•ＩＭＰＯＳＩＢＬＥ• [RUBEGETTA/RUBIUSPLAY]

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 15

-RUBIUS-

   Las manos de Auron sujetaban fuertemente mi cadera mientras metía y sacaba su rica polla de mi interior, el orgasmo estaba cerca y yo lo sentía.
   -Te...te amo –Decía entre jadeos-.
   Sin pensarlo, lleve su mano hasta mi erección, en donde comenzó a masturbarme.
   Mierda.
   -Ah...
   -Gime para mí –Su voz sonaba ronca-.
   Una estocada más fue suficiente para que me viniera en su mano y casi al segundo, sintiera como Auron llenaba mi interior. Extrañaba follar.
   Nos quedamos unos segundos así, hasta que yo me levante y lo obligue a separarse, pronto, aquel sentimiento de vacío me abordo y sonreí. <<Ya tenía lo que quería...>>
   -Eres increíble –Decía subiendo su pantalón seguido de su bóxer-. Me encantas...
      No respondí. Lo mío no era quedarme a charlar con él, no después de follar.
   - ¿Te quieres quedar? –La urgencia se hacía notar en su voz. <<Nunca se cansan de ti, osito>>-.
   -Tengo cosas que hacer –Dije y comencé a vestirme, aun sintiendo sus ojos sobre mí-. Tal vez otro día...
   <<Follar con Auron: Listo.>>
   -Está bien –Dijo-.
   -Adiós.
   Sin esperar respuesta alguna, salí de su casa y me eché a correr al mar, necesitaba ducharme y estar listo para mi siguiente víctima: Fargan.

-VEGETTA-

   Seis meses han pasado y a mí me sigue pareciendo una eternidad. Seis meses sin sus besos, sin sus caricias, sin sus... palabras...
   Esto cada vez es peor, pero solo para mí.
   Día con día, el rumor de que Rubius se está acostando con medio pueblo crece más y más. Y, aunque no quiera aceptarlo, sé que es verdad.
   Cada vez que salgo al pueblo, lo encuentro coqueteando con cualquier chico (Por lo que se, ya paso con todos mis compañeros) y me muero del coraje, quisiera poder tomarlo de aquel despeinado cabello y besarlo, para después llevarlo a su casa y hacerlo mío de todas las maneras posible, hasta que no pueda caminar y su garganta duela de los gemidos que seguro le sacaría. Pero entonces la realidad me golpea y termino rendido ante unos ojos verdes que me esperan al regresar a casa.
   ¿Por qué acepte casarme con él? ¿Fue por Rubius? ¿Fue para salvarlo? Me arrepentiría de esa decisión toda mi maldita vida. ¿Cómo fue posible que deje ir a el amor de mi vida? Era Lobo nocturno, el ser más temido de todo Karmaland, pude haber hecho algo por él, por nosotros...
   Fui tan estúpido...
   - ¡Hombre Vegetta! –Grita Fargan en cuanto abre su puerta-. ¿Todo bien?
   Trago duro y me obligo a mantenerme serio.
   - ¿Es cierto? –Digo, haciendo que el dolor se filtre por mi voz-.
   <<No llores, no llores, no llores...>>
   Fargan baja la mirada y asiente. Mi pecho arde y me cuesta respirar. ¿Fargan también? Mierda.
   -Eras mi amigo...-Comienzo a decir, pero él me interrumpe-.
   -Ustedes ya no están juntos, ya no más.
   -Estuvimos juntos, eso debió ser suficiente para que no lo hicieras –Digo y sin querer, me atraganto con mis propias palabras-.
   -Sigo sin entender cómo fue que preferiste a Willy antes que a el –Exclama-. Rubius es simplemente...
   - ¡Cállate! –Digo y me pongo a la defensiva-.
   Odiaba saber que todo el maldito mundo había visto su cuerpo, que lo hubieran tocado, besado, amado...
   Odiaba admitir que se había convertido en la puta de Karmaland, lo odiaba muchísimo...
   -Ahora mismo debe estar brincando en la cama de Auron –Dice mirando su reloj-. O de quien sabe quien.
   -Pensé que éramos amigos, Fargan...
   -Nuestra amistad se perdió cuando me folle a Rubius –Escupe con orgullo-. Ya no hay nada entre nosotros, Vegetta. Nada.
   Y así, cierra su puerta, justo por enfrente mío.
   Una ola de ¿Dolor? ¿Coraje? ¿Enojo? Me cruza y sin saber muy bien lo que estoy a punto de hacer, me apresuro a su casa.
   Si todo el mundo se lo puede follar, ¿Por qué yo no?
   <<Si Rubén no era mío, no sería de nadie.>>

-RUBIUS-

   Me cagaba en la puta persona que estuviera del otro lado de la puerta, tocando el puñetero timbre.
   - ¡Ya voy, coño!
   Pero con la mano en el pomo de la puerta, pude ver como Coringa se levantaba animadamente y esperaba a que abriera la puerta <<Eso solo lo hacía con...>>
   -Ábreme –Decía del otro lado de la puta puerta-. Abre Rubén, quiero hablar contigo.
   Tan pronto como terminó de hablar, mi respiración se cortó.
   Era Vegetta, era triple duque, era el amor de mi vida...
   - ¿Qué quieres? –Pregunte, tratando de tranquilizar mi corazón-.
   -Quiero hablar contigo –Respondió-. Por favor...
   Y luchando contra mis debilidades, termine abriendo la puerta.
   Aquellos ojos que tanto había extrañado, me miraban fijamente, para después bajar por mi cuerpo, haciendo que me sintiera desnudo frente a él. Sus labios estaban entre abiertos, se notaba que había corrido y ni hablar del cuerpo de dios griego que tiene. Lo había extrañado tanto...
   -Vegetta...
   Un suspiro entrecortado broto de mis labios.
   -Doblas...
   Solo basto escuchar eso, para que sintiera como mi cuerpo recobraba vida, como aquel sentido que perdí, regresaba. Solo basto sentirlo cerca para volver a ser feliz, solo lo necesito a él y nada más. Samuel de Luque estaba aquí, frente a mí, con una mirada llena de lujuria y pasión, esperando a que lo dejara entrar, esperando a que hablara. Seis meses llenos de tristeza y oscuridad habían cubierto del todo mi vida, seis meses sin él era casi una eternidad. 

HERMOSOOOOS <3

Aquí esta el capitulo de esta semana y pues nada, acabo de entrar a la Universidad y estoy muertaaaa. Espero les guste y no se les olvide votaaaar. 🤍✨