•ＩＭＰＯＳＩＢＬＥ• [RUBEGETTA/RUBIUSPLAY]

ᴄᴀᴘíᴛᴜʟᴏ 9 [ᴘᴀʀᴛᴇ Ⅰ ]

   El día tan esperado había llegado, todos en el pueblo hablaban del gran evento que se celebraría esta noche y las tiendas estaban a reventar. Al parecer casi todo el pueblo estaría ahí <<Que gran idea la tuya de aceptar el maldito disfraz>> Me decía a mí mismo mientras lo observaba. 

   Ayer había estado muy seguro de usar aquel disfraz que me había mandado Auron, sin embargo, hoy ya no parecía una buena opción ni por los cien diamantes que había en juego. A primera hora de la mañana me decidí y fui al pueblo, pero al llegar me di cuenta que los disfraces estaban agotados y los que quedaban seguramente ya estarían repetidos.

   - ¡Eres gilipollas, Rubén! –Me gritaba a mí mismo mientras veía mi reflejo en el espejo-. ¡Solo a ti se te ocurre aceptar esto!
   Al parecer todo mundo había solicitado ayuda de amigos y familiares para complementar al cien por ciento su disfraz, pero yo no. Yo lo haría solo, tendría que maquillarme y tratar de estar irreconocible en la fiesta; pero aquí la única pregunta que existía era: ¿Podría hacerlo?

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                                                                   -VEGETTA-

   La fiesta empezaría cerca de las siete por lo que tendría que darme prisa si quería estar listo a esa hora, no podía llegar tarde ese no era mi estilo.
   Estaba realmente nervioso nunca en mi vida había asistido a una fiesta de ese tipo y menos, había tenido una cita en la misma. Al final ya no sabía que era peor, si la fiesta o la cita con Doblas, lo único que sabía era que valdría la pena, siempre vale la pena cuando se trata de él...

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   A lo lejos se veían las luces de colores adornando alrededor y encima del escenario. A medida que te acercabas podías notar toda la decoración y el gran esfuerzo que se le había puesto a aquella fiesta. Sin duda sería una noche inolvidable. 
   En la puerta se encontraba Luzu, dando la bienvenida a su fiesta. Iba disfrazado de Deadpool, lo único que me ayudo a reconocerlo fue su voz y sus movimientos. Seguido de él se encontraba el marco que yo mismo había decorado. Las enredaderas cubrían la base blanca, en esta iban integradas algunas flores blancas y corazones de color rosa pastel. De la parte de arriba colgaba una cortina de color blanco solo que estaba cortada en tiras a modo de que, si la atravesabas no te estorbaría en lo absoluto. Un tipo cuadro de madera estaba situado justo por detrás del marco de flores adornado con luces de colores y flores (Ese cuadro no lo había adornado yo y ni siquiera sabía de su existencia), pero por algún motivo que desconocía quedaba a la perfección con el otro. 
   Las vallas blancas adornaban alrededor del terreno, por fuera los árboles se movían al ritmo del ligero viento que corría esa noche. El escenario estaba terminado; luces de color azul salían por debajo de las losas de madera evitando que la gente se tropezara mientras que su techo estaba lleno de ramas secas de algún tipo de árbol, a los lados también colgaban cortinas como las que tenía el marco de la entrada. Del centro de la pista de baile salían las luces decolores hacia todos lados iluminando todo a su paso. En cada árbol había un farolillo iluminándolo, eso solo hacía que se viera mejor de lo que ya estaba. Una piscina algo pequeña se hallaba del lado derecho junto con algunos sillones donde era seguro te podías sentar. Al lado opuesto, se encontraba la barra; estaba llena de todo tipo de bebidas, comida y aperitivos de todos los colores y sabores. Un caldero de color negro sobresalía de aquella mesa. <<Eso tengo que probarlo>> Me decía a mí mismo mientras me acercaba a la entrada de la maravillosa fiesta.
   -Bienvenido señor –Saludaba Luzu-. Espero disfrute mucho la noche.
   Solté una carcajada.
   - ¿Qué pasa Chaval? –Dije-. ¿Ya no me conoces? 
   Luzu abrió los ojos de par en par.  
   - ¿Vegetta? –Pregunto dudoso-. ¡Estas irreconocible!
   Ambos reímos. Eso era más que seguro. Le había pedido a Akira, una amiga bastante cercana que me ayudara a maquillarme; todo para que nadie pudiera conocerme cosa que al parecer había funcionado. 
   - ¿Enserio no me conociste? –Solo quería confirmarlo-. 
   -Te juro que pensé que eras un señor del pueblo –Dijo riendo-. Me sorprendiste, Vegettita.
   Eso solo hiso que mi sonrisa se ensanchara. 
   - ¿Y los chicos? –No quería estar solo dentro de aquel gran terreno-. ¿Ya llegaron?
   -Yes, están por haya –Dijo señalando hacia la puerta misteriosa que vi hace solo dos días-. Solo esta Fargan, Alex tuvo que irse, pero no tardara en regresar. 
   Solo asentí con la cabeza y me dirigí hacia donde supuestamente estaba la rata de Fargan.