La rival de Yui || DL 2da Temp

16

Sakura

Después  de ese pequeño... Jugueteo con el mayor de los hermanos  en ningún momento me permitió irme de su lado, sus ojos eran como los de un halcón. Bufé  cansada.

—Deja de hacer eso, idiota. Te lo dijimos desde el primer momento en que pisamos  esta mansión: No debes alejarte de nosotros,  nunca. ¿Y qué es lo primero que haces en cuanto pisas el salón? Te escapas.

— Yo no me escapé.  Ustedes no me cuidaron bien —corregí.

— No hagas que tu castigo sea peor, Sakura. —amenazó bebiendo de la copa.

— Yo solo digo... No pueden echarme la culpa por un trabajo mal hecho. Si ustedes no pueden cuidar de una pequeña e inocente humana y-

— He dicho. Que te calles —Atrapó mis mejillas en su mano derecha obligándome a ver su mirada amenazante y apretando fuerte el agarre. Un pequeño quejido salió  de mi garganta ante el dolor que estaba sintiendo—. Y debes obedecer, no me gustan estos juegos tuyos.

Soltó bruscamente el agarre mirándome con superioridad.  Tsk. No soy un maldito muñeco.

— Bien.

— Buena niña.

¿Buena niña? Eso me gustaba... Ugh. Creo que de tanto estar con los vampiros ya me estaba acostumbrando a su masoquismo.

—Necesito ir al baño —me miró severo—. ¡Lo juro! No voy a intentar  nada.

Suspiró irritado.

— Bien. Vamos —me detuvo antes de entrar a los baños—. Si no sales dentro de  5' entraré  y no me importa qué  o quién esté.

Rode los ojos ante su advertencia y asentí  liberandome de su agarre y entrando a los baños.

¡El tiempo  corre! ¡¿Que hago?! ¡¿Como puedo escaparme?! Algo debe haber... Vamos, Vamos...

¡Lo tengo! Cambiar de atuando con la primera que entre.
Uh, no. Puede tratarme de loca y además de que sería muy obvio.

¡Ah, ya sé! Me quedo detrás de la puerta esperando que el de cabellos negro azulado entre y cuando empiece a buscarme, salgo rápidamente antes de que me note. Es un plan algo triste y sin ingenio pero... Era lo único que se me ocurría.

Cinco minutos después

¡No puedo creer que haya funcionado!
Una sonrisa victoriosa se apoderó de mi rostro. ¡Ese plan tan idiota funcionó! ¡Sí!
Justo antes de que Ruki  me note, cerré  la puerta y escapé.

Cuando veía a alguno de los Mukami buscarme con la mirada me escondía detrás de algunas personas, tratando de ocultar  mi anatomía. Creo que escapar dos veces de ellos empeoraría las cosas... Y ni hablar de Ruki,  ese chico me destrozaría.

— Hola, dulzura. ¿Te escondes de alguien?

— Uhmm... ¿Si...?

— ¿Necesitas ayuda? Pareces una psicópata escondiéndote detrás de las personas —comentó burlón.

— Me dijeron que no acepte nada de desconocidos.

— ¿En serio? —¿Que es lo que le causaba gracia? No entiendo.—. De acuerdo, pequeña inteligente. Soy Haru.

Extendió su mano sonriente y dudosa acepté. El antifaz ocultaba la mayor parte de su cara y la actitud que estaba usando no me generaba mucha confianza.

— Sakura.

Sonrió.

— ¿De quién te ocultas, niña?

— De... De unos amigos.

— ¿Quienes son? Tal vez los conozca.

— Los... Mukami.

— ¡Que sorpresa! Son amigos míos.

— A-ah... que bien —sonreí incómoda y mi vista se fijó en Yuma. ¡Mi salvación y próximo juego!. Volví  mi vista al chico perturbadoramente extraño y señalé con mi dedo feliz—. Ahí está Yuma, iré  con él.  Que tengas suerte, Haru.

En cuanto hice un paso este agarró de mi muñeca. Giré mi cabeza confundida.

— ¿Ocurre algo?

— Oh, nada dulzura... Pero, creo que podría ayudarte esconderte de ellos.

— Si sobre eso... Ya lo pensé  mejor y creo que no es necesario —intenté parecer calmada. Pero en mi interior estaba gritando en busca de ayuda y gritando el nombre de Yuma desesperadamente, estaba a tan solo unos metros míos.

— Carla, no encuentro a la mocosa  —apareció un chico de pelo salmón, hablando desilusionado. Al verme sonrió— Oh, veo que ya la encontraste...

¿Carla?

— Shin, ayúdame con esto. ¿Quieres?

— Espera, dijiste que te llamabas Haru.

— ¿Haru? —rió— ¿No pudiste haber inventando un nombre mejor, hermano?

— Shin, no es el momento de tus estupideces.

El de ojos ambar se acercó  a mi.

— Alejense. ¡¡Yu- —taparon mi boca impidiendo llamar al castaño en busca de ayuda.

— Sh... No queremos que hagas un alboroto, ¿Cierto? —susurró en mi oído el de cabellos blancos. Y noté que el de pelo color salmón me inyectó algo, me quejé al instante  en que sentí  la aguja perforar mi piel.

Forcejee tratando de salir de su agarre pero se me hacía imposible. Eran demasiado fuertes y yo una simple humana.

— Sh... duerme, pequeña Sakura.

•••
¡hola y adiós!

Se que dije que no iba a publicar nada hasta terminarla pero... QUIERO QUE VEAN LO QUE SE VIENE Y JURO POR DIOS QUE ME EMOCIONA HASTA A MI ESCRIBIRLOS.

El capítulo en el que me encuentro ahora (28) y acabo de terminar es la mismísima gloria. Al menos para mi.
ME EMOCIONA TANTO SABER QUE VAN A OPINAR O COMO VAN A REACCIONAR yisus...
En fin, ya me encuentro  escribiendo el capítulo número 29. Espero que disfruten este cap y estén tan ansiosas como yo de leer los siguientes cap.
¡que anden bien!