Dió tres pasos grandes y llegó hasta mí aprisionando mí cuerpo entre sus brazos, para esconder su rostro en mí cuello- Di... dime qué... que es mentira- su voz salió cortada.

- Yoongi, ¿De qué ha..

- Por favor, Taehyung,- apretó con fuerza y apoyé mis manos en su cintura- dime qué es mentira, dime qué no dejaste... que te tocará, que no lo besaste, dame una razón para gol... golpearlo.- Sus lágrimas caían en mí piel- dime qué es mentira.

La culpa me invadió, Yoongi, no merecía esto- Tenemos que hablar,- negó aún sin separarse- Sí, hay que hacerlo, jamás te mentí, no lo haré ahora.

Lo llevé hasta el sofá, dejó de abrazarme, para sentarse y mirar el suelo.

- Yoon, lo lamento, no puedo mentirte, es... es verdad, yo dejé que me tocara y yo lo besé.

- ¿Por qué?- me miró cuando no obtuvo respuesta.

- No sé, no quiero excusarme.

- ¿Te arrepientes?.- esa pregunta hizo eco en mí cabeza, lo pensé, y al parecer, fue por mucho tiempo, ya que Yoongi, se levantó y caminó hasta la salida.

- ¡Espera!, No te vayas.

Volvió y tiró de mí remera hasta apoyarme contra la puerta,- Date cuenta, ¡Te engañó, Taehyung!, No importa si lo hizo para protegerte, tú mismo me dijiste que lo viste disfrutar, no es justo que con unas cuantas palabras, ya corras hacía él- mordí mí labio, cuando empezó a temblar- Perdón, no merecías que te lo dijera así, pero es de la única forma que me salió, yo te amo, te amo, ¡Te amo!, Y sí, fui yo, quien vino a Japón por tí, fui yo, quien insistió con esto, fui yo... Pero entiende que te amo y que me duele saber que vas a salir lastimado... otra vez.-Cerró los ojos y suspiró- Siempre que Jungkook, está cerca, hay problemas, si no, míranos, estábamos bien, me diste la oportunidad de enamorarte y tienes razón, no merezco esto, pero no voy a rendirme, voy a enamorarte,- llevó sus manos hasta mí rostro y limpió una lágrima que se escapó- ahora tengo que irme, cuídate y trata de descansar- besó mí frente y salió de casa.

Yoongi tenía razón, en todo, Jungkook, no me merecía, y yo, yo no merecía a alguien tan hermoso como Yoon.

Puse seguro en la puerta y fui hasta mí habitación.

Otra vez me dolía el corazón, llamé a la única persona que podía consolarme en estos momentos.

Después del tercer tono, atendió.

- Hola bebito.

Sentir su voz, y no aguanté, rompí en llanto- Mamá, te necesito.

- ¿Bebé?, ¿Estás bien?- ella no podía verme, pero igual negué.

- Me duele el corazón, ven antes, por favor, me siento solo.

- Oh, mí amor, me encantaría estar contigo y abrazarte, cuando menos lo esperes, estaré ahí y me quedaré para siempre.

Mí desafortunado amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora