•ＩＭＰＯＳＩＢＬＥ• [RUBEGETTA/RUBIUSPLAY]

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 12

-VEGETTA-

-HORAS ANTES-

   Los labios de Rubén se veían sumamente apetecibles, pero ni por eso caería. Su respiración era tranquila y me daba paz. Estábamos en la cabaña, esperando a que reaccionara. Hacía más de seis horas que lo habíamos encontrado a él y a Fargan desmayados en medio de la nada. Nadie sabía que había pasado.
   -Esta noche habrá una fogata –Anuncio Luzu-. Espero que Rabis ya esté bien para entonces.
   Baje mi rostro, buscando un punto fijo en donde centrarme. Ni siquiera quería pensar que pasaría si Doblas no reaccionara.
   -Ya ha pasado mucho tiempo –Comencé a decir. Al instante sentí como las lágrimas picaban en mis ojos-. No quiero perderlo...
   -Y no lo harás. Ahora ven, vayamos por algo de desayunar –Dijo Luzu-. Necesitas estar bien para él...
   Siendo sincero, no quería alejarme ni un milímetro de Doblas, pero tenía hambre. Así que, sin más, tomé su sudadera y me la puse. Su aroma me abordo al momento haciéndome sonreír. << ¿Enserio lo quería? ¿Cómo fue que no me di cuenta de lo enamorado que estaba de él? >>
   Una escena nuestra paso por mi mente. Fue la vez en que habíamos salido a explorar y nos perdimos. Creo que fue justo en ese momento en que me di cuenta que haría lo que fuera por él. Fue justo en ese preciso instante cuando entendí que lo quería, pero no como amigo sino como algo más...

-TRES MESES ANTES-

   Truenos lejanos invadieron el extraordinario silencio que se había generado en aquel bosque. Doblas y yo caminábamos entre los árboles, tratando de encontrar el camino de regreso a casa. Un ruido justo detrás nuestro nos sobresaltó y al momento me puse a la defensiva. Una ardilla broto de entre los arbustos para después pasar de largo y treparse en un árbol.
   - ¿Acaso Samuel De Luque tiene miedo? –Pronunciaba Rubius detrás mío-. No me lo creo...
   Su risa me abordo.
   -Calla –Le advertí riendo-. ¡Que estamos a mitad de la nada!
   Me sonrió de nuevo.
   -Pero no estás solo, déjate de dramas –Dijo-. Sera mejor buscar alguna cueva o algo que nos cubra. En cualquier momento comenzara a llover y no quiero escucharte llorar...
   - ¿Perdona? –Conteste indignado-. ¿Qué has dicho?
   -Que siempre lloras como una niñita –Me respondió en un tono burlón-. Deberías ver la cara que tienes ahora, joder macho que es una puta broma.
   -No digas esas cosas –Negué con la cabeza-. Busquemos la cueva y ya.
   -E-espera –Dijo-.
   Me volví para mirarlo. Se notaba nervioso.
   - ¿Qué sucede Doblas?
   Su mirada recorrió atentamente los árboles que estaban alrededor nuestro. Frunció ligeramente el ceño para después decir:
   -Siento como si alguien nos estuviera vigilando...
   Me reí ante su comentario. ¿Quién podría estar en aquel bosque?
   - ¿Tienes miedo? –Pregunte ahora yo riendo-.
   Su mirada se detuvo en un árbol. Ni siquiera me prestaba atención, por lo que me voltee y observe lo que él no dejaba de ver.
   -Doblas...
   -Vámonos de aquí –Comenzó a decir apresuradamente-. No quiero estar aquí, por favor...
   -Pero vamos a ver, aquí no hay nadie –Respondí. Esto comenzaba a darme dolor de cabeza-. Estamos solos, Doblas. Déjate de tonterías y vamos a acampar...
   -N-no quiero estar...aquí...
   - ¿Por qué tartamudeas? –Pregunte impactado. Realmente tenía miedo-.
   -T-tengo miedo Samuel, n-no quiero estar aquí...
   Por alguna razón que no entendí, me acerque a él y lo abrace. Estaba temblando. ¿Qué le sucedía?
   -Ven, te sacare de aquí –Dije-. Todo va a estar bien, solo...
   Un ruido bastante fuerte me alarmo de nuevo. Era un trueno, seguido de un relámpago.
   - ¿Prometes nunca dejarme? –Baje la mirada para encontrarme con esos ojos verdes que tanto me gustaban-.
   Asentí y lo pegué más a mi cuerpo.
   -Nada malo te pasara ¿Okay?
   Me miro para seguido comenzar a caminar lejos de ese bosque.

