Guerrero Omega II -ChenMin Omegaverse-

Capítulo 10

Habían pasado unos días desde que tuvo aquel beso con MinSeok en la casa del omega y la verdad JongDae tenía una sonrisa de imbécil enamorado en su rostro. Su animal lo obligó a besar al omega y no estaba arrepentido de nada. Aunque su parte razonable lo hizo golpearse una bofetada por haber besado al omega y no pensar en lo que pudo causar en el mayor.

JongDae estaba jugando con fuego.

Ahora se sentía el bastardo más idiota del mundo y estaba compartiendo su sufrimiento recostado en el regazo de JongHyun que lo escuchaba atentamente y sin comentar nada.  Agradecía que en este cruel y desagradable mundo existiera JongHyun, ese hombre era lo mejor del mundo.

-Entonces lo besé Hyun, lo besé. Me gustó que es lo peor, maldita sea!- Lloriqueó.- De seguro ya lo ilusioné.-

-No lo creo Dae, fue algo físico ¿no?-

-Pero lo besé y él me correspondió, y me volvió a besar. Me voy a morir, me voy a exiliar yo solo.-

-No seas idiota. Estás igual de dramático que JongIn.- Dijo JongHyun para tirarle levemente el cabello.- No quiero decir que tienes la culpa, pero tienes la culpa de haber estado calenturriento en esos momentos.-

-No estaba calenturriento.-

-Claro. Casi terminan teniendo relaciones si ni hubiera sido por ByulGi y la familia de Seok. Hablando de ByulGi, creo que vas a morir cuando ella se entere que se comieron en la cocina.-

-Nah, no lo creo.-

-Crees.- Respondió JongHyun mirando al alfa. JongDae continuó contándole sus problemas a JongHyun y este escuchaba atentamente sin interrumpir a excepción de cuando Jongdae le pedía su opinión. Estuvieron hablando unas dos horas aproximadamente sobre la semejante pelotudez que JongDae había hecho.
JongDae pensabs que estaba todo mal, absolutamente todo mal. En cierta parte no debió haber besado al omega, podía estar ilusionando al pobre y esa no era la idea del asunto.

JongDae iba a casarse.

Y eso era una cruda realidad que siempre caía como un balde con hielo y agua fría sobre JongDae.

El alfa estaba tan confundido sobre lo que sentía. Estaba obligado a casarse y no quería, joder, no quería casarse con aquella princesa solo por un maldito acuerdo de sus padres con los reyes del otro reino. Si llegara a tener hijos y otros reyes le proponen casar a sus hijos JongDae se negaría hasta la muerte, JAMÁS obligaría a sus hijos a casarse.
Siguió conversando con JongHyun sobre sus inseguridades con él mismo y con MinSeok y el alfa le escuchaba atentamente como lo había estado haciendo desde hace unos buenos minutos. A veces cuestionaba la paciencia que JongHyun le podía tener a la gente, JongDae no sabía de donde el chico sacaba tanta paciencia.

Otra cosa que lo tenía mal es que había llegado una carta de la familia de su prometida, ni siquiera de la princesa, SUS PADRES le enviaron una carta. Cuando JongDae leyó el encabezado de la carta quiso tirarse por la ventana, pensando que iban a adelantar la boda o una cosa así. Pero se quedó un poco tranquilo al saber que solo lo estaban invitando a cenar. Aunque su desconfianza al leer esa carta aumentó bastante, ya que se le hacía raro que lo invitaran a cenar así de la nada. La fecha de la cena era unos días después de los juegos, suspiró aliviado al saber que aún tenía tiempo para tener crisis mentales sobre sus sentimientos.

-Eh, JongHyun. Me vas a contar quién es tu enamorada?- Preguntó JongDae sentándose al lado de su amigo y notó como las mejillas del alfa se tiñeron de rojo.

-Por qué quieres saber eso?- Exclamó JongHyun sonrojado.

-Da curiosidad saber quién te tiene mirando al cielo como bobo.- Rió JongDae mirando a JongHyun.