Innocent Love

Jardín Inquebrantable ( FLASHBACK EDITION)

-¡Agh, maldita sea!- Y le dio otra patada al arbusto. Suspiró unas cuantas veces para intentar retomar la calma, pero una vez que cerraba los ojos, se transportaba a la escena. Eso era mal, era mucho peor que malo. Era pésimo. Significaba que aún no lo había superado, que seguía teniendo miedo a retomar las tareas de Doffy y los demás.

No había ido a la escuela, su clase había dicho que la mayoría de profesores iban a estar ausentes, así que, ¿Para qué ir?

Le había pedido a Zoro llevar a su pequeño con una vieja doctora. Fué muy difícil convencer al menor, pues a cambio quería que Law mantuviera su distancia con Luffy.- Mira a este idiota...-

-Law, deja de estar golpeando los arbustos y ven a ayudar.- Un hombre arrugado y calvo jaló desprevenidamente la camisa negra del niño y se lo llevó a una gran cocina blanca con anaranjado.

|||||||||||||| I |||||||||||||||||

-Mañana podemos ir con este.- El rubio marcó con su plumón rojo, una equis en el local impreso. Ace miró de mala gana la foto y luego a su hermano.- ¿Habrá algún otro doctor que nos diga otra cosa distinta?- -Tiene que haber. No podemos rendirnos tan fácilmente. Por Luffy.- Cerraron la carpeta y tomaron sus mochilas. Hicieron un raro saludo y cada uno fué a su respectiva clase.

Un momento después Sabo observó a un peliverde correr a toda velocidad a su dirección.- Zoro...- Cuando el mencionado llegó frente a él, habló agitadamente.- Sab-Sabo, Law...recetó la doctora...pero...- - Zoro, Zoro, Zoro. Respira y habla, no te estoy entendiendo nada.- Zoro bufó y jaló al rubio de vuelta a la lújubre sala.

|||||||||||||| II ||||||||||||||||

-Vivi, ¿Me acompañas al baño?- Nami se plantó frente al lugar de una pequeña, pálida y escuálida niña. Quien al levantar la mirada, sonrió burlescamente.- Por supuesto, Nami.-

Y así, Vivi caminaba siguiendo a la pelirroja, cuyo camino, no era los baños. Llegaron a la cancha de fútbol, la cual se hallaba escondida entre pinos. Nami la jaló frente a ella.- Escúchame bien, zorra. No vuelvas a hablar de mí o de mi familia sin tener los pantalones de decirlo frente a mi cara.- Ahí estaba de nuevo, la típica sonrisa retorcida de la pequeña.- ¿Estás enojada por que dije que tu madre se había muerto de la manera más estúpida y que ahora tu hermana debe de vender su estúpido y asqueroso trasero para alimentarlas? No entiendo qué te pudo enojar.- Ya está. Levantó su puño derecho y éste se estrelló contra la perfecta nariz de Vivi, haciéndola caer de espalda. Se retorció de dolor y poco a poco se levantó. Pero fué muy tarde, Nami ya estaba encima de ella y la golpeaba en toda la cara y jalaba su brillante cabello azulino.

- ¡Eres despreciable!

A muy, muy duras penas, Vivi tomó uno de los calientes puños y le dió un rodillazo desde atrás a Nami, quien cayó de costado y ahora era Vivi quien la golpeaba brutalmente.

Unos brazos tomaron los de Vivi y sin mucha fuerza, la alejaron de Nami, mientras que otros brazos tomaron a la pelirroja. - ¡Basta, basta, basta!- Franky jaló a Nami y la apretó en un fuerte abrazo, ella no se dejaba de mover y aventar al mayor. Mientras que Sanji sostenía por los brazos a Vivi, quien no ponía fuerza alguna.

-¿Qué demonios está pasando?!

-¡Esa maldita está hablando pestes de mi!

-¡Sólo estoy promulgando la verdad! ¡Que te duela es otra cosa!

-¡¿Y quién mierda te lo pidió?! ¡No tenías ninguna maldita autorización!-

La cabeza le dolía y le daba vueltas. La ira había inundado todo su ser, se sentía ahogada por ella. Temblaba y las lágrimas se desbordaban solas, haciéndole la vida nublada.