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JiMin se encontraba arreglando se para la salida que su amado novio había planeado para esa noche.
No sabía exactamente a que lugar lo llevaría, y optó por ponerse algo elegante pero sencillo.

No paraba de sonreír desde aquella mañana, cuando YoonGi fue rápidamente de visita a su departamento para invitarlo a cenar y pedirle que llevara una muda de ropa extra, porque pasarían la noche fuera.
Aunque le pareció extraño lo nervioso que se encontraba su pareja, decidió no preguntar nada.



•••


5:30 p.m.

JiMin esperaba a su mayor, sentado en su sofá mientras revisaba sus mensajes de texto con su mejor amigo.
Su pequeña mochila ya lista, con su cambio de ropa y otras cosas que le serían de utilidad permanecía sobre la pequeña mesita de centro.

Pequeñas risas escapaban de sus lindos labios al leer los mensajes de un desesperado TaeHyung le había mandado anteriormente.
Y como evitar reír con los textos del Kim menor (ahora Jeon) que decían: "No tengas hijos, JiMinie" "No hagas el sin respeto sin gorrito" "Ya no aguanto, ya no aguanto" pero sintiéndose enternecido con el mensaje final de su amigo: " Ellos son mi felicidad entera" junto a una foto de sus dos bebés y su esposo, JungKook.

Dió un pequeño suspiro al pensar en su lindo novio, e inconcientemente posó una de sus pequeñas manos en su vientre plano. Sonrió al imaginar que en un futuro él y YoonGi serían padres también.

De todos modos, YoonGi ya le había comentado sobre tener un futuro juntos. No tenía nada que temer.

Salió de sus pensamientos al escuchar el timbre de la entrada, y sintiendo de inmediato las ya conocidas "mariposas" hacer estragos dentro de su pequeña pancita.
Poniéndose de pie, y entre torpes movimientos, guardó su teléfono en uno de los bolsillos de su pantalón para inmediatamente ir a abrir la puerta.

Un lindo ramo de peonías apareció frente a él, siendo sostenido por YoonGi, a la vez que le dedicaba una bella sonrisa de encías que lo hizo morir de amor.

- Son para ti, cariño - murmuró el mayor, extendiéndole el ramo de flores.
JiMin las recibió con una sonrisa enamorada y se acercó hasta el rostro de Min, plantando un pequeño besito en sus labios antes de abrazarlo.

- Me encantan, Yoonie. Gracias -
Agradeció el menor después de separarse del abrazo, pero no resistiendo se a besar a su novio una vez más.

- ¿Estás listo, bebé? - preguntó YoonGi, a lo que JiMin asintió en respuesta.

- Sólo iré por mi mochila y podremos irnos, cielo - el mayor le indicó que fuera, que él lo esperaría allí.
JiMin se adentró rápidamente a su casa y dejó las flores que recibió de Yoongi en un floreo lleno con agua, luego tomó de la mesa el pequeño bolso negro que contenía sus cosas y asegurándose que todo estuviera en orden en la vivienda antes de antes de irse.

Salieron fuera del edificio unos minutos después, con sus manos entrelazadas y un tanto abrigados a causa de las bajas temperaturas.
YoonGi lo guío hasta su automóvil, donde le abrió la puerta del copiloto de manera caballerosa, haciendo sonrojar al menor.
No tardaron en ponerse en marcha instantes después.


•••

El ambiente dentro del auto era cómodo.
Con la radio encendida en una estación de música romántica, la calefacción en una buena temperatura y sus manos unidas en la palanca de cambio, hacían el ambiente demasiado íntimo y perfecto para ambos.
JiMin miraba por la ventana del auto como se alejaban de la bulliciosa ciudad, dejando atrás los grandes edificios y dando paso a la bella naturaleza del bosque.

 Love | YM Donde viven las historias. Descúbrelo ahora