Love | YM

20

Fue el último día que JiMin y YoonGi tendrían a solas, antes que Airi viniera nuevamente a casa, cuando el mayor le contó su pasado con SunHee.

Sentados en diferentes sofas de la sala del mayor, frente a frente, YoonGi comenzó a revelarle como fue el comienzo de su matrimonio con su mejor amiga.

- SunHee fue mi mejor amiga desde que estábamos en la escuela elemental en Daegu - comentó él primeramente.
- Fue mi compañera de juegos desde entonces, éramos inseparables. Según sus padres y los míos, nos casaríamos cuando fuésemos adultos. Nada alejado de la realidad - rió el mayor ante esos recuerdos.
- Cuando cumplí los trece años, le confesé que estaba enamorado de ella -

JiMin dejó escapar un pequeño "oh" ante lo dicho. No se había esperado aquello de parte de su novio.
YoonGi no dejó escapar aquella acción por parte de su menor y sonrió, tomando entre sus manos las contrarias y dejando un leve apretón en ellas.

- No te preocupes, cariño. Tú eres el amor de mi vida - le tranquilizó él.

JiMin se sonrojo al verse descubierto, pero no dudó en sonreír le al mayor.
Al verlo tranquilo, YoonGi siguió su plática.

- Como era de esperarse, me rechazó. Ella dijo que solo me veía como un hermano, y que no podía corresponder a mis sentimientos - negó al recordar eso.
- Ese día llore demasiado y la evité por días. Pero ella, un día fue a mi casa y me golpeó por ser tan dramático. Me dijo que dejara aquellos sentimientos por mi bien y que volviéramos a ser amigos, como antes -

El menor lo vió tocarse el brazo izquierdo y le miró interrogativo.

- Esa mujer golpeó muy fuerte mi bracito, amor ¡Los moretones permanecieron allí por varios días! -
JiMin sonrió al ver el puchero que su novio hizo al contarle eso.

- A partir de ese día volvimos a lo que éramos anteriormente. Con el tiempo me olvidé de mi enamoramiento y comenzé a verla como ella a mí, como una hermana.
En los siguientes años permanecimos juntos, ya sabes, escuela media, preparatoria -

YoonGi miró a su novio con un poco de duda, creyendo que lo estaría aburriendo con aquella historia. JiMin, quién pareció darse cuenta de eso, negó rápidamente y le incitó a seguir con ello.

- En la universidad, SunHee conoció a un estudiante de intercambio. Él era muy bueno con ella, y no tardamos en hacernos amigos. Hiroki venía desde Japón, con sus padres trás él, queriéndolo casar con alguien de la alta sociedad japonesa.
Claro que ellos no estuvieron contentos cuando él les presentó a SunHee como su novia y le exigieron dejarla. Él no acepto eso y prefirió no verlos nuevamente -
- Un para de meses después, ellos decidieron que se casarían al terminar sus estudios. Los padres de ella estaban de acuerdo, así que él le comentó a Sun que iría a visitar a sus padres para contarles sobre su boda y tratar de convencerlos de aceptarla. Ella no estuvo de acuerdo con eso, pero no quería interferir en la relación de su novio con sus padres. Así, él se puso en marcha a Japón, y le prometio a SunHee que volvería en unos días -

YoonGi suspiró con nostalgia. Recordar la felicidad de su amiga cada que le contaba algo de aquel chico. Repentinamente, su mirada se volvió triste.

- Hiroki no volvió el día establecido. Él dejó detener comunicación con SunHee unos días antes, así que todos pensamos que sus padres lo habían convencido de abandonarla -
- Ella permanecía todos los días frente a su ventana, esperando por él. Parecía que aún tenía fe en que él regresaría. Pero yo sabía que no lo haría.
Unas semanas después, nos enteramos por medio de los noticieros, que un joven llamado Inoue Hiroki había sido asesinado en su país por orden de sus padres. -

Sorprendido, JiMin cubrió su boca con sus pequeñas manos al escuchar aquello. Aquellos era demasiado cruel.
¿Cómo esa gente pudo hacerle aquello a su hijo?

- Ellos prefirieron mandar a asesinar a su propio hijo, que verlo junto a alguien que no era de su misma clase social -
YoonGi soltó aquellas palabras con enojo.

- SunHee quedó devastada al enterarse sobre su muerte, que se aisló de todo. Un día que estaba visitándola, para tratar de levantarme el ánimo, fui a su habitación para hacer que se alimentará un poco, pero, al no verla en su cama como en los últimos días, tuve un mal presentimiento. Me dirigí hasta su baño, el cual estaba con llave y toqué con insistencia mientras la llamaba, pero no obtuve respuesta de ella. Así que tuve que romper la puerta, y la ví... A ella, dentro de su bañera y con sus muñecas desangrándose.
La llevamos al hospital, donde la atendieron rápidamente. Pero grande fue nuestra sorpresa, cuando los médicos nos dieron la noticia de que ella estaba embarazada de al menos ocho semanas -

- Nadie tenía idea de eso. Ni ella, ni Hiroki - el menor sostuvo la mano de su novio al ver lo afligido que se encontraba.

- Cuando despertó, no dijo palabra alguna. Parecía ida solo viendo un punto fijo. Sus padres, al no ver alguna respuesta de su parte, le dieron la noticia de su embarazo. Ella parecio realmente aturdida al escuchar eso, que no les creyó y gritó por aquella supuesta mentira, pidiendo que los médicos le dijeran la verdad.
Después de unas semanas, salió del hospital ya con la idea de que sería madre, pero los señores Yang la trataron de convencer para que diera en adopción al niño una vez naciera. Sé que la intención de ellos era que su hija no siguiera sufriendo por la pérdida de Hiroki, pero aquello solo ocasionó que SunHee tomara la decisión de irse de su casa. Ella pensaba que sus padres la alejarían del único recuerdo que tenía de su novio.

Sabía que ella no podría cuidar sola de un bebé, así que le propuse casarnos y ser un padre para su hijo. SunHee se negó a eso, pero yo insistí. Terminó por acceder una vez que establecimos un par de cosas: no tendríamos relaciones ni nada, solo nos casaríamos por el niño, y una vez que este fuera mayor de edad, le contaríamos sobre su verdadero padre -

- Nuestro matrimonio era bueno y ambos lo respetamos. Pero, cuando Airi tenía seis años, Sun me pidió el divorcio. Yo realmente estaba desconcertado ante eso, pero ella habló conmigo. Ella quería que buscará a alguien que amara realmente, que ella haría lo mismo -

- Entonces, tú aceptaste divorciarte... -

YoonGi asintió.

- Comprendí que ella merecía la felicidad que se le fue arrebatada hace años. Así que firmamos el divorcio, pero aún así me permitió seguir viendo a Airi. Y se lo agradezco -

- ¿Y SunHee? ¿Ella está bien? - preguntó el menor con preocupación.

- Está bien, cielo. Ahora ella es feliz con alguien más -

JiMin sonrió. Todas las personas que han atravesado por momentos difíciles, merecen ser felices.

- Yo también encontré la felicidad junto a un hermoso chico, de ojos tan brillantes como la luna, llamado Park JiMin -

Love | Capitulo 20

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