Media hora más tarde, estábamos dentro de una pequeña cueva. Una fogata iluminaba nuestro panorama mientras que la lluvia azotaba fuera de esta. Doblas estaba tirado a mi lado, ambos estábamos preparados para dormir, pero por algún motivo me encontraba inquieto. No me había gustado el comportamiento del chico, algo anda mal y me irritaba el no saberlo.
   -T-tengo frio...
   Lo mire.
   - ¿Q-quieres que yo t-te...abrace...? –Asintió levemente-. Entonces ven.
   Levante la manta que siempre cargo conmigo y me hice a un lado. Rubius se levantó y se fue directo a mí, de un segundo a otro ya lo estaba abrazando. Su mano me sujetaba con fuerza, pero no era nada incómodo. El chico de verdad lo estaba pasando mal.
   - ¿Mejor? –Pregunte sonriendo-.
   -Mejor –Confirmo-.

   Habían pasado por lo menos unas tres horas. Rubius estaba completamente dormido a mi lado. Estaba a punto de quedarme dormido, cuando un ligero susurro me despertó.
   -Te quiero –Susurraba Doblas-. Te quiero Samu...
   Podía sentir como me sonrojaba. ¿Qué me estaba pasando? Era Doblas, no era nadie más, pero en ese momento no entendía aquel sentimiento, no lo entendí hasta ahora.

-ACTUALIDAD-

   El doctor se acababa de ir, el diagnóstico: Apuñalada en el dorso de lado derecho. Por suerte no hubo perforación en algún órgano vital. Tuvieron que pasar unas tres horas más para que Rubén despertara. Después de eso ya no recuerdo mucho, me quede dormido a su lado y cuando despertamos ya era casi de noche. Por lo que sabía, todos estaban en la famosa fogata.

   El fuego ardía en medio de nosotros. Fargan, Alexby, Luzu, Willy y Lolito metían divertidos sus malvaviscos a la fogata mientras que Doblas y yo los mirábamos riendo. Auron no había querido asistir, supuestamente necesitaba descansar.
   - ¿Entonces ya son novios? –Pregunto Fargan-.
    Rubius y yo sonreímos. 
   -Que solo somos amigos, que De Luque no quiere –Mis ojos se abrieron como platos-.
   ¿Cómo se atrevía a decir eso?
   - ¿Tas tonto? –Dije-. Yo nunca he dicho que no...
   Una ola de gritos lleno el lugar haciéndome sonrojar.
   -Tal vez Vegetta se merezca algo mejor...-Escupió Willy-.
   Todos dejaron de reír.
   - ¿Eso que cojones significa? –Pregunto Alexby-.
   -No hay nadie mejor que Doblas en este mundo –Respondí-. No entiendo a qué viene tu comentario.
   -Yo solo digo lo que pienso –Se defendió el de la boina-. Él nunca te va a merecer.
   -Willy será mejor que cuides tus palabras –Dijo Auron entrando a nuestra conversación-. No tienes a tu suerte...
   -Nunca podrías conmigo Auron –Contesto Willy con confianza-. Además, Rubius me pertenece al igual que Fargan...
   Todos nos miramos entre sí, pero pude sentir como Rubius se tensaba.
   - ¿Qué tratas de decir tío? –Pregunto Luzu confundido-.
   -Sera mejor que no juegues conmigo, Rubius –Contesto Willy-. Ambos sabemos quién perderá...
   Rubius se levantó de una, asustándome a su paso.
   -Cuida lo que dices Díaz –La mirada de Doblas era completamente nueva para mí-. Vegetta no es tuyo...
   -Pero lo será - ¿Qué? -.
   Nadie parecía respirar.
   - ¡Basta! –Grite-. ¿Pero están tontos? Yo no soy de nadie. Así que déjate de tonterías Guillermo. Ahora estoy con Rubius y lo estaré para toda la vida.
   Un rostro herido apareció delante de mí, sin embargo, ni siquiera me moví. Esta vez no correría tras él, ya no.

¡Por fin pude resolver mi bloqueo! En fin, aqui esta la continuacion y ahora si, ya se a donde quiero llevar esto. 💖

Espero les siga gustando esta basuraaa ✨🤍