Mí desafortunado amor

Capítulo 32

Pasaron dos días, en lo que no supe de Yoongi, o al menos no mucho, solo que había mejorado, pronto le darían de alta, y sería juzgado.

Jimin, estaba con tratamiento psicológico, Seo Joon, me explico que en esos casos, la sentencia sería internarlo en un hospital psiquiátrico.

Namjoon, también llegó ese día, y aunque lo había perdonado por lo que hizo, seguía pidiendo perdón, lo entendía, Jimin, lo había amenazado con matar a su hermano si no le decía donde vivía, actuó mal, lo se

Y aquí estábamos, otra vez con la misma charla.

- Taehyung, por favor, perdóname, juro que si pudiera, volvería el tiempo atrás.- estaba arrodillado frente a mí.

- Nam, ya te dije que te perdoné, no sigas con eso.- Intenté levantarlo.

- No, Tae, fue horrible lo que te hice,nunca pensé que te pasaría esto, y tampoco sabía que Jimin, era mí hermano, ¿Por qué no me pidió ayuda?, Si tan solo hubiese confiado en mí, le hubiese dado mí vida, pero jamás dejaría que te hiciera algo malo, ¿Qué hice mal?.

Me arrodillé junto a él y sujeté su rostro- Nam, lamento decirte esto, pero Jimin, estaba podrido hace mucho, y no fue tú culpa, no tuvo una buena vida, tú solo hiciste lo que cualquier hermano hubiese hecho, querer protegerlo, aún sin saber quién era, tú lo hiciste.

- Me duele el pecho, Taehyung, la única familia que realmente tuve, fue a la que más defraudé, no me pidas que no te siga pidiendo perdón, te hice mucho daño, y te debo mucho.

- Tranquilo- lo abracé- ya te dije que no hay más nada que perdonar... Claro que sí me pones una Nespresso en mí oficina, la deuda quedaría saldada.

Reí nervioso cuando se separó.- ¿Seguirás trabajando?.- preguntó emocionado.

- Por supuesto, estuve muchas noches sin dormir, para poder conseguir ese trabajo, no me iría aunque me echaran.

- Gracias, Tae.
Volvió a abrazarme.

Hablamos un poco más, antes de que se fuera, también me contó, que Jin, lo había dejado después de que se enteró lo que hizo, hablaría con mí amigo.

Jungkook, no me dejaba solo en ningún momento, en sentido literal, como en este momento, que no me dejaba orinar solo, porque según él, alguien podría entrar por la ventana del baño y querer hacerme algo.

- Jungkook, por favor, no puedo hacerlo si estás mirándome.

- Está bien, no te miro.- dijo dándose media vuelta.

Mordí mí labio.- Necesito privacidad, no creo que alguien pueda entrar por esa ventana, además estamos en un segundo piso, ¿Quién la escalaría hasta acá?.

Volvió a mirarme, pero esta vez, sus ojos estaban llenos de lágrimas.- Perdona bebé, pero es que no quiero que nada malo te pase, no sabes el miedo que sentí ese día, no sabía dónde estabas,- su labio comenzó a temblar antes de que llorara- tenía miedo de no poder llegar a tiempo,- me acerqué a él y lo abracé- te amo, Taehyung, eres mí vida, no podría vivir sin tí.

No iba a negarlo, también empecé a llorar.- Jungkook, estoy bien, y aunque también tenía miedo, sabía que llegarías a mí, no iba a morir sin antes decirte que, eres el amor de mí vida, la persona que más amo en este mundo, te iba a esperar, siempre lo haré.

sujetó mí rostro y me miró a los ojos- Te amo, bebé.

- Te amo, mí amor.- dije antes de unir nuestros labios.

Fue un beso especial, sentí que todos mis miedos se iban... si estaba al lado de Jungkook, sabía que nada malo podría pasarme.

- Está bien, te dejo solo, te espero en la habitación.