Lie For Love »(YoonMin)«

23

— Lo estuve pensando bien y... decidí hacer el trabajo, necesitamos esa nota así que vine para empezar con el trabajo.

— C-Claro.

Sonreí.

— No te emociones. No creas que porque acepte hacer esto es para recuperar nuestra amistad que se perdió aquella noche.

— Si... lo imaginaba.

Mi sonrisa desapareció al escuchar eso.

— Puedo...

— ¡Si, claro!. Pasa, dejaré libre la mesa de centro para empezar con el trabajo.

Cerré la puerta atrás mío.
Caminé unos pasos y choque con la espalda de YoonGi quien se había quedado estático, iba a preguntar lo que era evidente.
YoonGi notó la presencia de Jimin quien corrió a la cocina con los ojos cristalinos.

— Ponte cómodo, ya vengo.

Dejé a YoonGi sentado en el sofá para entrar a la cocina un tanto preocupado.

— Que hace el aquí.

— No sabía que el vendría, lo juro. Anoche fui a su departamento para hablar con el porque nos dejaron una tarea en equipo y el se negó, me votó de su departamento pero no pensé que vendría.

— No importa, ya está aquí y no puedo echarlo porque está aquí por temas de estudio.

— Le diré que nos reunamos en otro lugar, no quiero que te sientas incómodo ni mucho menos triste.

— Estoy bien, no te preocupes. Termino de comer y me iré a mi habitación.

— ¿Seguro?. Si quieres yo puedo...

— No, no. Estoy bien Taehyung,

Acaricié sus mejillas y bese su frente.

Di media vuelta para salir de la cocina pero me detuve al ver que YoonGi nos estaba mirando de reojo, al darse cuenta que lo ví volteo rápidamente.

Quité las cosas que estaban sobre la mesa de centro y los lleve al fregadero de la cocina, bese la frente de Jimin al pasar por su lado y me arrodillé sobre la alfombra quedando a la altura de la mesa de centro.

— Solo será un cuadro así que estuve pensado en hacer una mitad tú y la otra mitad yo.

— Uhmm, claro. Entonces buscaré la cinta masking tape para dividir el cuadro.

Me levanté del suelo y corrí a mi habitación.

•••

Ahí estaba él, sentado al frente de la mesa con la cabeza agachada y su mano que sostenía los palillos jugaba con la comida del plato, pude notar que Jimin comía con dificultad.

¿Le molestará que esté aquí?

Eso ni debería de importarme, el fue quien estuvo viéndome la cara de idiota por meses haciéndose pasar por alguien que nunca existió.

Sentía un cosquilleo en el pecho, unas ganas de ir hasta él y abrazarlo, besar esos labios que me gustaron desde el momento que entró a aquel bar. Fruncí el ceño ante mis absurdos pensamientos y aclare mi garganta con un carraspeo.

Levántate la vista disimuladamente para ver a Jimin pero sentí como mi corazón se detenía al ver como el también tenía su mirada clavada en mi. Sentí mis mejillas sonrojarse, bajé la mirada rápidamente ignorando su presencia y sonreí como un idiota.
No podía negar que estaba enamorado de él pero no quería creer que eso fuera verdad, no podía estar enamorado de un hombre pero Jimin... por más que no tenga la peluca puesta en su cabeza era hermoso, tal cual como la primera vez que la ví.
Su cuerpo era digno de apreciar, mis ojos estaban agradecidos de ver y mis manos también al poder tocar aquella cintura fina.

— ¡YoonGi!

Me sobresalté al escuchar el grito de Taehyung quien tenía una ceja levantada.

— ¿Estás bien?

— S-Si. ¿Porque?

— Hace diez minutos estoy estoy tratando de explicarte sobre el cuadro pero sigues mirando al suelo con esa sonrisa pegada en tu cara.

Y si, tenía toda la razón.

Hice puchero con los labios para luego ponerlos normal, serio, rasqué mi nuca nerviosamente.

— Nada... me recordé de... un chiste.

— ¿Bueno?. Cómo te decía, podemos añadirle unos colores suaves...

Miré por encima del hombro de Taehyung y sentí un vacío en el pecho al ver que Jimin ya no estaba.

— ¿Estás de acuerdo?

— ¿Eh?... Que diga, si, estoy de acuerdo con tu idea.