TWO OF US

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Todo había pasado muy rápido. Es cierta la frase, un dia estamos al otro no. En solo pocos días la enfermedad de abuelo de Renato se lo llevó. Su abuelo estuvo unos días internado hasta que finalmente cerró sus ojos para nunca volver a abrirlos. Renato había estado ahí junto a Agustín, juntos intentaron contenerse.

Flashback

El abuelo de Renato cayo internado y este ultimo iba todos los días a visitarlo por las tardes. Los primeros días su abuelo parecía estar bien, pero con el paso del tiempo se puso cada vez peor. Agustín a veces llevaba una guitarra para poder cantar junto a Renato, eso colocaba una sonrisa en el rostro del anciano.

Ese día, al recorrer los pasillos Renato tuvo una sensación extraña, los pasillos estaban mucho más fríos que antes y muy vacíos, las personas que solían recorrerlos habitualmente no estaban. Parecía desierto. Agustín se iba a retrasar un poco porque estaba terminando algo con Gastón.
Renato ahora se encontraba frente a la puerta de la habitación de su abuelo. Al abrir la puerta se encontró con los ojos de su tía Ines, sentada en una silla justo al lado de la cama de su abuelo, tenía una revista en sus manos. El abuelo de Renato se encontraba descansando, tenía colocada una sonda nasogástrica. La mujer tocó la mano del hombre con delicadeza para anunciarle la llegada de su nieto.

—Papá, tenes visitas —dijo Inés sonriendo hacia Renato.

El hombre abrió despacio los ojos, miró primero en dirección de quien le hablaba. La mujer apuntó con la cabeza hacia donde se encontraba parado Renato. El hombre volteó y al ver a su nieto sus ojos se iluminaron, una sonrisa llenó su rostro. Renato tambien sonrió, se acercó y se sentó en la cama, justo al lado de las piernas de su abuelo.

—¿Agustin ya viene? —preguntó Inés.

—Sisi, estaba con Gastón terminando unas cosas. Ya debe estar viniendo —dijo Renato.

—Bueno mi amor entonces me voy yendo. Cualquier cosa nos llaman —dijo parandose y saliendo de la habitación.

—Si tía. Nos vemos. Cuidate —dijo Renato despidiéndose con un beso en el cachete de la mujer.

—¿Cómo va el disco hijo? —preguntó el abuelo, tenía la voz algo seca. Renato se paró para servirle algo de agua en un vaso. También apretó un botón con el cual la cama se levantó hasta dejar al hombre sentado. —Gracias —dijo ya con la voz más normal.

—Va muy bien. La promoción con la canción esta yendo bien pero no tanto como esperabamos... —dijo algo triste Renato. —Estamos buscando una canción para cerrarlo pero no encontramos la ideal —.

—Dale un tiempo. Apenas salió hace unos días. Seguro despues sube en los ¿como es que le dicen ustedes? ¿Chats?—dijo el hombre. Renato se rió.

—Charts abuelo. Y no estamos en ninguno, no tenemos tantas reproducciones como otros. Pero esta bien recién empezamos, no creo que ningún artista haya tenido un numero uno con su primer single —dijo Renato.

—Es dia a dia hijo. No te rindas. Yo se que vas a llegar lejos —dijo el hombre sonriendo. Luego le agarró un ataque de tos. Renato se asusto un poco, cuando se calmó le sirvió otro vaso de agua.

—¿Alguna vez te conte cual es mi canción favorita? —preguntó el hombre.

—No. ¿Cuál es? —preguntó Renato.

—Es de mi cantante favorito. Vení acercate —dijo el hombre para decirle a Renato en su oído.

—¿En serio? —preguntó Renato luego de escuchar lo que había dicho el hombre. Tenía una sonrisa en su rostro.

I knew you were troubleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora