Un chico de Krypton y un chico de Daxam; Emiliaco (adaptación)

Epílogo

Espero disfruten este último capítulo.

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Tres años han pasado desde mi casamiento con Emilio. Y debo confesar que con él he vivido los mejores años de mi vida, desde el día que dijimos "si acepto" hemos vivido una aventura tras otra, y es que mi bello príncipe sabe darle emoción a cada momento que compartimos.

La primer gran aventura después de nuestro casamiento ocurrió una semana después de la boda y es que al regresar de nuestra luna de miel, Emilio me tenía una sorpresa.

Su sorpresa terminó siendo un bar, del que sorpresivamente ambos éramos dueños, no supe en qué momento lo compró, ni mucho menos con que dinero, lo único que sé es que tenemos un negocio juntos, y sabíamos que funcionaria porque ambos lo administraríamos, aunque hoy en día Emilio pasa más tiempo trabajando en el bar, mientras yo sigo trabajando en CatCo.

Seguimos ayudando a la DOE cuando nos requieren y es agradable saber que ya no solo somos mi primo y yo quienes ayudamos a las personas, me gusta que Emilio ahora también sea parte del equipo.

Amaba que mis días iniciarán y terminarán al lado de la persona que más amo en este mundo, simplemente cada momento al lado de Emilio era maravilloso y si bien éramos felices el uno con el otro, sentíamos que necesitábamos a alguien más en nuestra pequeña familia y es que después de ver a Azul y Maggie adoptar a un pequeño niño, estábamos más que decididos de que queríamos un bebé, un pequeño o pequeña que fuera quien completará a nuestra familia.

En un principio pensamos en adoptar, pero siendo honestos queríamos un bebé que fuera parte kryptoniano y parte daxamita, por lo que Azul empezó a trabajar en una forma que pudiera cumplir nuestro deseo.

Así que después de varios meses de pruebas de laboratorio, finalmente logró combinar mi ADN con el de Emilio de manera exitosa, creando una vacuna la cual al ser inyectada en el cuerpo, desarrollaría un embarazo como el de cualquier mujer humana.

Aún recuerdo que la mayor incógnita era ¿quién cargaría al bebé en su vientre?

*

Flashback.

Emilio y yo nos encontrábamos sentados en la cama conversando sobre quién sería el encargado de cargar a nuestro bebé, el tiempo era crucial, y era importante tomar una decisión antes de que la vacuna perdiera su efecto.

Desde días atrás quería decirle a Emilio, que yo quería ser quien llevará al bebé en su vientre, solo que no encontraba la manera de decirle, el consejo de Azul rondaba por mi mente. Sé directo, como si quitarás un curita, había dicho ella. Tal vez eso debía hacer.

- Quiero llevar yo al bebé -solté de la nada.

- ¿Seguro? -preguntó mi esposo.

- Sí -respondí. -Sé que no podré ayudarte a proteger la ciudad por un tiempo, pero confió en que Kal y tú se encargarán de ello.

- Si es lo que quieres cuenta conmigo en todo. Hagámoslo -comento Emilio.

- Espero cumplas cada uno de mis antojos y exigencias -comenté.

- Con gusto haré todo lo que me pidas -afirmo él.

Nos quedamos en silencio unos segundos hasta que el volvió a tomar la palabra.

-¿Seguro? -preguntó una vez más.

- Totalmente -respondí.

Emilio asintió levemente con la cabeza antes de dirigirse a la mesa de noche y tomar el pequeño portafolio que contenía la vacuna, abrió el portafolio y saco la vacuna, la observo y se acercó lentamente a mí.