Capítulo 30

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Dí pasos lentos, por mí cabeza pasaban mil preguntas, y ni hablar de los sentimientos que golpeaban mí pecho, pero todo quedó en nada en cuanto llegué al lado de Jungkook.

- Ho...- fue lo único que dije, ya que el pelinegro, inmediatamente comenzó a besar mis labios, no iba a mentir, amaba sus besos, mí cuerpo conocía cada movimiento de él, sabía que después de sujetar mí nuca e introducir su lengua, sus manos irían hasta mí cintura para acercarme más a él,- la.- terminé por decir una vez que se separó.

- Hola bebé.- habló sobre mí boca.- te extrañé.

Quería decirle que también lo había hecho, saber cómo estuvo, si me había extrañado tanto como yo a él, si no pudo dormir pensando en si comió, tantas preguntas y la única que salió fue. - ¿Qué hacemos acá?.

Sonrió y volvió a unir nuestros labios en un pequeño beso.- Entremos y lo sabrás.

Sostuve su mano cuando me tendió la de él.

Caminamos por un pasillo oscuro, mientras más pasos dábamos, el volumen de la música se escuchaba más fuerte, era unas de mis canciones favoritas, el miedo se instaló en mí al dejar de sentir su contacto, no duro mucho, en cuanto las luces se encendieron, supe que todo estaría bien.

Sentía que mí corazón se saldría por mí boca, habían fotos mías por todos lados, desde mí infancia hasta la actualidad, ¿En qué momento las tomó?.

- Jungkook, ¿Qué es esto?.- pregunté cuando se acercó hasta mí.

- No pudiste asistir a mí exposición, y quise recrearla, solo para tí.

     Mí lugar seguro en el mundo.

     Mí lugar seguro en el mundo

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Mí desafortunado amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora